Las trabajadoras del servicio de ayuda a domicilio de San Fernando, tras más de dos semanas de estado de alarma por la crisis sanitaria del coronavirus, siguen desarrollando sus labores “sin los equipos de protección adecuados” tal y como establece los protocolos de actuación ante el riesgo de contagio establecido por la Junta de Andalucía e incluso por el propio servicio de prevención de Claros, la empresa privada adjudicataria.
Los medios proporcionados a la plantilla, según denuncian desde CCOO (y lo viene haciendo reiteradamente Podemos), se limitan a “una bata de tela, guantes no resistentes a virus y una mascarilla de confección casera (de tela facilitada por la empresa)”, en lugar de batas desechables, mascarillas quirúrgicas y guantes 374.5 que son los equipos de protección individual (EPIs) que establece el citado protocolo de la Junta.
La no utilización de estos EPIs “conlleva no solo al riesgo de contagio por parte de las trabajadoras, sino también para las usuarios y para el resto de la población, ya que desarrollan su trabajo en varios domicilios distintos, siendo una de sus tareas el hacer la compra de productos de alimentación y medicamentos, con lo que para ello deben de ir a distintos establecimientos y a farmacias”.
Igualmente, este sindicato denuncia el no establecimiento de servicios mínimos en este servicio municipal privatizado, con el fin de minimizar dentro de lo posible el tiempo de exposición al riesgo de contagio, “tal y como se viene haciendo desde hace tiempo la totalidad de la provincia”.
Según afirman desde Comisiones en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, el Ayuntamiento isleño “hace caso omiso a las instrucciones de la Junta de minimizar el número de auxiliares y personas dependientes expuestos al riesgo en lo que entendemos como un acto de irresponsabilidad y falta de sensibilidad hacia las trabajadoras del servicio, ciudadanos iguales al resto”.
Todos estos hechos, subrayan desde CCOO, son conocidos por las delegadas de prevención, integrantes de UGT (con mayor representación en el comité de empresa), “las cuales en vez de ser las garantes de la seguridad de los trabajadores de la empresa, no están haciendo absolutamente nada para paliar esta grave situación”, se lamenta.
“Esta situación de desprotección supone una grave irresponsabilidad”, y es por ello que CCOO insta por un lado a la empresa Claros a que “de manera urgente, palie la falta de equipos de protección individual”; y por otro al Ayuntamiento a “que actúe, que salga de la pasividad en la que en la actualidad está sumido y adopte las medidas necesarias para establecer los servicios mínimos de forma que garantice los servicios esenciales al mismo tiempo que minimice los riesgos de contagio”.
PODEMOS INSTA A LA REMUNICIPALIZACIÓN DEL SERVICIO
Por su lado, Podemos ha reclamado al Gobierno local de PSOE y Cs que además de imponer sanciones a la concesionaria del servicio (por no facilitar material homologado a la plantilla), plantee la ruptura del contrato “por reiteración e incompetencia” en la falta de material protector y también por el incumplimiento de las condiciones laborales de las trabajadoras durante meses atrás, “y proyecte la municipalización del servicio para evitar el enriquecimiento de empresas que no cumplen”.
De la misma manera, la formación morada propone al Consistorio decretar los servicios mínimos “para atender a las personas con mayor grado de dependencia o sin acompañamiento familiar hasta que lleguen todos los EPIs necesarios y se restablezca el servicio en su totalidad”.
Este partido de la oposición incide en la preocupación de estas trabajadoras del servicio de ayuda a domicilio, “no solamente porque algunas de las 132 que hay en San Fernando son pertenecientes al grupo de riesgo por patologías como diabetes, enfermedades inmunitarias y crónicas como renales, cardíacas o pulmonares, también mayores de 60 años y embarazadas, sino porque están en contacto con personas vulnerables y de alto riesgo”.