Navantia Sistemas, en los astilleros de San Fernando, ha entregado a la Autoridad Portuaria de Ceuta el primer barco con capacidad autónoma en España, bautizado como ‘USV Vendaval’.
Fue en octubre de 2017 cuando se conocía que Navantia se adjudicaba este contrato por valor de 920.000 euros para el desarrollo e instalación de un sistema de vigilancia y control medioambiental en el puerto de Ceuta. El mismo incluye la instalación de su Sistema de Vigilancia de Aguas Próximas (SVAP) adaptado a las características del puerto de la ciudad autónoma y la entrega de una embarcación no tripulada (USV). Ganó este concurso público al presentar la oferta más ventajosa conforme a criterios de adjudicación técnicos y económicos, enfrentándose a 19 empresas de toda Europa.
Lo que era la fábrica de artillería (Faba) de la antigua Bazán ha llevado a cabo la instalación e integración, en una embarcación construida por el astillero español Aister, del control de la propulsión y de un conjunto de sensores requeridos por el cliente, como son los radares, sonares, GPS, navegadores inerciales, estación meteorológica, cámaras infrarrojas, cámaras estereoscópicas, cámaras 360 grados y AIS.
Estos sensores pueden ser gestionados de forma remota desde un centro de mando y control, en tierra o instalado en otro barco, y también de forma manual desde dentro del puente de gobierno de la embarcación. En cuanto a los modos de navegación, la embarcación puede ser gobernada de forma totalmente autónoma, siguiendo una ruta preestablecida, o teleoperado desde un centro de mando y control, tanto en modo semiautomático como en modo tripulado. Además, en caso de que haya que abortar la misión, el sistema dispone de un modo de regreso automático, y para todos los modos automáticos el sistema detecta posibles colisiones y las evita de forma autónoma.
Entre las misiones para las que el sistema ha sido diseñado destacan: seguridad en desastres marítimos, eliminación de vertidos contaminantes para el medioambiente, protección de activos, lucha contra la inmigración ilegal y narcotráfico, vigilancia y antiterrorismo. El sistema de Navantia también puede incorporar elementos disuasorios como son altavoces y focos, para evitar que las embarcaciones entren en zonas de peligro para los seres humanos, o cañones de agua para sofocar incendios y para otras aplicaciones militares.
Gracias a su diseño, la línea de productos USV, desarrollada por Navantia, “proporciona una gran versatilidad tanto en su versión civil como militar, pudiendo integrar cualquier tipo de sensor o actuador necesario para cubrir los requisitos del cliente”, se subraya en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz.
Esta línea de producto supone para la empresa naval estatal un campo en el que realizar aplicaciones reales de los desarrollos innovadores en algunas de las nuevas tecnologías más demandadas en la actualidad, como son la gestión de datos, la inteligencia artificial o la ciberseguridad, todas ellas tecnologías fundamentales para el correcto funcionamiento de esta embarcación.