Las obras de “reforma y mejora” de los colegios públicos Luis Ponce de León y Pedro Antonio de Alarcón, de Rota, que contemplan la retirada de los techos de uralita todavía presentes en estos centros educativos, avanzan “a buen ritmo”. Lo aseguran desde la Junta de Andalucía, que este miércoles ha vuelto a hacerse eco de esta actuación, que ejecuta la Agencia Pública Andaluza de Educación durante el presente verano, aprovechando una visita del delegado del Gobierno andaluz, Juan Luis Belizón.
Los trabajos que se desarrollan en estos dos centros forman parte del plan de retirada de amianto en centros educativos desarrollado por la Junta y cuentan con un presupuesto de adjudicación conjunto de casi 340.000 euros, de los que 154.000 euros corresponden al CEIP Luis Ponce de León -cuya intervención desarrolla el Grupo Constructor Grucal Andalucía- y 185.300 euros al CEIP Pedro Antonio de Alarcón, cuyas obras se han adjudicado a Díaz Cubero Empresa Constructora.
Según se recuerda en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, los trabajos en ambos centros de Infantil y Primera consisten en la sustitución de las cubiertas de fibrocemento, el repaso de las estructuras metálicas, la recolocación de falsos techos en las zonas en las que se considere necesario solventar el aislamiento térmico y el cumplimiento de la normativa acústica, así como la sustitución de depósitos acumuladores de agua.
“Estas obras marchan a buen ritmo, cumpliendo con el compromiso adquirido para que los centros estén en óptimas condiciones según los plazos establecidos desde la Agencia Pública Andaluza de Educación”, ha afirmado Belizón durante la visita, acompañado por el alcalde, Javier Ruiz Arana; la delegada territorial de Educación, Remedios Palma; la concejala y diputada provincial de Cooperación Local, Encarnación Niño; el gerente provincial de la Agencia Pública Andaluza de Educación, Álvaro Molinillo; los directores de los centros; y miembros del consejo escolar.
Asimismo, el delegado del Gobierno andaluz en Cádiz ha agradecido la colaboración con la dirección de los centros educativos, así como la implicación de los consejos escolares.
Estas actuaciones previstas para el periodo estival en los centros educativos forman parte de la planificación de la retirada progresiva del amianto –material considerado peligroso para la salud- en las infraestructuras públicas educativas, hasta 2022, sin prisas. La fase que se está ejecutando actualmente en la provincia afecta a seis centros y supone una inversión que supera los 1,2 millones.