La consejería de Medio Ambiente de la Junta ha anunciado que finalizará antes del verano la ampliación de la EDAR de Rota. Los trabajos se encuentran al 95% de su ejecución y han supuesto una inversión de 6,2 millones de euros. Tras las obras, la depuradora alcanzará la capacidad suficiente para dar servicio a la demanda de 162.500 habitantes en la temporada alta y 130.000 en la baja.
La consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía ha anunciado que finalizará antes del verano la ampliación de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Rota, un proyecto –demorado varios años- que ha supuesto una inversión de 6,2 millones de euros y que, se asegura, “ha generado 115 empleos, la mayoría de ellos directos”.
Así lo ha confirmado el delegado territorial de Medio Ambiente en Cádiz, Federico Fernández, que ha destacado que este proyecto se encuentra entre las obras hidráulicas prioritarias para la provincia, y que beneficiará a una población de 162.500 habitantes.
Esta actuación está declarada de interés para la comunidad autónoma, por lo que se financia mediante el canon de mejora autonómico aprobado por la Ley de Aguas Andaluza y destinado a tal fin. Las razones que han llevado a la Junta a realizar esta obra de ampliación son dos fundamentalmente; el aumento poblacional que sufre el municipio en época estival y la decisión de incluir en la EDAR los vertidos de la segunda fase de la urbanización de Costa Ballena. A día de hoy los trabajos se encuentran “muy avanzados”, ya que se ha ejecutado el 95,2% de las actuaciones previstas.
La actual EDAR, construida entre los años 1998 y 2001, recoge las aguas residuales procedentes de la Villa, de la base militar de Rota y el complejo turístico de Costa Ballena. Actualmente tiene capacidad para hacer frente a unos 12.000 metros cúbicos de vertido al día y tras la reforma aumentará hasta los 30.000 metros cúbicos, lo que supone que duplicará con creces su capacidad de tratamiento. De esta manera, una depuradora que hasta ahora podía afrontar la depuración de las aguas residuales producidas por unos 70.000 habitantes equivalentes pasará tras las obras a alcanzar la capacidad suficiente para dar servicio a la demanda de 162.500 en la temporada alta y 130.000 en la baja.
La remodelación y ampliación de las instalaciones garantizará que el agua retorne al medio en las condiciones adecuadas. Las mejoras se realizarán tanto en las fases de pretratamiento como de tratamiento secundario y de línea de fangos.
BENEFICIO A REGANTES
Tanto la ampliación de Rota como las nuevas depuradoras de Chipiona y la de Sanlúcar (actualmente en redacción de proyecto), supondrán un beneficio notable para los más de 3.500 regantes de la Costa Noroeste, puesto que las dos últimas dispondrán de un tratamiento terciario de filtración y desinfección que permitirá la reutilización del agua para el riego.
Asimismo, aumentar la capacidad de Rota conlleva que llegue una mayor cantidad de agua depurada hacia la estación de tratamiento terciario de Costa Ballena, de donde ya se surten los campos de golf y cuya agua podrán reutilizar también estos regantes.