La empresa municipal Aremsa, del Ayuntamiento de Rota, ha quedado disuelta definitivamente y en su lugar ha nacido la nueva sociedad de responsabilidad limitada, Movilidad y Desarrollo Urbano Sostenible (Modus), que será totalmente controlada y gestionada por el Consistorio, a través de la Secretaria General y la Intervención municipal.
Esta actuación se enmarca en el compromiso del actual equipo de Gobierno de PSOE e IU de mejorar la estructura del Ayuntamiento, eliminando las funciones y empresas municipales, tales como Sursa y Sodesa.
El primer teniente de alcalde y portavoz del bipartito, Daniel Manrique, ha subrayado al respecto que la eliminación de Aremsa no entraba en un principio en la hoja de ruta del Ejecutivo, que sí planteaba un cambio en la citada empresa. Pero, finalmente, “y ante la actitud de bloqueo de la oposición que hacía imposible la gestión de la empresa”, inició su supresión en dos fases. La primera, en enero de 2017, con la subrogación de gran parte de los servicios de Aremsa al Ayuntamiento; y una segunda fase que concluirá con la eliminación de esta empresa como se conoce actualmente.
Hasta llegar a este punto, ha sido un proceso lento, ya que tal y como explica Manrique, todo ha necesitado de la autorización del Ministerio de Hacienda, que en un principio exigió al Ayuntamiento un nuevo plan de ajuste que supondría subida de impuestos, algo que el Gobierno municipal descartó, para buscar una vía alternativa que permitiera crear una sociedad con un funcionamiento similar a la de un ente público empresarial, pero sin que perjudicara a los ciudadanos.
Este mismo jueves día 8 se ha convocado el consejo de administración de Aremsa para aprobar el proyecto de Estatuto de la nueva empresa (la representante de RRUU ya se ha quejado de la fecha, por coincidir con la huelga feminista, y no asistirá), de manera que una vez esté aprobado, el 15 de marzo se convocará la Junta General de la sociedad a liquidar para la aprobación definitiva de esta actuación, y poder registrar en el Registro Mercantil la nueva sociedad.
A partir de este registro “se abrirá un nuevo tiempo para los servicios que gestionará Movilidad y Desarrollo Urbano Sostenible, Modus Rota SL”, ha subrayado este edil del PSOE.
LAS DIFERENCIAS ENTRE AREMSA Y MODUS
El primer teniente de alcalde se ha detenido, en la información remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, en las diferencias que existirán entre la empresa municipal Aremsa, que ahora desaparece, y la nueva Modus, así como las mejoras que se han incorporado a sus estatutos para garantizar entre otros aspectos “una mayor claridad en cuanto a competencias, contrataciones ajustadas a ley, y nuevos órganos de gestión y seguimiento en los que se prohibe retribución alguna para los cargos que los compongan”.
Los estatutos de la nueva sociedad de responsabilidad limitada establecen en el objeto social, que Modus Rota se encargará de la infraestructura urbana y medioambiental, el ciclo del agua (suministro, saneamiento y depuración), la conservación de vías públicas y señalización de tráfico, la gestión del alumbrado público y de eventos; la parte de la recogida de residuos sólidos urbanos y limpieza viaria que no están contratada con FCC, la protección del medioambiente y conservación de parques y jardines, playas y parques periurbanos, del parque móvil municipal, y la gestión y administración de bienes de naturaleza privada del Ayuntamiento.
Así, desaparecen del objeto social servicios tales como conserjería, vigilancia, instalaciones deportivas, informática o calidad, “que no se justificaba con la naturaleza de la empresa”.
Desglosando las diferencias y mejoras que conlleva la creación de Modus, se ha eliminado de los estatutos la cláusula residual que permitía que la empresa pudiera acometer otros servicios a petición del Gobierno municipal de turno, ya que a partir de ahora dicho extremo tendrá que ser aprobado por el pleno.
En cuanto al organigrama, contará con un presidente y un consejo de administración de entre tres y seis consejeros, “de manera que la oposición no pueda bloquear su gestión”. Además, se creará un órgano nuevo: una comisión de seguimiento que dará cabida a representantes de todos los grupos municipales, que de manera regular tendrán información detallada, “en una apuesta por la transparencia”. Con respecto a estos órganos, se ha incluido una cláusula por la que se prohíbe expresamente cualquier tipo de retribución para los cargos de dichos órganos, bajo ningún concepto, ni dietas, ni indemnizaciones, “todo ello con el objeto de acabar con los sobresueldos que conseguían determinados concejales”.
La sede de la nueva empresa se mantendrá por el momento donde se ubica Aremsa, a la espera de trasladarla al centro, ya que la intención del Gobierno municipal es que Modus “funcione como un apéndice del Ayuntamiento, y por tanto que esté controlada por éste”. Y en cuanto al personal actual de Aremsa, y que en estos momentos se limita a unas 50 personas, pasará a ser plantilla de la nueva empresa, que tendrá entre sus cometidos elaborar una Relación de Puestos de Trabajo (RPT) que determine las necesidades de contratación.
“SE ACABARÁN LAS CONTRATACIONES A DEDO”
Dichos estatutos recogen también la obligatoriedad de realizar una auditorio anual, que los contratos con proveedores se adjudiquen según la Ley de Contratos del Sector Público; así como que los contratos de personal se realicen respetando los criterios de igualdad, transparencia, mérito y publicidad, para evitar así contrataciones a dedo.
En relación al tema de contrataciones, Manrique ha adelantado que en el consejo de administración de esta semana también se verá el informe que la auditoría externa ha realizado sobre la contratación en Aremsa en anteriores mandatos. Un informe “aplastante” que pone de manifiesto que los contratos se realizaban “sin control objetivo”.
De hecho, el informe, que se publicará en el portal de la transparencia del Ayuntamiento, revela que aunque Aremsa estaba obligada desde 2007 a realizar procesos de selección con los principios de igualdad, transparencia, méritos y publicidad, “el cien por cien de los contratos estudiados en el muestreo han resultado ser contratos con irregularidades”.