Los trabajos para la mejora de las redes de suministro y alcantarillado de la señera barriada Bazán, en San Fernando, continúan cumpliendo etapas: este jueves la propia alcaldesa, Patricia Cavada, no se ha querido perder el momento en el que se han instalado las bombas encargadas del funcionamiento de la Estación de Bombeo de Aguas Residuales (EBAR) que se está levantando en la zona. Se trata de uno de los hitos más importantes de esta actuación porque estos mecanismos “serán el motor de esta instalación tan demandada por los vecinos”.
La primera fase de este proyecto se iniciaba sobre el terreno entrado el pasado abril y cuenta con una inversión de cerca de 1,1 millones, y un plazo de ejecución de de 11 meses. El proyecto global ronda los 5 millones de euros y todo lo costea la empresa que sigue explotando el servicio municipal de aguas, Hidralia (es una de las condiciones de la última prorroga del contrato).
En el marco de la visita a los trabajos, la primera edil edil socialista ha vuelto a insistir en que esta obra es “una de las prioridades” del Ayuntamiento, al ser “una de las más esperadas” por los residentes y entidades ante las deficiencias y problemas de la zona.
Según se apunta en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, Cavada ha querido acudir en persona a ver estos trabajos porque “este importante avance en la actuación y la instalación de las piezas fundamentales es una gran noticia” para “un proyecto que se esperaba desde hace años”.
Los trabajos en marcha, en esta primera fase (que se calcula que estará lista a finales de diciembre), se centran en la creación de una red separativa plenamente operativa para evitar que se vuelvan a repetir episodios de inundaciones que, según la intensidad de las lluvias, provocaban incluso el desbordamiento de aguas residuales.
En estos momentos, como ha destacado el responsable de Obras de Hidralia, Javier Barreiro, los trabajos avanzan “a un gran ritmo”. De hecho, la obra civil de este equipamiento se encuentra ya a punto de concluir, mientras que las labores en la propia instalación se encuentran al 50%, y van a dar un gran paso en este sentido con la instalación de las tres bombas de aguas fecales evitando que se produzcan desbordamientos de aguas residuales.
Cada una de estas bombas cuenta con una capacidad de impulsión de unos 175 litros por segundo, lo que permitirá que el desagüe de aguas fecales sea mucho más efectivo. A ello hay que sumar la creación de la mencionada red separativa plenamente operativa de fecales y de pluviales, disminuyendo el riesgo de colapso de la red y mejorando no solo las infraestructuras con las que cuenta la Bazán, sino que también la sostenibilidad de esta zona.
La nueva Estación de Bombeo de Aguas Residuales (EBAR) recogerá todas las aguas fecales de la zona, y las llevará por una nueva conducción de impulsión de aguas residuales hasta el nuevo colector que comienza en el cruce de la carretera de la carraca con calle Eo, posteriormente discurrirá por gravedad hasta la Ebar de venta Vargas y, desde allí, hasta la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR).
Por otro lado, se está levantando una Estación de Bombeo de Aguas Pluviales (EBAP) que recogerá todas las aguas de lluvia que llegan hasta la zona y un colector de impulsión que se va a conectar al aliviadero general de pluviales existente, para el desagüe de las aguas procedentes de las precipitaciones.
Todo ello mientras que también se trabaja en la renovación del colector de La Carraca que ya se encuentra al 65%.
LAS PRÓXIMAS OBRAS
El Ayuntamiento sacaba a licitación en pleno agosto por casi 1,2 millones de euros una nueva fase del proyecto; en este caso se centrará en sustituir el antiguo colector procedente de La Casería de Ossio y la Población Naval de San Carlos, que será desviado por las calles Cantabria y Navia.
Además, los trabajos incluirán la ejecución de un colector de aguas residuales, la construcción de un aliviadero en la glorieta de la calle Cantabria, otro aliviadero en el parque Héroes de Cuba y un canal abierto para la descarga de aguas pluviales. Y la instalación de las bombas de aguas pluviales de la EBAP.
Esta nueva fase comenzará una vez concluyan los trabajos que se están llevando a cabo en la actualidad, ya que para su ejecución es necesario tener construidas las dos estaciones de bombeo.
Y cuando concluya en su momento esa segunda fase, se ejecutará entonces la renovación de las redes del interior de toda la barriada, completando la red de pluviales existentes, tanto en las calles como en el interior de los patios, unas redes que se remontan a los años 50 del siglo pasado (el diámetro de las tuberías existentes es demasiado pequeño para dar cabida al caudal de agua que recibe).