Este viernes 22, en plena resaca de las extrañas elecciones catalanas, se celebra el tradicional sorteo extraordinario de la Lotería de Navidad, que abre oficiosamente las fiestas navideñas, aunque el consumismo compulsivo que le acompaña se desató ya hace unas semanas. Cada gaditano -a priori y según la consignación- juega de media este 2017 en este mediático sorteo algo más de 36 euros de media, una cifra levemente superior a la de diciembres anteriores, aunque continúa siendo de las provincias que menos invierten de todo el Estado.
Según recoge DIARIO Bahía de Cádiz de Loterías y Apuestas del Estado, el gaditano -a priori-, como en años precedentes, es de los que menos invierte en el Gordo, pese a que este sorteo tiene precisamente sus orígenes en la capital gaditana, hace más de doscientos años. En este 2017 juega de media 36,24 euros. En total, se han consignado cerca de 225.000 billetes, que traducido en dinero, supone 44,9 millones de euros –si se vende todo, claro-. El pasado diciembre, finalmente, cada gaditano gastó 31,59 euros en tentar a la suerte. Mientras, se prevé que cada andaluz gasta este año una media de 49,6 euros en el sorteo; y cada español, 66,16 euros.
Y eso que Cádiz es una de las capitales de provincia donde más veces ha caído el Gordo, en diez ocasiones; aunque el último hace ya más de 30 años, en 1986. Jerez y Algeciras son las otras dos ciudades gaditanas donde ha caído en alguna ocasión el preciado primer premio.
El pasado 2016, el premio Gordo se lo llevó el número 66.513. Distintas administraciones de la provincia de Cádiz (en la Bahía, en la capital, San Fernando y Chiclana) vendieron décimos de diferentes premios (el segundo, un cuarto y hasta cinco quintos); en total, más de 7 millones de euros se quedaron en tierras gaditanas. Aunque del Gordo, el 66.513, no ha caído nada de nada.
Este popular sorteo se desarrolla desde el Teatro Real de Madrid por el sistema de bombos y curiosamente el de mayor tamaño se estrenó en 2006 y lo fabricó la empresa Fluidmecánica Sur de Chiclana. Consta de 170 de 100.000 billetes cada una, al precio de 200 euros el billete, dividido en décimos de 20 euros. El total de la emisión asciende a 3.400 millones de euros y lo destinado a premios asciende a 2.380 millones, el 70% del total. El 30% restante se destina a gastos de gestión, administración y Tesoro Público.
Como desde hace unos años, el Ministerio de Hacienda se queda con el 20% de los premios, a partir de los 2.500 euros. O lo que es lo mismo, el Estado, sin comprar ni un solo número, se embolsará unos 200 millones de euros en el caso de que todos los décimos premiados hayan sido vendidos. Así, por ejemplo, un afortunado con un décimo premiado con el Gordo ‘sólo’ ganará 320.000 euros, en vez de los 400.000 euros de los últimos años. Hacienda se queda con 80.000 euros de su premio.
El premio Gordo que repartirá 4 millones de euros por serie, pero hay más. El segundo premio asciende a 1,25 millones de euros y el tercero es de 500.000 euros. Además, hay dos cuartos premios de 200.000 euros y ocho quintos de 60.000 euros, entre otros menores.
¿Cuántos años se puede vivir sin preocuparse por trabajar tras ganar el primer premio? Según un curioso estudio de Cuponation, en España una persona puede vivir de media 28 años y cuatro meses sin ningún tipo de ingreso extra tras cobrar un décimo del Gordo (que en el caso de residir en Andalucía puede extenderse hasta 32 años, teniendo en cuenta un gasto anual medio por habitante de 9.925 euros). Con el segundo premio, se puede vivir hasta nueve años sin trabajar; tres años y medio con el tercer premio; uno y medio con el cuarto premio. Y con un quinto premio, posiblemente no sea posible dejar de trabajar, porque tan solo cubre medio año según los gastos medios de los españoles al año.
VINCULACIÓN CON CÁDIZ
La Lotería Nacional se creó en las Cortes de Cádiz en noviembre de 1811 y su primer sorteo tuvo lugar el 4 de marzo de 1812. El primer Gordo fue para el número 9.606 ascendiendo el precio del billete a 40 reales y el del premio a 8.000 pesos fuertes.
El objetivo de Las Cortes al crear este nuevo juego hace doscientos años fue aumentar los ingresos del Tesoro Público sin tener que incrementar los impuestos, y fue denominada por el pueblo Lotería Moderna para diferenciarla así de su antecesora, La Primitiva, instituida desde 1763. Hoy, este sorteo, en el fondo, continúa siendo otro impuesto estatal indirecto que la ciudadanía paga voluntariamente.