La delegación territorial de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía en Cádiz pretende multar al Ayuntamiento de San Fernando por el abandono de La Magdalena, donde las ambiciosas obras proyectadas (para crear un “gran parque metropolitano”) llevan estancadas unos dos años, casi desde su inicio, motivando que la parcela presente desde hace meses un estado cada vez más decadente (con restos de la propia obra, vertidos y escombros, vegetación descontrolada, basuras…).
En este sentido, la administración autonómica ha iniciado un procedimiento sancionador contra el Consistorio por la posible comisión de una infracción administrativa en materia de residuos en estos terrenos. Se tramita tras el informe emitido por agentes de Medio Ambiente y plantea tres multas de 5.000 euros (o sea, 15.000 euros en global), así como la limpieza de los vertidos y la restitución del terreno a su estado anterior.
Nada más conocer la probable multa desde el Gobierno de Moreno Bonilla, el PP isleño no ha tardado en exigir al equipo de Gobierno del PSOE que asuma “de manera inmediata su responsabilidad” tras la apertura de este expediente “debido a la gestión deficiente y negligente del proyecto de La Magdalena”.
“Este procedimiento sancionador no es más que la consecuencia lógica de años de promesas incumplidas, falta de planificación y una alarmante incapacidad para gestionar un proyecto que afecta directamente la calidad de vida de los vecinos de toda la zona”, asevera la portavoz municipal popular, María José de Alba.
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, esta formación de derechas considera que esta sanción “representa el último capítulo de una cadena de despropósitos cometidos por Patricia Cavada” en cuanto a La Magdalena (ahora mismo se tramita la rescisión del contrato con la adjudicataria original por “mala fe” antes de pasar a licitar el proyecto reformulado).
Tras cinco años de anuncios “sin concreción, retrasos y, finalmente, la paralización de las obras”, los ciudadanos “no solo ven cómo se incrementa el presupuesto inicial en un 65% (de 7 a unos 12 millones de euros), sino que también deberán asumir íntegramente este coste por la pérdida de los fondos europeos de la EDUSI”, se queja De Alba.
A esta cantidad, habrá de sumar los 400.000 euros que, en concepto de indemnización, “habrá que abonar, casi con total seguridad, a la empresa adjudicataria de las obras tras su renuncia a ejecutar el proyecto”. “Y, por si fuera poco, ahora los socialistas propician una sanción de 15.000 euros a la que también habrá de hacer frente la ciudadanía isleña”, añade.
“ACCIONES CONCRETAS Y RESPONSABILIDADES POLÍTICAS”
Desde el principal partido de la oposición consideran que esta situación exige “la asunción de responsabilidades políticas “inmediatas” por parte del Ejecutivo isleño. “Estamos hablando de decisiones políticas que han conformado un auténtico desastre para todos los vecinos y comerciantes. Cavada y su equipo deben asumir de una vez las consecuencias de su gestión ineficaz y adoptar medidas urgentes para resolver definitivamente los problemas de La Magdalena”, se insiste.
En este punto, María José de Alba exige que se “agilice” una “solución definitiva” para la rehabilitación de La Magdalena, “un espacio que, a día de hoy, permanece en el abandono total y sin indicios de mejora”.
“Vecinos y comerciantes han soportado años de incertidumbre, un presupuesto desbordado y la total falta de información y transparencia de un equipo de Gobierno que parece más preocupado por maquillar su ineficaz gestión que por resolver los problemas reales”, interpreta.
Al respecto, el concejal de Desarrollo Económico, Conrado Rodríguez, avanzó a finales de septiembre que mientras se lleve a cabo la resolución del vigente contrato y una nueva licitación de los trabajos (sin aportar fechas orientativas), se procedería a la “adecuación transitoria” de la zona afectada “para minimizar el impacto de las molestias generadas a los vecinos”, especialmente allanando el terreno y aportando aparcamiento hasta que puedan retomarse definitivamente las obras. Han pasado dos meses, y no ha habido movimiento alguno.