La sede de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC) ha acogido este viernes la firma del convenio para la cesión a favor del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif, dependiente del Ministerio de Fomento) de los terrenos municipales necesarios en Puerto Real para la construcción del ansiado ramal de acceso ferroviario a las instalaciones portuarias del Bajo de La Cabezuela.
El alcalde, Antonio Romero, ha rubricado el acuerdo (revisado respecto al de 2012 y más beneficioso para la Villa) con las presidentas de Puertos del Estado y Adif, Ornella Chacón e Isabel Pardo de Vera, respectivamente, y con la presencia del presidente de la APBC, José Luis Blanco, y del subdelegado del Gobierno, José Pacheco.
En virtud de este acuerdo, el Ayuntamiento puertorrealeño cederá gratuitamente a Adif la titularidad de los terrenos municipales, con una superficie de 19.901 metros cuadrados, que pasarán a formar parte de la infraestructura ferroviaria del ramal de acceso a La Cabezuela, en la línea Sevilla-Cádiz. La ejecución de esta obra correrá a cargo igualmente de Adif, tal y como se establece en el convenio suscrito con Puertos del Estado en 2016.
El Ministerio de Fomento y el Ayuntamiento, con la participación de la Junta de Andalucía, vienen colaborando desde 2005 en la integración del ferrocarril en Puerto Real, colaboración que se ha concretado en dos importantes actuaciones: el soterramiento de la línea ferroviaria, en una longitud de 856 metros, a su paso por el casco urbano y la posterior urbanización de los suelos ferroviarios aflorados con motivo del soterramiento y destinados a dotaciones públicas municipales.
En ese contexto, y como compensación de las obras de integración llevadas a cabo por la Administración General del Estado, el Consistorio adquirió el compromiso de poner a disposición de Fomento, sin contraprestación alguna y libre de cargas, los terrenos necesarios para la construcción del ramal al Bajo de La Cabezuela.
Con la firma de este renovado convenio se da un paso “imprescindible y decisivo” para la consecución de un objetivo estratégico en el desarrollo del Bajo de La Cabezuela. El futuro enlace ferroviario “mejorará las posibilidades logísticas de las empresas de la zona e impulsará el desarrollo del Puerto de la Bahía de Cádiz y su área geográfica de influencia, potenciando la máxima intermodalidad en el transporte de mercancías”, se insiste.
Según el anterior convenio firmado en 2012 entre Ayuntamiento y Adif, el municipio tenía que, además de aportar los terrenos para el tren a La Cabezuela, otros terrenos que no fueran de titularidad municipal (vía expropiación), pagar los desvíos de servicios necesarios (conducciones de agua, luz, gas, telecomunicaciones y otros) y, además, la obligación de mantener las obras realizadas. Esta situación ya ha sido revertida gracias a las “buenas relaciones” que el actual equipo de Gobierno municipal de Sí se puede y Equo ha logrado establecer con las administraciones implicadas, y en virtud de las cuales serán Puertos del Estado y Adif quienes costeen los trabajos en su conjunto, con lo que las arcas municipales se ahorran unos 2 millones de euros, según afirmaba hace unos días el alcalde.
SITUACIÓN ACTUAL DEL PROYECTO
Adif, según se confirma en la nota de Fomento remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, sigue adelante con los trámites necesarios para la construcción de vía del ramal ferroviario, de una longitud aproximada de 4,5 kilómetros. El proceso ha superado la fase de información pública sobre los bienes y derechos afectados por esta actuación, a efectos de declarar la necesidad de ocupación y posterior fase de expropiaciones. En paralelo el proyecto de ejecución ya está redactado.
Una parte importante de las operaciones llevadas a cabo, y que son necesarias para concretar el trazado definitivo, se han centrado en la identificación y definición del modo de obtención de los terrenos necesarios para la ejecución de la obra; así como la afección a viales, al Parque Natural de la Bahía de Cádiz y a otras instalaciones y servicios (líneas eléctricas, conducciones de saneamiento y agua, telecomunicaciones, etc.).
El convenio acordado por Puertos del Estado y Adif en abril de 2016 regula la financiación de esta obra. Adif asume la ejecución de la construcción del ramal ferroviario, y Puertos del Estado su financiación, hasta un máximo de 20 millones de euros con cargo al Fondo Financiero de Accesibilidad Terrestre Portuaria.
Actualmente se está tramitando una adenda a este convenio, para incrementar a 26,5 millones el importe máximo que financiará Puertos del Estado. Con ello, la aportación financiera se ajusta al presupuesto de ejecución de las obras, según el proyecto redactado por Adif, y se mantiene una financiación de la obra del 100% con cargo al Fondo Financiero de Accesibilidad Terrestre Portuaria creado por el Real Decreto Ley 8/2014, que permite a los organismos portuarios participar en la financiación de los proyectos de conexión viaria y ferroviaria fuera de su zona de servicio.
UNA ACTUACIÓN PLANIFICADA DESDE HACE AÑOS
Estas obras, que se llevan exigiendo años, se anunciaban por parte de Puertos del Estado, curiosamente, en plena campaña electoral de cara al 20-D de 2015. Entonces el Gobierno central del PP prometía que arrancarían en 2016 con una inversión inicial de 3 millones, mientras que para 2017 se contemplaban 10 millones más y, para 2018, los 7 restantes. Obviamente, todos los plazos se han incumplido.
El enlace en cuestión fue incluido en septiembre del año 2000 por Fomento en su Plan de Infraestructuras 2000-2007, bajo el epígrafe ‘Acceso ferroviario al Bajo de la Cabezuela’. Dicha obra se planificó en dos tramos. El primero, en la zona del muelle, y el segundo, desde los astilleros hasta Las Aletas. La APBC fue la encargada de la construcción de las tres terminales dentro de La Cabezuela, para lo que consiguió financiación procedente de la Unión Europea. Por su parte, el Ministerio adjudicó en junio de 2009 la construcción del segundo tramo por 17,7 millones con un plazo de ejecución de 32 meses. El proyecto incluía además, un paso elevado para el tren desde el aparcamiento de los astilleros de Puerto Real hasta la zona de marismas para salvar así el paso de la carretera de acceso a Cádiz. Poco más se supo de esos trabajos, pese a demandarse reiteradamente.