Con unos ocho meses de retraso sobre la fecha inicial prevista y anunciada, a finales de mayo se iniciaban en San Fernando de forma efectiva las obras del “gran parque metropolitano” de La Magdalena, días después del desalojo y vallado de la zona de actuación.
La Junta de Gobierno Local formalizaba en septiembre de 2021 la adjudicación del proyecto, pero no ha sido hasta hace unas semanas cuando se ha terminado de formalizar el respectivo contrato con la unión temporal de empresas (UTE) integrada por Aitana, Actividades de Construcción y Servicios y Rhodas Albañilería, que una vez ganado el concurso público trató de pedir más dinero de lo ofertado, encontrándose con el rechazo municipal de entrada.
Dicha UTE se adjudicó los ambiciosos trabajos por unos 7,3 millones de euros, rebajando unos 300.000 euros el coste de licitación. Dinero que supone gran parte de los fondos EDUSI asignados a la ciudad (12,5 millones, contando con el 20% que debe aportar el propio Ayuntamiento). Serán en principios 14 meses de obras, sin parones por la Feria del Carmen, que este verano se reubicará de forma excepcional en el Parque Almirante Laulhé. Si no hay sobresaltos, el flamante parque debería ser una realidad a finales del verano de 2023, y en todo caso no puede finalizarse más allá de ese año para no perder las ayudas de fondos UE.
Y tras apenas unos días de trabajos, desde el Ayuntamiento se informa en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz que “avanzan a buen ritmo”, tal como dice haber podido constatar “en diversas reuniones con la dirección facultativa y la UTE”. Es más, se añade que ante este “intenso avance” de la obra, en breve se va a proceder a demoler la zona que había quedado reservada para aparcamiento, en el lugar donde se ubicaba el Mercadillo.
Para ello, estos días se va a habilitar un nuevo espacio para los vehículos contiguo al actual, que quedará delimitado esta misma semana para que a partir del lunes día 13 de junio comience a usarse. Este nuevo espacio reservado para el aparcamiento que sustituye al anterior, en el que ya se van a iniciar los trabajos de demolición, será del mismo tamaño y con la misma capacidad de vehículos. La Policía Local ya ha comenzado a colocar los respectivos carteles informativos.
Del mismo modo, el Ayuntamiento está ultimando estos días un contrato para poder adecuar y adecentar una parcela anexa al IES Sancti Petri, con el objetivo de contar lo antes posible con otra zona de aparcamiento temporal que contabilizará en torno a 150 plazas.
Y además, ya se ha firmado el contrato “y es inminente el inicio de las obras de construcción” del “aparcamiento táctico” proyectado muy cerca, en la avenida San Juan Bosco (en la parcela del IMPI, que ya se ha derruido), con una inversión de cerca de 500.000 euros.
A colación, desde el Gobierno local se lamentan todas las molestias ocasionadas por la ejecución de este proyecto, que “son inevitables”; y se precisa que dentro de este proceso, y en función del propio desarrollo de la obra, “se van a seguir adoptando medidas relativas a los espacios disponibles para habilitar aparcamientos, buscando siempre alternativas que hagan más llevadero a los vecinos el desarrollo de este gran parque, una actuación que tiene como objetivo mejorar la ciudad, y especialmente la calidad de vida de los residentes de la zona”.
“PROYECTO TRANSFORMADOR DE LA CIUDAD”
El que dice ser proyecto “estrella” y “transformador de la ciudad” del actual bipartito de PSOE y Ciudadanos, “no sólo consistirá en la urbanización del nuevo parque, sino que se trata de una actuación que pretende dar vida y dinamizar la ciudad a todos los niveles: desde la economía, el espacio natural, el empleo, el ocio, el turismo, el deporte y el patrimonio”. De antemano se vende como “un reclamo turístico de gran atractivo sin comparación en toda la provincia abierto a todas las edades y aficiones”.
Así, este futuro “espacio multifuncional”, que se convertirá en el parque más grande de La Isla (de más de 125.000 metros cuadrados), contempla una dotación de espacios públicos “de calidad” con paseos por los que poder discurrir junto a los caños (paseo marítimo), zonas ajardinadas, espacios verdes, juegos infantiles, merenderos, zonas para hostelería y otras para actividades comerciales, un auditorio al aire libre (el llamado ‘Astillero’, con un aforo de hasta 1.000 personas, ubicado frente al Real Carenero y que será “una fábrica de cultura, creatividad y eventos”), zonas deportivas y hasta para el recreo de mascotas.
Además, el proyecto supondrá la adecuación de un nuevo recinto ferial, que se integrará en el propio parque urbano, con las infraestructuras de servicios que se necesitan para el montaje y celebración ya listas (abastecimiento de agua, alcantarillado, electricidad e iluminación).