ENTREVISTA. El escritor gaditano Eduardo Formanti se ha forjado una reputación de excelente escritor de relatos, como atestiguan los numerosos premios alcanzados en certámenes literarios por toda España. Este jueves 16 de octubre presenta su primera colección de cuentos, agrupadas en el libro ‘Cuentos abandonados’ publicado por editorial Dalya. Será a partir de las 19.30 horas, con entrada libre (AQUÍ puedes imprimirte la invitación), en el centro de Congresos de San Fernando, con la presentación de la obra por parte de la escritora isleña Carmen Orcero. Nos anticipamos a este acto y conocemos un poco más de este trabajo hablando con su autor.
DBC: ¿Por qué “cuentos abandonados”?
EDUARDO FORMANTI: Yo soy de la opinión que los cuentos nunca se terminan, porque siempre los estamos modificando en algún aspecto: una palabra, un verbo, una descripción. Nunca los vemos acabados, de ahí que la única opción que nos queda para poder pasar al siguiente reto es abandonarlo.
DBC: ¿Qué vamos a encontrar en este libro?
E.F.: En este libro se encontrará con una selección de mis cuentos más estimados, cuya temática y tratamiento seguido a la hora de elaborarlos es distinto en cada uno de ellos. No me apasionan los libros de relatos de una sola atmósfera o tema, de personajes idénticos con las mismas dudas y pasiones, porque cuando te has leído unos cuantos, ya no te sorprenden, no te atrapan. Me gustan los libros de relatos cuyos temas sean variados, con personajes y situaciones completamente distintas y equidistantes una de otras. En este libro de cuentos, igual que viajamos por Egipto o por la ciudad de Praga o Madrid; en otras ocasiones, no saldremos de una habitación o de una celda.
DBC: ¿Cómo surgen estos cuentos abandonados?
E.F.: La realidad es muy rica y fabulosa en sí misma. Cualquier gesto cotidiano, cualquier acción o expresión que se cruce en tu camino, puede ser el desencadenante de una historia. Todo es susceptible de ser narrado. Antonio Muñoz Molina decía que los anuncios por palabras de los periódicos encierran un sinfín de historias que contar. Y citaba en concreto un anuncio que lo cautivó: “se vende una pistola recién usada”. Este anuncio en sí mismo espolea la imaginación, ¿qué podría llevar a una persona a escribir un anuncio así?, ¿quién era?, ¿por qué y a quién disparó?… lees algo así e inmediatamente sientes la necesidad de escribir sobre ello. Esa necesidad es la semilla del cuento.
DBC: En este libro aparecen distintos escenarios y paisajes, absolutamente distintos.
E.F.: Sí, me gusta escribir sobre los sitios en los que he estado, utilizar estos escenarios en mis historias. De cada viaje que he emprendido, siempre he regresado con un manojo de fotos y una historia rondando en la cabeza. De estos periplos han salido varios cuentos de este libro, como Cita en el Nilo, el héroe de Praga, Volver a Carmo, etc. Es como si el viaje no culminara hasta que no escribiese una historia en torno a él.
DBC: Al leer estos cuentos vemos que utilizas distintos estilos, narradores…
E.F.: Me gusta utilizar todas las herramientas que me proporciona el lenguaje a la hora de contar una historia. Según el grado de acercamiento o complicidad a la que quiero someter al lector, utilizo, por ejemplo, a la primera persona para reflexionar, para inmiscuir al lector en las entrañas del personaje, y a un narrador omnisciente cuando quiero desviar el foco de la acción, entre varios personajes.
DBC: ¿Qué piensas del “boom” que están teniendo los relatos en la actualidad?
E.F.: Afortunadamente, aquella idea errónea de considerar al relato como una especie de laboratorio de ensayo, antes de escribir una novela, ha quedado defenestrada. El relato es un género literario en sí mismo, que requiere una técnica muy precisa. Un cuento te tiene que atrapar desde el primer momento, la primera frase. Requiere una gran intensidad y una concisión del lenguaje a lo largo de todas sus páginas, necesarias para captar la atención del lector desde el inicio. Hay grandes autores de novelas que han fracasado a la hora de enfrentarse al relato, por el grado de dificultad que encierra. El cuento es un mundo cerrado donde todo está relacionado y todo tiene un porqué.
BREVE PERFIL
Eduardo Formanti Llorens (Cádiz, 1966), licenciado en Filosofía y Letras por la Universidad de Cádiz, ha colaborado en numerosas revistas literarias como Yaraví, Arena y Cal, Ínsula, Ámbito, La hoja azul en blanco, El ático de los gatos, Tántalo, Cromomagazin, etc.
A lo largo de su carrera literaria ha obtenido numerosos premios nacionales e internacionales, entre otros, el XXVIII Certamen de Cuentos Puente Zuazo de la Academia de San Romualdo, el XIX Certamen de cuentos Ana de Velasco de Navarra, el XI Concurso Nacional de relatos Caños Dorados de Fernán Núñez de Córdoba, el I Certamen de relatos solidarios de Puerto Real, el V Certamen de relato breve Feria del libro de San Fernando, el I Certamen de narraciones breves Villa de Algodonales, el Certamen Pluma de Oro de Alcorcón (Madrid), etc. Actualmente es miembro del Ateneo Literario, Artístico y Científico de Cádiz. DIARIO Bahía de Cádiz