La flota de autobuses urbanos de San Fernando ha estrenado estos días sus primeros vehículos híbridos eléctricos, con el objetivo de mejorar la “comodidad” de los usuarios y del propio personal, así como de reducir los costes de mantenimiento y las emisiones de un servicio deficitario e infrautilizado cada año. “Se gastan un dineral para que no se monte nadie”, afirmaba en la mañana del domingo una señora mientras llegaba a la parada uno de los tres flamantes nuevos autobuses, que pasan de ser azul a verde (el nuevo color corporativo del Ayuntamiento desde hace unos meses).
La alcaldesa, Patricia Cavada, acompañada del concejal de Movilidad, Francis Posada, y el concejal de Participación Ciudadana, Antonio Rojas, así como de los responsables de la empresa concesionaria del servicio, Tranvía de Cádiz a San Fernando y Carraca, presentaba días atrás estos tres primeros vehículos híbridos (con autocarga y alimentación eléctrica a tiempo parcial).
Los nuevos autobuses tienen capacidad para alrededor de 100 personas, de las cuales unas 33 pueden viajar sentadas. Además, “son modernos, más cómodos para las personas usuarias, con mayor ergonomía y un magnífico diseño”, y ya incorporan la identidad corporativa de la ciudad que también se irá extendiendo al resto de autobuses de la flota actual. Incorporan entradas de USB a disposición de los viajeros, y una rampa eléctrica opcional para personas con movilidad reducida “que permite incluso un uso manual ágil y eficaz”.
Del mismo modo, también son más ergonómicos, confortables y fáciles de controlar y conducir, y tienen un sistema de alerta de peatones o ciclistas que reduce el riesgo de colisiones, se resalta en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz.
Por otro lado, el uso de estos vehículos tiene otras ventajas como una mayor eficiencia del combustible, flexibilidad en el funcionamiento, rendimiento medioambiental o mayor tiempo de actividad.
Precisamente la primera edil socialista ha resaltado que la característica más importante de estos tres nuevos autobuses es que se trata de vehículos híbridos, lo que les permite “ser más eficientes y, sobre todo, sostenibles, para contribuir al objetivo de que San Fernando se transforme con una ciudad con cero emisiones y cero ruidos”. “Pueden llegar a cubrir el 40% de la distancia y el 50% del tiempo del servicio en modo eléctrico”, ha precisado.
Cavada ha insistido en que esta renovación de la flota supone “una apuesta por la sostenibilidad, y un paso más en la lucha contra el cambio climático que hemos emprendido en San Fernando, que es una ciudad comprometida con este objetivo”. Sobre ello, la idea del equipo de Gobierno es que todos los vehículos de los servicios públicos municipales y concesionarias, “siempre que sea posible”, sean híbridos o eléctricos.
SIN CAMBIOS EN LAS LÍNEAS
Actualmente, y desde hace años se mantienen dos únicas líneas que recorren la ciudad durante todo el año (la 1 entre Bahía Sur y la Casería pasando por La Ardila y Bazán; y la 2 entre Gallinera y Bazán pasando por Camposoto y León Herrero), a las que se suman las líneas temporales en verano para la playa de Camposoto y la de la Feria (cuando hay feria).
Sin embargo, la Federación de Asociaciones de Vecinos Isla de León, entidad que asume que hay que fomentar el uso, hoy pobre, del autobús urbano y conectar mejor el centro con las barriadas, planteó hace tiempo ya la creación de una línea circular, en ambos sentidos; idea que se quedó en nada.
Y estos días es la nueva Federación de Vecinos Esteros y Salinas la que ha instado a una mínima modificación solicitando que se habilite una parada en las inmediaciones del nuevo Mercadona abierto en Fadricas II.