La playa de Camposoto de San Fernando acogía en la jornada del pasado sábado 24 de agosto una nueva edición de ‘See You Sun’, otro evento promovido por el Ayuntamiento, en este caso en colaboración con los chiringuitos, ofertando música, talleres y actividades hasta la madrugada. Concurrida cita estival que aprovechaba la Marea Blanca de La Isla para volver a trasladar a pie de arena, entre vecinos y veraneantes en bañador, el preocupante presente y futuro que vislumbra para el Hospital de San Carlos.
Para denunciar tanto la carencia de médicos de puerta en las Urgencias del Hospital de San Carlos y de internistas en planta de hospitalización, como del resto de categorías, esta plataforma ciudadana llamaba a concentrarse a la altura de la pista 4; “hoy estamos aquí, en una playa cinco estrellas, para deciros que San Carlos no es precisamente una playa y que tristemente no es de cinco estrellas; de hecho llamarlo hospital nos viene justo teniendo un tope de hospitalización de 33 personas”, remarca el comunicado leído durante la tarde.
Desde la Marea Blanca se razona que ese tope de ingresos “no es coyuntural siquiera, viene determinado por la falta de contratación de médicos y de personal de todas las categorías, que conduce a sobrecarga y precariedad, que se manifiestan aún más en el periodo vacacional, ya que no se contrata ni mucho menos para poder cubrirlo. Las bajas tampoco se cubren. En consecuencia, hay turnos que se han quedado descubiertos y en septiembre parece que la situación irá a peor”.
En este contexto, se añade, “en algunos turnos, solo tres o cuatro médicos deben atender a los ciudadanos que entran por Urgencias; se ha recortado una tercera parte de sus facultativos y un 50% de su personal de enfermería”. “¿Sabéis la solución que han dado quienes nos gobiernan? Pues que las ambulancias no les lleven a los pacientes, sino que se dirijan al Hospital Puerta del Mar? Y aun entrando solo quienes vienen por sí mismos, o asistidos por sus familiares, se están dando situaciones lamentables, como tener a pacientes en urgencias esperando una cama libre en planta durante 48 horas”, se describe en el manifiesto trasladado a DIARIO Bahía de Cádiz.
“ES LA CONSECUENCIA DE LA PRIVATIZACIÓN”
Así, se lamenta que de seis plantas habilitadas en el que fuera hospital militar de La Isla “solo dotan personal para disponer de una y media”. “¿De dónde parte esta involución en el crecimiento de San Carlos como hospital, que lo conduce a ser una caricatura de lo que debería ser?”, se pregunta la Marea Blanca, y se responde: “es la consecuencia de la privatización. Todo lo que perdemos en San Carlos enriquece al Hospital de San Rafael propiedad de la empresa Pascual. A partir del acuerdo con la Junta para que este centro se constituyera en hospital de referencia para el Cádiz intramuros se cercenó el crecimiento del Hospital de San Carlos y se retrocedió al año 2016”.
A ello se suma que en San Carlos, que depende del Puerta del Mar de la capital, “no hay cargos intermedios con capacidad de gestión con respecto a Cádiz; de hecho no están ni reconocidos como tales en sus tareas de supervisión. Lo que manden de Cádiz o Sevilla se aplica con nula interlocución”.
“Un hospital -se apostilla- se define como tal por prestar servicios sanitarios, las 24 horas del día, los 365 días del año. Eso justo es lo que está en peligro tras los sucesivos recortes en personal del Servicio Andaluz de Salud (SAS), su hospitalización. Con el personal del que se dispone actualmente (en San Carlos) no se garantiza la atención sanitaria”.
Para la Marea Blanca de La Isla “la precariedad a la que el hospital de San Fernando se ve abocado, viene determinada por el recorte practicado por la Junta de Andalucía y por la insensibilidad en la gestión del Puerta del Mar hacia San Carlos, y es consecuencia de optar por la privatización, en vez de fortalecer la sanidad pública”.
“Una vez más se nos trata de convencer de una falacia: que la privatización auxilia y salva al sistema público de salud, cuando comprobamos que lo que hace es lastrarlo y parasitarlo”, sentencia el manifiesto leído en la playa de Camposoto.