Usuarios de la Comunidad Terapéutica de Salud Mental del Hospital de Puerto Real han realizado cuadros y paneles que se han instalado en la sala de espera del Hospital de Día Quirúrgico Infanto-Juvenil y la antesala de Quirófano. La iniciativa se enmarca en un proyecto que busca fomentar, por un lado la comodidad y calidad asistencial de los enfermos, y por otro, sensibilizar a la población sobre la capacidad de empatizar de las personas con enfermedad mental.
Usuarios de la Comunidad Terapéutica de Salud Mental del Hospital Universitario de Puerto Real han realizado cuadros y paneles decorativos que se han instalado en la sala de espera del Hospital de Día Quirúrgico Infanto-Juvenil y la antesala de Quirófano. La iniciativa se enmarca en un proyecto de las unidades de gestión clínica de Salud Mental y Bloque Quirúrgico del centro, que busca fomentar, por un lado la comodidad y calidad asistencial de los usuarios durante su estancia en el hospital, y por otro, sensibilizar a la población sobre la capacidad de empatizar de las personas con enfermedad mental.
La iniciativa lleva por nombre ‘Haciendo sonreír a los niños’ y se ha realizado en el marco de los talleres de reciclado y de color que desarrolla la Comunidad Terapéutica. Dichos talleres favorecen la expresión creativa artística como vehículo terapéutico que permite desarrollar la capacidad de reflexión, comunicación, expresión y desarrollo personal, utilizando el arte y los medios visuales como la principal vía de comunicación. Además, este proyecto ha permitido conocer el grado de estigma por parte del personal sanitario hacia las personas con enfermedad mental y favorecer su recuperación.
La idea y dirección del proyecto han corrido a cargo de la residente María Robles y la terapeuta ocupacional Mercedes Amézaga; la ejecución, de 29 pacientes en 50 sesiones desde octubre con sus monitoras, Teresa Soler y Elena López; asimismo, han colaborado el coordinador de Enfermería, Antonio Linares, el director de la UGC de Salud Mental, Eulalio Valmisa, la responsable de Enfermería de Bloque Quirúrgico, Concepción Fernández, y las psiquiatras Joaquina Lloreda y Ana Candil.
Según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz, la delegada territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Miriam Alconchel, acompañada del director gerente del hospital, Rafael Pereiro, y su equipo, ha visitado las instalaciones y ha resaltado la importancia de actividades como ésta, que buscan la normalización de los pacientes con enfermedad mental, acabando con los estigmas. En ese sentido, ha puesto de relieve el trabajo que se realiza desde esta Comunidad Terapéutica de Salud Mental, proporcionando tratamiento intensivo a personas con trastorno mental grave cuando no es posible proporcionar dicho tratamiento desde el Equipo de Salud Mental Comunitario.
BUSCANDO LA INTEGRACIÓN SOCIAL
Las instalaciones de la Comunidad Terapéutica de Puerto Real, inauguradas hace tres años, permiten tratar a 20 usuarios en régimen de hospitalización total y otros 20 en régimen de hospitalización parcial, es decir, que acuden durante el día y duermen en su casa o en viviendas tuteladas de la Fundación Andaluza para la Integración Social de las Personas con Enfermedad Mental (Faisem).
Durante su ingreso, estas personas reciben tratamiento psiquiátrico y psicológico, y tras valorarse sus necesidades entran a formar parte de diversos programas, enfocados la mayoría de ellos hacia la recuperación. En estos programas se trabaja la adhesión al tratamiento (programa de automedicación), los hábitos de vida saludables (dieta equilibrada, actividad física,..), la administración económica, la autonomía personal (actividades básicas e instrumentales de la vida diaria) y la expresión emocional (grupo de teatro y programa color). De esta manera la persona adquiere o recupera habilidades perdidas debido a la enfermedad mental; además, se presta atención a las familias, integrándolas en un grupo de apoyo familiar o en otro de psicoeducación.
El equipo de la Comunidad Terapéutica es multidisciplinar y lo forman psiquiatras, psicólogos, enfermeros, terapeutas ocupacionales, auxiliares de enfermería y monitores. Estos profesionales se coordinan con Faisem para, dependiendo de las características personales de cada usuario, integrarlos en programas de formación, residencial o empleo protegido. Y es que, la idea es que el paciente, tras su paso por la Comunidad Terapéutica, haya alcanzado su máximo potencial de recuperación y vuelva a integrarse en su entorno social.
Los trastornos mentales constituyen un problema de primera magnitud en nuestra sociedad, no sólo por su elevada incidencia (se estima que pueden afectar a un 25% de la población general), sino por el impacto en sufrimiento y desestructuración que sufren los pacientes, sus familias y el entorno cercano. Sólo este hecho justifica que el abordaje de los problemas de salud mental figure entre los objetivos prioritarios de las administraciones públicas.
La enfermedad mental comprende un amplio número de patologías, que generalmente se caracterizan por su larga duración –procesos crónicos-, lo que supone una enorme carga a la familia, al sistema sanitario y a la propia sociedad.