El centro comercial Bahía Sur, en San Fernando, que dice convivir con el Parque Natural Bahía de Cádiz, ha organizado este junio el llamado ‘mes de la espátula’. Así, todos los sábados se desarrollarán talleres de observación, de anillamiento, de marcaje y de equipamiento de las aves con dispositivos de radioseguimiento, en un intento de iniciar en la ornitología a jóvenes y adultos. Por el Día del Medio Ambiente, el complejo isleño ha servido de marco para la presentación del proyecto Limes Platalea de la Sociedad Gaditana de Historia Natural.
El centro comercial Bahía Sur, en San Fernando, que dice convivir con el Parque Natural Bahía de Cádiz, ha organizado este junio el llamado ‘mes de la espátula’. Así, todos los sábados se desarrollarán distintos talleres de observación, de anillamiento, de marcaje y de equipamiento de las aves con dispositivos de radioseguimiento, en un intento de iniciar en la ornitología a jóvenes y adultos.
Este programa lo abría el pasado viernes día 5 con la presentación de un nuevo estudio a nivel europeo, realizado por ornitólogos de la Sociedad Gaditana de Historia Natural. El proyecto Limes Platalea pone de relieve la importancia del entorno natural de la Bahía gaditana en la recuperación y conservación de la espátula común, platalea leucorodia.
Esta ave de 120 centímetros de envergadura casi extinta a mediados del siglo XX y que se reproduce principalmente en el Golfo de Cádiz, con colonias como las pajareras de Doñana, Marismas del Odiel y las de las salinas del Parque Natural Bahía de Cádiz, y en el Norte de Europa, ha podido recuperar su población gracias a largos programas de manejo y conservación de la especie y sus hábitats naturales.
Ambas zonas, Andalucía y Países Bajos, que cuentan cada una con aproximadamente 3.000 parejas, son migratorias a excepción de casi 2.000 aves que permanecen durante todo el año en los humedales andaluces. Andalucía Occidental y en concreto el Parque Natural Bahía de Cádiz, constituyen uno de los lugares fundamentales para la alimentación y descanso de las espátulas migratorias procedentes de Europa Occidental; Países Bajos, Francia, Alemania, España y Portugal.
Su viaje a África abarca desde finales de julio hasta mediados de noviembre. En primer lugar y hasta comienzo de septiembre parten las aves ibéricas y, posteriormente, las norte europeas. “Es en este contexto migratorio y de conservación de la espátula que inverna en Andalucía, donde el Parque Natural Bahía de Cádiz juega un papel prioritario”, ha indicado uno de los coordinadores del proyecto Limes Platalea, Francisco Hortas.
“Cada verano, especialmente en septiembre y octubre, cientos de espátulas se concentran en los fangos intermareales frente al paseo marítimo de Bahía Sur”, añade Javier Ruiz, el otro coordinador, quien afirma que “este lugar es uno de los más importantes para el tránsito de las aves antes del emprender el salto a África y que cuando los vientos para su partida se tornan desfavorables también se convierten en un importante lugar de refugio a la espera del momento adecuado para seguir su periplo”.
El papel jugado por este complejo comercial “ha sido clave”, se asegura en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, ya que gracias a la colaboración mantenida entre Bahía Sur y el Parque Natural, que han participado en el desarrollo del proyecto Limes Platalea, se ha podido descubrir por dónde y cuándo saltan las espátulas hacia África. Este hermoso espectáculo visual se puede observar entre el castillo de Sancti Petri, en Chiclana, y el Cabo Roche, en Conil.
“Se han llegado a contabilizar más de 15.500 aves a lo largo de todo el paso postnupcial, el 85% del total de la población de la vía de vuelo del Atlántico Este, con varias jornadas singulares de más de 1.000 aves al día”. Espacio que se conoce ya en toda Europa como Corredor Migratorio ‘Playa de la Barrosa-Cabo Roche’. “Hasta la fecha se desconocía por donde cruzaba este ave hacia África siendo además una especie que goza de gran reconocimiento en el Norte de Europa”, indicaba Ruiz. De este modo, la Bahía de Cádiz se convierte un “enclave único” y el Parque Natural, en “sitio de referencia para estas aves”.
El delegado territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta de la Andalucía, Federico Fernández, que también asistió a la presentación del proyecto, manifestó que “hace más de una década hubiese sido impensable que el Día Mundial del Medio Ambiente se celebrase en un centro comercial con una empresa como protagonista”. Esto pone de manifiesto que “el medio ambiente no sólo depende de una consejería sino que en su desarrollo y mantenimiento juega un papel fundamental la empresa y las asociaciones”, señaló. Asimismo, destacó que “Bahía Sur está haciendo méritos por días ya que su gerente no sólo tiene empatía sino inteligencia porque ve en el Parque Natural Bahía de Cádiz una magnífica conjunción con el comercio”. “Es una visión de empresario moderno en donde el medio ambiente se alza como oportunidad”, concluyó.
OCIO MEDIOAMBIENTAL
Por este motivo y dado que el centro comercial se enclava en pleno Parque Natural, ha realizado una “importante apuesta” por el mantenimiento de los programas de manejo y conservación de la especie y de sus hábitats naturales, siendo una de las principales “nuestro propio Parque Natural de la Bahía”, afirmaba el gerente de Bahía Sur, Ernesto Pardo.
“En Bahía Sur, desde que hace ya algunos años nos certificamos en la norma de gestión ambiental ISO 14001, hemos venido apostando por el respeto hacia el medioambiente en una travesía ascendente que, gracias al entorno en el que nos encontramos, nos lleva a adoptar una actitud proactiva ante todo lo que esté relacionado con el Parque Natural”, resaltaba Pardo.
Asimismo, en diciembre de 2013 el centro obtuvo la certificación medioambiental Breeam con la calificación de excelente en la gestión del edificio, una gestión que “va mucho más allá”. “Mientras en la mayoría de los espacios comerciales de nuestro entorno centran su ocio en el juego de bolos, las carreras de karts o el muy respetado séptimo arte”, en Bahía Sur –que se quedó hace años sin cines y sin bolera…- “hemos preferido abrir una gran ventana al Parque Natural y dirigir el ocio hacia el disfrute de todas las sensaciones que nos aporta esta magnífica joya”. Un ocio que para Pardo, “no es contemplativo” sino “una forma de conocer, valorar y cuidar un bien que debemos conservar para el disfrute de nuestros hijos, nietos y las generaciones venideras”.
Así, durante los meses de marzo a mayo, Bahía Sur ha realizado un programa de visitas con escolares de la provincia para que conozcan la importancia del entorno ambiental de la Bahía; por él han pasado ya 785 alumnos. Durante este mes de junio está prevista una nueva limpieza de la zona del Parque Natural colindante con el paseo marítimo en la que se ha convocado a todos los trabajadores del centro comercial con la intención de concienciar sobre la importancia de una convivencia sostenible.
Pardo reconocía que hace algunos meses el director del Parque Natural le explicó la importancia del proyecto Limes Platalea: “a raíz de esa reunión, contactamos con los responsables del proyecto y decidimos apoyarlo”.
Sobre el mismo, ya en septiembre, “pondremos el broche final con la presentación del libro ‘Limes Platalea. La migración del siglo XXI’ y con una jornada de observación de estas aves en el Parque Natural”, resaltó Pardo quien añadió que en Bahía Sur “estamos muy orgullosos de que el proyecto Limes Platalea haya consolidado a la Bahía de Cádiz como un enclave único y de referencia en el resto de Europa”.
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