Como los cascos azules, yo también sueño con la paz de cada día
Decía el inolvidable poeta, novelista y ensayista mexicano, Amado Nervo, que tan importante como el pan de cada día, era la paz de cada jornada, sin la cual hasta el mismo mendrugo nos resulta amargo. Ciertamente, no le faltaba razón. Hemos sido creados para la armonía, para vivir dependientes de lo armónico, aunque cada día ...
Leer másDetails