Aleas-IU en Cádiz ha denunciado la “discriminación” que el Obispado de Cádiz ejecuta “contra la comunidad transexual”, una vez que el obispo, rectificando y negando finalmente al joven isleño Álex Salinas ser el padrino de su sobrino, haya dejado patente “un rechazo arcaico y prejuicioso que atenta contra la libre determinación de la identidad sexual de sus feligreses”. Por su lado, ATA pasa a exigir la retirada del concordato con la Iglesia católica, “para poner fin al privilegio fiscal e impunidad ante reiteradas actuaciones y declaraciones que incitan al odio y menoscaban los derechos civiles”. Y Podemos lamenta el “escaso interés” que los partidos del Gobierno local, PSOE y PA, han mostrado en este tema.
El Área de Libertad de Expresión Afectivo-Sexual (Aleas) de Izquierda Unida en Cádiz ha denunciado la “discriminación” que el Obispado de Cádiz y Ceuta ejecuta “contra la comunidad transexual”, una vez que el obispo Rafael Zornoza, rectificando y negando finalmente al joven isleño Álex Salinas ser el padrino de bautizo de su sobrino, haya dejado patente “un rechazo arcaico y prejuicioso que atenta contra la libre determinación de la identidad sexual de sus feligreses”.
Como primera respuesta, Salinas, que se siente engañado, ha decidido que apostatará y su familia ha optado por no bautizar finalmente al niño. “He aprendido la lección, aquí está la señal que tantos me decíais, cómo voy a ser parte de un lugar en el que no me quieren. No voy a saber nada más ni quiero ser parte de la Iglesia, seguiré mi fe como verdaderamente hay que sentirla, sin nada que prohiba a nadie, sea como sea. Mi familia ha tomado la decisión de no bautizar a mi sobrino, puesto que mi hermana no desea que su hijo pertenezca a un sitio en el que no quieren a su propio tío. Pero sí quiero decir una cosa, voy a luchar no por mí, sino por todos, han jugado con todos nosotros, nos han utilizado y eso no se hace”, escribe en su facebook.
Zornoza acaba afirmando en su reciente comunicado –con el que parece querer cerrar esta polémica surgida hace más de un mes, tras elevar una consulta ante la Congregación para la Doctrina de la Fe- que una persona transexual “no posee el requisito de llevar una vida conforme a la fe y al cargo de padrino”. Además, transcribiendo palabras del Papa, “prejuzga” la transexualidad como una “actitud opuesta a (…) resolver el propio problema de identidad sexual”. Por último, según los izquierdistas, “evita reconocer un comportamiento discriminatorio amparándose en unos requisitos que chocan con el principio de igualdad de la Constitución”.
Ante estos casos, “tan conocidos, y muchos otros que siguen invisibles por miedo o desconocimiento”, Aleas-IU aboga por la creación de leyes contra la LGTBIfobia (fobia contra la diversidad sexual: homosexuales, bisexuales, transexuales, intersexuales…). Igualmente, anima a las personas del colectivo a hacer valer sus derechos y a denunciar casos “tan repugnantes” como el del Obispado de Cádiz, “ejemplo contra la tolerancia en nuestra sociedad y a favor de los prejuicios y la ignorancia”.
ATA EXIGE LA RETIRADA DEL CONCORDATO CON LA IGLESIA
Por su parte, la Asociación de Transexuales de Andalucía-Sylvia Rivera, ante las últimas declaraciones del obispo de Cádiz sobre este tema, pasa a exigir la retirada del concordato con la Iglesia católica, “para poner fin al privilegio fiscal e impunidad ante reiteradas actuaciones y declaraciones que incitan al odio y menoscaban los derechos civiles”.
Esta asociación remarca que no pide “caridad ni compasión para lavar la cara a una institución que se destaca por su misoginia y LGTBIfobia, exigimos el cumplimiento y respeto a las leyes civiles y constitucionales que nos amparan a la ciudadanía”.
Al respecto, se le recuerda a la Fiscalía de igualdad y contra los delitos de odios de Cádiz, su petición realizada el pasado 31 de julio para que interviniera en este caso por si fuera constitutivo de delito “ya que consideramos que es un acto de transfobia”.
“La libertad religiosa no puede entrar en conflicto con los derechos humanos”, afirma la presidenta de ATA, Mar Cambrolle, añadiendo que “la Iglesia debe ser responsable de sus reiteradas prácticas LGTBIfóbicas que incitan al odio y al menoscabo de derechos y por tanto, el Estado de derecho debe proteger a las personas que son victimas de estas prácticas”.
Ante el aumento de delitos y violencia hacia las personas lesbianas, gays, bisexuales y transexuales, ATA-Sylvia Rivera insiste en la necesidad de una ley autonómica como la catalana y la extremeña, que proteja y sancione los delitos de odio, así como una ley estatal de transexualidad que unifique criterios y garantice derechos por igual a todas las personas transexuales del Estado, teniendo como referente la Ley Trans de Andalucía.
PODEMOS LAMENTA EL “ESCASO INTERÉS” DE PSOE Y PA EN ESTE “CASO DE DISCRIMINACIÓN”
Mientras, Podemos San Fernando ha expresado su profundo rechazo al comportamiento de la Iglesia católica con Álex Salinas. Ernesto Díaz, secretario general de la formación local y concejal afirma que “sólo la repercusión mediática y la presión social que suscita el caso de Álex consiguieron aparentemente que el Obispado aceptase que fuese padrino, no podemos entender que ahora se dé marcha atrás y vuelva a negársele ese derecho, en lo que entendemos es un flagrante caso de discriminación no solo hacia Álex sino hacia todo el colectivo LGTBI”.
Desde Podemos en la localidad añaden que “no cejaremos en el empeño de reivindicar la igualdad de trato de todas las personas sin que nada cercene sus derechos y mucho menos su identidad sexual; no toleraremos un solo ataque más al colectivo LGTBI”. Díaz insiste en que “continuaremos apoyando la continua reivindicación de sus derechos”, y lamenta el “escaso interés” que los partidos que componen el equipo de Gobierno, PSOE y PA, han mostrado ante “este caso de discriminación”. Al tiempo, insta al bipartito a “posicionarse públicamente del lado de las personas que sufren este tipo de ataques por su identidad sexual”.
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