El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), dependiente del Ministerio de Fomento, y el Ministerio de Defensa, han conveniado una concesión administrativa por un periodo de 75 años para que la Armada española pueda acondicionar y usar en San Fernando un puente y un tramo de servicio, propiedad de Adif, que atraviesa el caño de Sancti Petri y corre paralelo a la línea ferroviaria, junto al Puente de Hierro.
Gracias a este convenio, se mejorará el acceso por carretera las instalaciones militares de La Carraca, lo que beneficiará también a las instalaciones aledañas de Navantia, ya que se “desdoblará” el Puente de Hierro, “único vial existente actualmente, muy condicionado por las limitaciones que tiene en anchura, gálibo y peso soportado”.
Debido a sus características técnicas, según informan desde Defensa en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, el tramo de servicio y el puente podrán ser utilizados para acceder al astillero isleño y a La Carraca, tanto con automóviles como con vehículos cargados con material pesado y voluminoso. Mientras, el Puente de Hierro se seguirá empleando como vial de salida, “descongestionándose de esta manera el tráfico rodado”.
Además, en el articulado de la concesión administrativa se contempla expresamente que la Armada llevará a cabo las actuaciones necesarias para que el puente y el tramo de servicio sigan siendo vía verde para senderistas y ciclistas.
Todo ello se refleja en un proyecto de viabilidad presentado por la Armada española y aprobado por el Adif. Y rubricado a finales de marzo por el gerente del Área de Patrimonio y Urbanismo Sur de Adif, Fernando Gómez, y el director general de Infraestructura del Ministerio de Defensa, José Francisco Pérez-Ojeda.
LAS LIMITACIONES DEL PUENTE DE HIERRO
Hace apenas unos días, UGT en Navantia San Fernando volvía a evidenciar que el Puente de Hierro “es a todas luces insuficiente” para dar servicio a la factoría, incidiendo en que con el inicio de los trabajos de las corbetas para Arabia Saudí “vuelve a ser patente las necesidades de infraestructura” que tiene la antigua Bazán. “Es indispensable contar con otras salidas que permitan una fluida entrada y salida del personal y de los camiones que traerán numerosas toneladas de materiales”, se advertía.
De hecho, cada cierto tiempo se reactiva la reclamación de la carretera entre Navantia y Tres Caminos, así como su conexión con la autovía CA-33. El último paso al respecto se daba en mayo de 2018, cuando la Diputación, pese a no tener las competencias y cumpliendo una iniciativa plenaria, aseguraba que iba a encargar “de inmediato” la redacción de un estudio que analice y valore los requisitos y la viabilidad de esta infraestructura, con el fin de agilizar los trámites. Poco más se ha sabido desde entonces.