El centro de salud de Camposoto, en San Fernando, es “una prioridad” para la Junta de Andalucía. Así lo ha aseverado la delegada territorial de Salud y Familias, Isabel Paredes, en un reciente encuentro con representantes vecinales para informarles de la situación de este gafado proyecto. El demandado ambulatorio lleva abandonado, a medio construir, desde 2012. A finales de 2020 al fin se adjudicaron los trabajos para culminar el edificio, pero la pasada primavera se conocía que la constructora adjudicataria, la firma granadina Grulop 21, había renunciado.
Así, acompañada del gerente del Distrito Bahía de Cádiz-La Janda, Paredes ha querido tener esta reunión para aclarar la situación en la que se encuentra el futuro centro que busca dar respuesta a las demandas de una de las zonas más pobladas de La Isla, con alrededor de 25.000 habitantes: se continúa trabajando en la resolución del contrato por el incumplimiento del actual contratista.
Una vez resuelto definitivamente este trámite, el siguiente paso sería volver sacar la adjudicación, “en este caso por la vía de urgencia”. Y es que, como ha explicado esta política del PP, la Ley de Contratos del Sector Público recoge esta posibilidad; en concreto, establece que podrán ser objeto de tramitación urgente los expedientes correspondientes a los contratos cuya celebración responda a una necesidad inaplazable o cuya adjudicación sea preciso acelerar por razones de interés público.
Según indican desde la Junta en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, la delegada territorial de Salud ha querido lanzar “un mensaje de tranquilidad” a los vecinos, a quienes ha transmitido el “compromiso” del gobierno autonómico de derechas con este centro sanitario.
Paredes ha insistido en que la Junta “va a poner todos los instrumentos a su alcance para que este centro de atención primaria sea una realidad” y ha recordado que, de hecho, “tras un parón de años, fue el actual Ejecutivo el que reactivó la infraestructura”, para la que contempla cerca de 2,5 millones de inversión.
Finalmente, ha querido agradecer el trabajo que realiza el tejido asociativo de La Isla, a quienes ha comunicado que espera poder convocar pronto, “si la situación derivada de la pandemia lo permite”, la Comisión de Participación Ciudadana.
Por su lado, desde el área de Salud de la Federación de Asociaciones de Vecinos Isla de León se ha expresado públicamente su satisfacción por las explicaciones recibidas y por la declaración de “buena voluntad” para seguir trabajando, “a pesar de las fechas vacacionales en las que nos encontramos”. “Confiamos en que la nueva licitación se realice a partir de septiembre, como se nos ha argumentado, y que antes de finalizar este año podamos comprobar como las obras para la construcción del centro se ponen en marcha”, se subraya.
EL PROYECTO
El proyectado centro de salud de Camposoto (es de esperar que cuando se llegue a inaugurar algún día, se haya vuelto a la normalidad y se pueda ir al médico sin tener que pedir cita para dos semanas después o más y para ser atendido por teléfono…) contempla una veintena de consultas con sus correspondientes salas de espera, entre las que destacan las 15 de adultos y dos de pediatría para atención primaria; además de sala de emergencias, salas de extracciones y procedimientos diagnósticos, sala de lactancia, una sala polivalente, área de cirugía menor (consulta y sala), área de gabinete odontológico (sala y consulta), área de rehabilitación y fisioterapia (sala de fisioterapia, sala de electroterapia, sala de onda corta, consulta de rehabilitación, consulta de fisioterapia o vestuarios). El edificio contará también con las habituales zonas de dirección, administración y despachos, salas de estar del personal, zonas de servicios (aseos, almacén, etc.), e incluso biblioteca y sala de docencia y zona de educación sanitaria.
Además de lo anterior, este equipamiento sanitario se plantea con dos patios o espacios interiores, y un aparcamiento en superficie. La entrada principal se realizará desde la calle Milongas creando un vestíbulo también accesible a él desde la plaza de las Bulerías, desde donde se crea un pequeño atrio de acceso.