Este miércoles 21, tachado como “día histórico y decisivo” para la veterana barriada Bazán, en San Fernando, han dado comienzo las prometidas obras para la mejora y renovación integral de las redes de suministro y alcantarillado. Y no ha faltado la foto de los políticos.
Así, la alcaldesa, Patricia Cavada, acompañada por José Luis Trapero, el gerente de la empresa que explota el servicio de agua potable y alcantarillado, Hidralia, que además costea los trabajos (una de las condiciones de la última prorroga del contrato), y por el concejal de Desarrollo Sostenible, Ignacio Bermejo; la concejala de Desarrollo Urbano, Claudia Márquez; y la edil de Empleo, Regla Moreno; se ha visto con el presidente de la Asociación de Vecinos de la Barriada Bazán, José María Santos, otro representantes vecinales, y personal técnico municipal y de la empresa que se encargará de ejecutar los trabajos, Sorigué.
La primera edil socialista ha insistido en que “se trata de una actuación muy reivindicada a lo largo de 31 años, y por tanto muy esperada por los vecinos, que durante años han trasladado al Ayuntamiento la necesidad de tomar medidas ante las deficiencias y problemas de la barriada, sobre todo en época de lluvias”. Del mismo modo, además de la resolución de problemas, ha apuntado que gracias esta obra de envergadura “apostamos por la sostenibilidad y la acción por el clima, ya que permitirá que contemos con unas infraestructuras hidráulicas la altura de la ciudad del Parque Natural”.
Por su parte, el presidente de la AVV de la Barriada Bazán ha anotado que “el día de hoy podemos decir que estamos ante una prueba superada con creces”. Santos ha recordado que el alcantarillado ha sido desde los años 90 del siglo pasado “la prioridad del barrio y de las reivindicaciones de los vecinos, que hemos soñado mucho con este momento por todos los problemas que hemos sufrido con las lluvias, inundaciones, etc.”.
LA PRIMERA FASE DEL PROYECTO
En este encuentro en la barriada, según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz, se han podido explicar de nuevo la planificación y plazos de esta actuación. El gerente de Hidralia ha sido el encargado de exponer que durante los próximos días se van a llevar a cabo las labores de vallado y la consolidación de los pertinentes elementos de señalización y seguridad para comenzar a continuación con el grueso de esta primera parte de la obra, ya que se ha divido en dos fases, para que se pueda acometer sin paralizar la actividad en el lugar.
Los trabajos se centrarán en un primer momento en la construcción de las infraestructuras que permitan la creación de una red separa de aguas fecales por un lado y de aguas pluviales por otro. El objetivo es solucionar los problemas históricos de inundaciones, así como dotar de una propia red de aguas negras a la zona, ya que la que existe actualmente se trata de una estructura de más de 150 años de antigüedad por la que se evacúan todas las aguas residuales (pluviales y fecales) de la parte de La Casería, de la población naval de San Carlos y la propia Bazán, generando en este punto un problema de insuficiencia hidráulica, al canalizarse las aguas por gravedad, lo que complica aún más el problema.
Estos trabajos van a permitir que Bazán cuente con una red separativa plenamente operativa, disminuyendo el riesgo de colapso de la red y evitando que se vuelvan a repetir episodios de inundaciones que, según la intensidad de las lluvias, provocaba incluso el desbordamiento de aguas residuales.
Algo que se va conseguir gracias por un lado a la construcción de una Estación de Bombeo de Aguas Residuales (EBAR) que recogerá todas las aguas fecales de la zona, y a lo que se sumará la instalación de una conducción de impulsión de aguas residuales hasta la autovía, que conectará esta nueva EBAR con la existente en Venta de Vargas y, desde allí, hasta la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR).
Por otro lado, se construirá una Estación de Bombeo de Aguas Pluviales (EBAP) que recoja todas las aguas de lluvia que llegan hasta la zona y un colector de impulsión que se va a conectar al aliviadero general de pluviales existente, para el desagüe de las aguas procedentes de las precipitaciones.
Con estas infraestructuras se solventarán los problemas señalados de la actual canalización por gravedad, que ha mostrado ser insuficiente para las necesidades de una barriada que está a nivel de las marismas de alrededor y cuyos problemas se complican aún más si hay marea alta.
En concreto, esta primera fase de actuaciones tiene un plazo de ejecución de 11 meses y un presupuesto superior a los 1,1 millones de euros.
Y A CONTINACIÓN, LA SEGUNDA FASE
Una vez ejecutado lo previsto en esta primera fase, será el momento de realizar el desvío del colector de alcantarillado procedente de la población Naval San Carlos, la renovación de las redes de alcantarillado de toda la barriada, completando así la red de pluviales existente, tanto en las calles como en el interior de los patios de la barriada.
Las redes de esta zona se remontan a los años 50, cuando se construyó la barriada, y el diámetro de las tuberías existentes es demasiado pequeño para dar cabida al caudal de agua que recibe. De esta manera, se va a evitar que la red se sature con frecuencia y que se produzcan los desbordamientos que suelen aparecer sobre todo con las lluvias.
En estas actuaciones, se incluirá también la renovación de las infraestructuras existentes en la barriada, incluidas las del sistema de abastecimiento de agua potable.
Se trata, en definitiva, de una reforma completa de las redes de saneamiento, pluviales y abastecimiento de agua potable de la señera barriada que contarán con una inversión total cercana a los 5 millones (incluyendo la primera fase que ahora se inicia).
COORDINACIÓN Y TRANSPARENCIA
Para acometer esta actuación, Ayuntamiento e Hidralia han mantenido con las entidades vecinales, sociales y empresas de la zona diversos encuentros tanto para informarles de las actuaciones previstas como para recoger su “sensibilidad” ante las mismas. Desde el primer momento, se ha trabajado este proyecto bajo la premisa de la transparencia y por ello han mantenido diferentes reuniones con los colectivos afectados por los trabajos para informarles de primera mano sobre los avances y conocer sus inquietudes.
Con el objetivo de aunar criterios y de minimizar el impacto que los trabajos pudieran tener en el lugar, se realizaron encuentros con los representantes de los centros educativos del Juan Díaz de Solís, Wenceslao y Vicente Tofiño, exponiendo el compromiso a que el grueso de los trabajos no se realice en las horas de entrada y salida de los centros. También se han mantenido reuniones con responsables del Ministerio de Defensa, del Tercio de Armada y del Arsenal de La Carraca, y de la empresa de Navantia, para no solo dar a conocer los diferentes aspectos de la actuación, sino atender las necesidades y requerimientos por parte de estas entidades, dada la especial relevancia que los flujos de tráfico de vehículos derivados de las actividades de dichas dependencias tienen en el tramo de las obras.
De esta manera, los trabajos se han coordinado para que la mejora integral de las redes de agua de la barriada Bazán no provoque ningún contratiempo en los proyectos y la actividad que realizan de manera diaria los centros, instalaciones y empresas del lugar, intentando a la vez minimizar el perjuicio que tales labores puedan producir a los vecinos y residentes.
En este sentido, en esta primera fase de los trabajos no habrá afección a la circulación, ya que están previstos desvíos del tráfico y se podrá recorrer la zona, salvo algún corte puntual. Además, gracias a esa coordinación con todos los actores de la zona, si llegado un momento es necesario se podrán trasladar algunas de las tareas a horario nocturno.