Ante “más de 7.000 personas”, el Centro de Formación de Tropa (Cefot) número 2 de Camposoto, en San Fernando, ha celebrado este sábado la jura o promesa ante la bandera de los aspirantes a militar profesional de tropa pertenecientes al primer ciclo de la convocatoria de 2019. A principios de junio iniciaron esta fase de formación general militar 871 jóvenes, y finalmente han superado la misma 825, entre ellos 69 mujeres.
Durante el transcurso del acto, el coronel director del Cefot-2 ha entregado un ramo de flores a una madre en representación de todas las de los alumnos jurandos, y un diploma al aspirante que ha terminado esta fase como número uno.
Los nuevos soldados han firmado su primer compromiso con las Fuerzas Armadas, marchándose a sus hogares para disfrutar de un corto permiso, tras el cual afrontarán la fase de formación específica de sus respectivas especialidades fundamentales, estando prevista su incorporación a las unidades de destino a primeros de noviembre de este mismo año.
Esta jura de bandera ha estado presidida por el General de Brigada, Antonio Jesús Cabrerizo, subdirector de Enseñanza del Ejército de Tierra. Entre las autoridades civiles presentes, según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz, miembros de la Corporación municipal, el presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos Isla de León, y una nutrida representación militar de todos los ejércitos y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
La fuerza en formación, al mando del comandante Juan Hidalgo Rodríguez, jefe del Batallón de Alumnos, estuvo compuesta por la escuadra de gastadores del centro, banda de cornetas y tambores, unidad de música del cuartel general de la fuerza terrestre (Sevilla) y cuatro compañías de aspirantes a militar profesional de tropa pertenecientes a este primer ciclo del ejercicio.
Los 825 aspirantes a militar de tropa profesional han jurado o prometido ante las banderas del Cefot-2 y del Regimiento de Infantería Nápoles nº 4, y los estandartes del Regimiento de Artillería de Costa nº 4 y del Regimiento de Transmisiones nº 1, en representación de alguna de las unidades a las que irán destinados estos futuros soldados a la finalización de su formación.
Durante la formación general de estos primeros dos meses, han recibido enseñanzas teóricas y prácticas necesarias para que un soldado “pueda desenvolverse y combatir individualmente, así como para obtener una adecuada forma física y la destreza necesaria en orden cerrado, orden de combate y ejercicios de tiro”.