Tras pasar por Granada, València, San Sebastián y Vigo, el Festival de Arquitectura Urbana TAC! recala ahora en San Fernando con un monumento efímero que emula las tradicionales montañas de sal que en el pasado eran habituales en la Bahía de Cádiz; un proyecto que reflexiona sobre la regeneración del espacio urbano “en un diálogo entre el entorno y sus recursos, el patrimonio histórico y cultural con la ciudadanía y los valores vernáculos con la innovación y la sostenibilidad”.
TAC! es una iniciativa nacida en 2022 impulsada por el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana y dirigida a jóvenes arquitectos, y en su tercera edición, la de 2024, tiene dos sedes: Vigo, que acogía este evento entre junio y julio alrededor de un pabellón con las bateas de mejillones como protagonista; y La Isla, que desde ya y hasta el 14 de octubre puede contemplar en plena plaza del Rey el proyecto ideado por los arquitectos Carlos Montes y José Rodríguez, bajo el lema ‘La sal’; quienes reconocen que antes de hacerlo realidad “sabíamos muy poco de sal, hemos venido a aprender, a investigar”. De hecho, durante el proceso han contado la ayuda y guía de Juan Ruiz, un salinero local.
Un festival que más allá de la singular torre (para hacerle fotos o para pasar por abajo), propone diferentes encuentros y charlas (todavía no concretados) en torno a este elemento temporal “incentivando el concepto de espacio público como punto de encuentro en el que la cultura sea motor de cambio y dinamizador”; además de una exposición en el propio Ayuntamiento que muestra una selección de proyectos destacados presentados al concurso de ideas de esta edición.
“LOS EDIFICIOS HABLAN”
En colaboración con la Fundación Arquia y con el apoyo del Ayuntamiento isleño (que presentó su candidatura en solitario) y la Diputación (estaba anunciada la presencia de su vicepresidente Germán Beardo, y no ha aparecido), el lunes se presentaba esta segunda parte de la tercera edición de TAC!, ante representantes de la “sociedad civil isleña” a los pies del mismo pabellón que viene levantándose desde principios de mes.
En esta inauguración, ante la mirada curiosa de vecinos que a esas horas pasaban por la plaza del Rey y con el ida y vuelta del tranvía como testigo, representando al Ministerio de Vivienda, la subdirectora general de Arquitectura y Edificación, Elena Calama, ha destacado los principales objetivos del festival, que entroncan con los mandatos de la Ley de Calidad de la Arquitectura y buscan, entre otras cosas, “mostrar la arquitectura como el potente agente transformador y motor de cambio que es, acercar la arquitectura y sus valores a la sociedad y convertirse en espacio de oportunidades para jóvenes arquitectos”.
Por su parte, la directora de la Fundación Arquia, Sol Candela, ha señalado que este evento nacional “propone reflexionar sobre el presente, pero también sobre el futuro de la arquitectura”; y es además una oportunidad para apoyar el talento de los jóvenes arquitectos y la participación de la ciudadanía en los retos que plantea esta disciplina”.
Mientras, para Javier Peña, director artístico de TAC!, el festival, “una aventura cada año”, se ha convertido en “algo vertebrador de la arquitectura en la sociedad”, demostrando “cómo la arquitectura puede transformar los espacios públicos y la forma en la que los percibimos”. “Los edificios hablan”, remarcaba.
Por su lado, la alcaldesa Patricia Cavada ha significado que San Fernando presentó su candidatura como sede del TAC! desde el convencimiento de que “estamos inmersos en la transformación más disruptiva y acelerada que ha conocido la sociedad” y, en este contexto, “las ciudades se han convertido en la última década en el lugar donde responder a los desafíos de nuestro tiempo”, destacando la importancia del urbanismo y la configuración del espacio público para transformar las ciudades y a la sociedad.
Además, ha puesto en valor la coincidencia de que el arranque del festival es paralelo a la celebración del 24 de Septiembre en la localidad (aniversario de la primera sesión de las Cortes Generales y Extraordinarias celebrada en 1810, que dos años después promulgarían la Constitución de 1812). Así, la primera edil socialista ha interpretado que la suma del TAC! y 24-S “permiten hacer desde San Fernando un llamamiento a la acción conjunta para cambiar las ciudades” uniendo en el centro del debate los conceptos del derecho a la ciudadanía y el derecho a la ciudad.
“UN MATERIAL CLAVE EN TÉRMINOS DE IDENTIDAD, Y DE SOSTENIBILIDAD”
Este pabellón ‘La sal’ se basa en tres materiales: junto a la sal como elemento principal (que se ha sacado de salinas del entorno), la madera y el acero le dan forma, en un proceso de construcción y montaje “que conjuga la innovación y los procesos tradicionales, y que parte de la necesidad de buscar alternativas sostenibles a los materiales de construcción industriales”.
Así, aunando sostenibilidad y tecnología, la sal forma parte del basamento del pabellón emulando las tradicionales montañas de las salinas; la madera sirve para contener la estructura; y andamios y armazones (acero) conforman el elemento emergente recordando los antiguos medios empleados en el transporte y trasiego de la sal.
El proyecto pone el foco en un material que en los últimos años ha sido objeto de interés en la investigación, que explora formas experimentales como el proceso natural de cristalización para su uso en la construcción, materia prima en la impresión 3D o como alternativa al cemento (responsable del 8% de las emisiones de CO2 globales). Así, “se ensalza como un material clave no solo en términos de identidad, sino también en términos de sostenibilidad”, remarcan desde la organización del TAC! en la información trasladada a DIARIO Bahía de Cádiz.
Desde la centralidad en la que se sitúa este pabellón en la reurbanizada plaza del Rey (sin el vestigio franquista del monumento a Varela ni palmeras), la iniciativa “emerge hacia el exterior para plantear un diálogo con el entorno y sus recursos”; reivindicando desde la arquitectura “los valores vernáculos de los modos de vida tradicionales y sumamente sostenibles, y haciendo transversales cuestiones sociales y climáticas”.
Entre las 127 propuestas recibidas al concurso (más de una veintena hacían referencia a la sal), el jurado se decantó por levantar en La Isla esta estructura que desaparecerá a mediados de octubre, aunque la organización asegura que se “reciclarán” sus elementos. El primer premio de TAC! tiene una dotación de 15.000 euros, a lo que se suma el coste de ejecución del pabellón, hasta los 90.000 euros.
La misión de TAC! Festival de Arquitectura Urbana es unir la arquitectura contemporánea y la práctica joven con la reflexión sobre lo urbano y lo social a través de la construcción de un pabellón temporal. Cada edición se compone de dos convocatorias: un llamamiento para ser ciudad TAC y un concurso de ideas para la creación del pabellón.