El diputado en el Congreso del PSOE por Cádiz, adscrito a la Comisión de Defensa, José Ramón Ortega, visita días atrás el Ayuntamiento de Rota y abordaba con el alcalde y el primer teniente de alcalde, Javier Ruiz Arana y Daniel Manrique, respectivamente, varios asuntos relacionados con la defensa nacional que afectan directamente a la Villa; entre los que sobresale el conflicto que la empresa norteamericana Louis Berger Aircraft, actual concesionaria del servicio aeroportuario de la Base Naval, mantiene desde hace ya años (despidos, persecución laboral y sindical, inseguridad…)
En el transcurso del encuentro con el diputado nacional, uno de los interlocutores del Gobierno municipal para aquellos asuntos relacionados con el Ministerio de Defensa, se ha abordado la posibilidad de estudiar si este eternizado conflicto que Louis Berger mantiene con los trabajadores pudiese suponer la exclusión de la empresa del nuevo proceso de licitación abierto en estos momentos.
De hecho, EEUU está llevando a cabo una nueva adjudicación del servicio aeroportuario de la Base de Rota, al que se han presentado varias empresas, entre ellas la actual concesionaria.
Si bien se trata de un procedimiento que le compete única y exclusivamente a EEUU, “hay asuntos que afectan a la seguridad que se tratan en la comisión bilateral entre España y Estados Unidos”.
Es precisamente en esta comisión donde se está intentando analizar si los conflictos que ha podido generar a la seguridad nacional las distintas huelgas y actuaciones que se han llevado a cabo y la precariedad en la que se ha prestado el servicio, pueden servir para excluir a Louis Berger del proceso de licitación, “sobre todo teniendo en cuenta que a tenor del historial de estos años la empresa persiste en mantener el citado conflicto”, se subraya en la información recogida por DIARIO Bahía de Cádiz de fuentes municipales.
El pleno del Ayuntamiento de Rota ya aprobó en diciembre de 2019 declarar entidad ‘non grata’ a dicha problemática firma norteamericana como consecuencia de este largo conflicto laboral “que lejos de resolverse se está enquistando aún más”; así como “por la actitud y total falta de respeto de la citada empresa a los derechos de los trabajadores, a las instituciones y el ordenamiento jurídico español, y al propio pueblo de Rota”.
