El Ayuntamiento de Puerto Real mantiene la prohibición de acceder con el coche al entorno del colegio María Auxiliadora, ahora que se inicia el curso escolar, junto al control por la Policía Local de la restricción del tráfico en las zonas semipeatonalizadas. Atendiendo a las necesidades de personas que viven a una distancia considerable, se ha habilitado una reserva de aparcamiento en la zona de la estación en horario de entrada y salida de los niños.
El Ayuntamiento de Puerto Real va a mantener la prohibición de acceder con el vehículo al entorno del centro María Auxiliadora, ahora que se inicia el curso escolar. El concejal de Urbanismo, Iván Canca, recuerda que “esta medida, implantada durante el pasado curso, tiene el objetivo de aumentar la seguridad y salubridad del alumnado”.
Esta prohibición ya se encuentra establecida a través de la señalización de tráfico instalada, y será de obligado cumplimiento, exceptuando los casos especiales debidamente autorizados.
Atendiendo a las necesidades de personas que viven a una distancia considerable de este colegio, el Ayuntamiento va a habilitar una reserva de aparcamiento en la zona de la estación de 8.30 a 9:00 horas y de 13.30 a 14.00 horas, según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz.
En este punto, siendo conscientes de que el pasado curso no se respetaba la reserva de aparcamientos con fines de carga y descarga de escolares en los horarios establecidos, perjudicando así a las personas que querían usar este espacio, la concejalía de Tráfico va a expedir tarjetas de autorización de aparcamiento a los padres que así lo soliciten en el Registro General del Ayuntamiento.
Y los agentes de la Policía Local controlarán el correcto funcionamiento de las zonas reservadas en esos horarios; no obstante, estarán libres para aparcar el resto del día y los fines de semana.
Asimismo, el Ayuntamiento ha querido realizar un llamamiento para que se respeten las calles que han sido cerradas al tráfico, “una prohibición que ha sido quebrantada de manera continua incluso a grandes velocidades”, se lamenta. Por este motivo, la Policía Local seguirá realizando controles de acceso aleatorios con el fin de que pueda lograrse el objetivo perseguido con esta medida, que no es otro que “mejorar la seguridad de los peatones y en general la calidad de vida del casco urbano puertorrealeño, evolucionando así hacia la tendencia de las urbes modernas”.
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