El Ayuntamiento de San Fernando y la comunidad escolar del CEIP San Ignacio han mantenido un nuevo encuentro con la delegación territorial de Desarrollo Educativo y FP de la Junta de Andalucía en Cádiz para tratar de acercar posturas en cuanto al futuro de este obsoleto colegio público, con el edificio de Primaria clausurado desde hace meses por problemas estructurales, tras años en los que una y otra administración se han acusado mutuamente de no actuar en base a sus competencias.
Durante la reunión, solicitada por el Consistorio, se volvió a trasladar la voluntad expresa de la alcaldesa Patricia Cavada de, “más allá incluso del límite que por ley tiene como competencias municipales”, ayudar a la Junta a que encuentre soluciones a corto, medio y largo plazo “que permitan garantizar que los niños crezcan y aprendan en aulas y espacios dignos y seguros”.
Para el Gobierno local del PSOE, el problema radica en que “no es aceptable” que la administración autonómica mantenga colegios con más de 50 años y con problemas estructurales desde que se construyó. “Desde que la propia Junta advirtió de los problemas estructurales del edificio del CEIP San Ignacio, el Ayuntamiento se ha puesto manos a la obra para analizar, decretar y dar soluciones sobrepasando todas las responsabilidades municipales en materia de educación pública. Pero hasta ahora, todas las actuaciones, sin excepción, las ha desarrollado en solitario”, se remarca en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz.
En este sentido, se vuelve a relatar que el Consistorio ha costeado y coordinado desde el inicio del curso el traslado del mobiliario y materiales de Primaria al edificio de Infantil, la habilitación de la nueva señalética, la adecuación del edificio provisional con pequeñas reformas, la realización de los estudios técnicos, hasta la compra e instalación de estores y paneles de metacrilato o el pintado de los distintos espacios, actuaciones que entiende “nunca corresponden a un ayuntamiento sino a la Junta”.
Asimismo, añade, “se han dado todos los pasos” para garantizar que el aula matinal y el comedor ofrecieran un servicio de calidad, “pero la realidad es que la Junta de Andalucía ni siquiera ha remitido en estos meses el proyecto necesario para acometer la obra del office de la cocina, que asumirá, en un nuevo acto de ayudar en dar soluciones, el Ayuntamiento”. A esto se suma que la instalación eléctrica no ha superado la inspección del Organismo de Control Autorizado (OCA) realizada hace unas semanas, lo que obliga a tramitar un nuevo proyecto de adecuación energética del edificio, “que será también asumido por la administración local pese a que esta no es su competencia”. Entretanto, se sigue recurriendo al comedor del CEIP Quintanilla, lo que implica un traslado diario de los pequeños.
A la espera de que la Junta remita el proyecto del office, la adecuación energética se realizaría en verano, ya que por motivos de seguridad el edificio no puede estar en uso. Y se da la circunstancia de que, pese a que la delegación territorial se comprometió a dotar al centro de un módulo prefabricado para dar servicio provisional al comedor, hasta la reunión mantenida esta semana no ha anunciado su instalación y que su uso será múltiple, sin definir si finalmente albergará el comedor, “algo que el Ayuntamiento espera que así sea”.
Y pese a “todo este camino en soledad que está recorriendo el Ayuntamiento”, desde el equipo de Gobierno isleño sigue considerando “imprescindible” la necesidad de una unidad de acción e implicación de la Junta en esta problemática.
Desde la Junta, tras esta reunión, básicamente se apunta que la delegada territorial competente, Isabel Paredes, confía en que el Consistorio “desbloquee” los trámites administrativos “que impiden crear el itinerario de prioridades y actuaciones en torno al futuro del colegio y a su ampliación”.
LA JUNTA SIGUE SIN ACLARAR SI LEVANTARÁ UN NUEVO COLEGIO
Asimismo, en este encuentro en el que participaron por parte municipal el concejal de Infraestructuras y Mantenimiento Urbano, Javier Navarro, y la edil de Educación, Pepa Pacheco, el Ayuntamiento volvió a demandar a la consejería que comience con los trámites para la construcción del nuevo colegio. Ya sea en el solar del colegio ahora cerrado o ampliando el provisional.
“Se deben ir dando pasos, con el compromiso presupuestario, con la tramitación del proceso urbanístico y con la licitación de la redacción del proyecto y de la propia obra. Pero se sigue sin encontrar un compromiso, ni siquiera un pronunciamiento claro de la Junta en la voluntad real de construcción de un nuevo centro educativo”, lamentan desde el Ejecutivo de Cavada.
Al respecto, se ha vuelto a reiterar el ofrecimiento de ceder gratuitamente una parcela pública municipal en la que construir un nuevo edificio. En la ubicación que decida la comunidad educativa o los vecinos, “de modo que ni el barrio ni la ciudad pierdan un colegio público”.
En este sentido, el Ayuntamiento quiere poder tirar lo antes posible este edificio con daños estructurales (construido en los años 70 con materiales de mala calidad) “por responsabilidad y como parte de sus competencias”. Por ello, va a solicitar ya la descatalogación del edificio para poder licitar su derribo.