El concejal de Urbanismo e Infraestructuras del Ayuntamiento de Puerto Real ha detallado la reorganización que se viene realizando en el presente mandato de la Brigada Municipal de Mantenimiento, con el fin de dotarla de “mayor eficiencia”. Un servicio mermado en personal y a la vez con trabajadores de una media de edad elevada. El nuevo bipartito intenta que la Brigada opere “de forma unificada, organizadamente y con una planificación determinada”, y beneficiando con equilibrio a todas las zonas y barriadas.
El concejal de Urbanismo e Infraestructuras del Ayuntamiento de Puerto Real, Iván Canca, ha explicado la reorganización que se viene realizando en el presente mandato de la Brigada Municipal de Mantenimiento, con el fin de dotarla de “mayor eficiencia” al servicio que presta a la comunidad.
Aquejada de una media de edad elevada para el trabajo a desempeñar, la Brigada se resiente de las estipulaciones aprobadas en el plan de ajuste municipal, que impide la contratación de nuevos trabajadores tras las sucesivas jubilaciones, por lo que la plantilla, “además de no ser joven, va mermando en número paulatinamente”. A este inconveniente se añade la falta de planificación y organización de la que adolece, pues durante el anterior mandato con el PA en el Gobierno los partes de trabajo “estaban al albur de las ocurrencias de los concejales, en lugar de responder a un criterio de prioridades acorde con las necesidades de los vecinos”, se señala desde el actual bipartito.
Como responsable de esta unidad administrativa, Canca dice haber puesto su empeño en que las personas que forman parte de la Brigada trabajen “de forma unificada, organizadamente y con una planificación determinada”, de manera que se pueda aprovechar al máximo los recursos municipales. Estas determinaciones “serán publicadas en la página web, de modo que la ciudadanía pueda saber, al menos con periodicidad semanal, las faenas que acometa”.
El objetivo no es otro que el de “tratar con equilibrio las distintas zonas y barriadas, puesto que los recursos son limitados, atendiendo a las urgencias pero también a las demandas de los vecinos”.
Ejemplos de ello son los trabajos que se acaban de finalizar en El Marquesado, habiéndose colocado varios puntos de iluminación, y comenzando ahora al arreglo del acceso peatonal sobre un aliviadero de pluviales que es muy necesario para la entrada a la barriada. Al mismo tiempo, la plaza ubicada en la calle Real, donde se encuentra la finca Villa Olimpia, también ha sido objeto de intervención culminada en estos días.
LAS PRÓXIMAS ACTUACIONES
En lo que queda de este año 2015, según se ha trasladado a DIARIO Bahía de Cádiz, los efectivos de la Brigada van a subsanar problemas de accesibilidad en al menos dos puntos de la zona de esparcimiento creada en la parcela del antiguo teatro de verano. A pesar de que el proyecto contempla los requisitos de accesibilidad estipulados por Ley, las autoridades municipales consideran que la acera situada frente a este espacio, aunque se encuentre fuera del ámbito de la obra, debe también observar estas estipulaciones.
Asimismo, y también antes de fin de año si se va a intentar proceder al arreglo del paseo marítimo del Río San Pedro y se va a habilitar con hormigón el acceso lateral del IES Virgen del Carmen que se torna impracticable cuando llueve.
Para principios del próximo año está previsto que se repare la acera deteriorada en la Avenida de Andalucía, en los jardines del soterramiento, a la altura de la antigua Romero Puerto, una reparación que ha sido reclamada al Ministerio pero que el Ayuntamiento se ve obligado a reparar de manera subsidiaria “ante la desidia de la administración central”. Así también se contempla una serie de actuaciones en Pinomar, en la zona de Miramar.
Este concejal de Equo insiste en que “los desperfectos son innumerables, y gran parte del trabajo de la Brigada se centra en el mantenimientos de edificios públicos y, especialmente, de los colegios. Estos trabajos son imprescindibles para el buen funcionamiento de los servicios públicos, pero no tienen tanta visibilidad a los ojos de la ciudadanía”. No obstante, “trabajaremos sin descanso para aprovechar los recursos humanos, pedimos la comprensión de la ciudadanía puertorrealeña y agradecemos el esfuerzo de los trabajadores”.
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