La residencia de mayores de la Cruz Roja en San Fernando ahora está libre de coronavirus y vuelve a la normalidad, tras la recuperación de los últimos residentes contagiados. Las pruebas realizadas esta semana confirman que, en la actualidad, no hay ningún anciano atendido positivo.
Este centro ha concentrado durante la actual pandemia uno de los principales focos de contagio de Covid-19 en La Isla: a mediados de abril se llegaron a contabilizar 49 positivos entre usuarios (de 151) y 13 entre trabajadores del geriátrico; en todo San Fernando hay 204 confirmados desde el inicio de esta crisis.
De hecho, entonces la consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía optó por medicalizar la residencia, una medida que consiste en la adaptación clínica del espacio residencial y la coordinación asistencial con la atención primaria y hospitalaria de referencia.
Ahora, desde Cruz Roja se informa en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz de que tras los últimos test no hay nuevos casos, y ello ha permitido al centro “poder normalizar su situación”, reanudando los servicios y su actividad ordinaria, y cerrando así la primera planta destinada en las últimas semanas, a aislar a los residentes afectados.
Esta “normalización”, sin embargo, se está haciendo paulatinamente, por grupos, para garantizar al máximo la seguridad de todas las personas mayores. Desde la semana pasada, parte de los residentes están haciendo vida normal, haciendo uso de las zonas comunes, así como de los servicios del centro. Y está previsto que para el 18 de mayo, estén todos ellos en la planta baja, “haciendo su vida normal y cotidiana de siempre”.
“En estos momentos, nuestro primer pensamiento está con los familiares de los residentes fallecidos por la Covid-19. El virus nos ha impactado duramente y han sido semanas muy difíciles. Hoy podemos confirmar que en la actualidad no hay ningún residente positivo en la residencia, pero seguimos trabajando extremando las medidas de precaución porque debemos asumir que todos vamos a tener que convivir con el virus hasta que tengamos una vacuna o cura”, subrayan desde el equipo directivo de esta residencia isleña.
“LA MEDICALIZACIÓN DEL CENTRO HA DEMOSTRADO SU EFICACIA”
Haciendo un somero balance, se afirma que “las medidas tomadas desde el centro y la intervención de las autoridades sanitarias, habiéndose medicalizado las instalaciones desde un primer momento, han conseguido que la gran mayoría de los residentes afectados, se hayan curado. La creación de una zona de aislamiento, las medidas de protección personales y el modelo de medicalización del centro desde el SAS, han demostrado su eficacia”.
En todo este proceso, dadas las circunstancias, la residencia de la Cruz Roja asegura que ha reforzado la comunicación con los familiares de los residentes, “informándoles puntualmente de la situación y evolución de los casos mediante circulares, llamadas de teléfono y videollamadas”. Estas últimas han permitido que pudiesen ver y hablar virtualmente con sus mayores, a través de una tablet.
En este sentido, la dirección del centro, en nombre de todo el personal, reserva un agradecimiento especial a todos los familiares por “el apoyo y respeto que nos han brindado con su paciencia y comprensión. Nos hacemos cargo de lo difícil que ha sido para ellos esta situación, porque así lo hemos hablado, y sin embargo, han confiado en nuestro trabajo y nos han apoyado desde el primer momento”.
La residencia ya está trabajando en retomar las visitas de los familiares “tan necesarias tras este periodo de confinamiento”, cuando lo indiquen y autoricen las autoridades sanitarias, aunque, aclara, “tendrán que adaptarse a este nuevo escenario, extremando las medidas de prevención necesarias”.