Un total de 33 familias han aplazado en el mes de abril el pago del recibo de su alquiler en San Fernando, en viviendas públicas gestionadas por la empresa municipal Esisa. Han podido alegar verse afectadas por las consecuencias socio-económicas de la crisis del coronavirus.
El Ayuntamiento había tomado esta medida al inicio del vigente estado de alarma, y había informado a todos los inquilinos y usuarios de viviendas municipales y de la Junta de Andalucía gestionadas por Esisa de que podían requerir esta demora en el pago que ya se les ha aplicado este mes.
En esa línea, y en cumplimiento de las medidas del Real Decreto aprobado por el Gobierno de España relativo a medidas de apoyo al mantenimiento de la vivienda durante el confinamiento, se ha abierto un nuevo plazo hasta el 2 de mayo para que los inquilinos que sigan sufriendo estas graves consecuencias puedan avisar a Esisa de que se vuelva a aplazar el abono de la renta del mes de mayo.
De esta forma, los arrendatarios que quieran acogerse a esta medida deben contactar por vías telemáticas con la Empresa de Suelo Isleña (al teléfono 956945000 o al email correo@esisa.es) para informar de su situación y de si quieren que por el momento se les aplace el cobro de los recibos. Igualmente, las familias que se acogieron a la medida en el primer plazo (que finalizó el 5 de abril) y quieran volver a aplazar el pago en mayo, deberán notificarlo de nuevo.
Por otro lado, en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz se reitera que se ha dado ya las indicaciones para que en las actuales circunstancias Esisa no inicie ningún procedimiento de ejecución por impago de recibos.
Una vez que ya se decrete el final de las restricciones y del periodo de estado de alarma, se pueden producir dos situaciones: se podrá establecer un acuerdo de estos pagos aplazados en diversos plazos sin recargo alguno; o bien quienes se hayan visto muy afectados en su situación económica podrán acceder a la línea de subvenciones en la que el Gobierno municipal ya está trabajando. Estas ayudas permitirán subvencionar, en base a unos criterios que se están analizando actualmente y en los casos justificados, el pago de la renta a los que resulten más afectados por la pandemia.