El pleno del Ayuntamiento de Puerto Real ha dado el visto bueno a la memoria para la transferencia del mantenimiento de las zonas verdes del municipio a la empresa pública municipal Grupo Energético (GEN). Este paso dotará de más recursos a la sociedad “para un mejor servicio”. El documento pasará ahora una exposición pública de 30 días hábiles y luego volverá al pleno para su aprobación definitiva y entrada en vigor.
La concejala de Medio Ambiente y de GEN, María Merello, explica en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz que “se trata de un complicado proceso que viene de largo y que se ha prolongado durante cerca de dos años”. “No se trata de un encargo ni encomienda, sino de una transferencia de servicios, los encargos son trabajos limitados en el tiempo que no necesitan el procedimiento tan exhaustivo que demuestre cual es la opción más eficiente y sostenible. Ahora GEN, si se aprueba este expediente definitivamente, llevara sine die el mantenimiento de las zonas verdes bajo la supervisión y dirección continua del área de Medio Ambiente”, aclara la edil de Equo.
Ya en el pleno de octubre de 2017 se incoó el procedimiento para determinar si la gestión más favorable en términos económicos era la realizada por GEN.
La memoria llevada ahora a pleno es un voluminoso documento de más de 500 folios que responde “a un riguroso trabajo realizado por el personal del Ayuntamiento y la empresa pública”, lo cual agradece Merello. “En esta memoria se ha demostrado con diferencia que lo más óptimo es la gestión de GEN, ya que la comparación con la empresa privada daba unos costes de 1,25 millones de euros anuales, mientras que con GEN el coste sería de 850.000 euros”. Ello es posible porque la empresa cuenta ya con parte de la maquinaria y además hay que descontar tanto IVA como beneficio industrial. “Lo que demuestra las ventajas que tiene para la ciudadanía la apuesta por la gestión pública”, se insiste.
“Hay que tener en cuenta que la anterior encomienda a la empresa, realizada en el pasado mandato (con el PA en el Gobierno local), era insuficiente ya que no abarcaba todas las zonas verdes de la localidad. Como ejemplo llamativo de carencias y desorganización se pueden mencionar que a la llegada del actual Gobierno en 2015 el mantenimiento de una zona de nueva creación como el soterramiento, no estaba adjudicada a nadie”, apostilla la responsable de Medio Ambiente.
La nueva transferencia del servicio a GEN “no sólo contempla todas las zonas verdes sino que también engloba todas las actuaciones necesarias en estas. Lo que garantizará, por ejemplo, que se resuelvan de forma efectiva los problemas que surjan con el riego. Además determina los tratamientos que se dan en ellas, asegurando que no se usen productos que pongan en peligro la salud de las personas, como el venenoso glifosato, que se dejó de usar por el personal municipal a nuestra llegada, y como se hará en Alemania en poco tiempo. Por una vez, al menos en esta ciudad, hemos ido por delante de ellos en un tema medioambiental”, remarca Merello.
“EMPLEO DE CALIDAD Y SIN NECESIDAD DE USAR VENENOS”
“Esta transferencia –anota la concejala- va a suponer una inyección de recursos para GEN que gracias a ello podrá ampliar su plantilla como ya hemos anunciado a través de una bolsa de empleo en el que se ha aplicado un proceso justo, transparente y consensuado con la representación del personal de la empresa. Personal que por otra parte hay que mencionar que ha realizado una labor enorme en unas condiciones difíciles, que también es de agradecer”.
La edil verde, en definitiva, se muestra “satisfecha y muy contenta” por haber llevado a buen puerto un trabajo tan arduo: “que se vaya a aprobar esta transferencia, va a ser la culminación de un enorme trabajo que se ha hecho en este área desde nuestra llegada, con enormes dificultades y carencias”.
Puerto Real es el segundo municipio con más zonas verdes de Andalucía: “esto es un privilegio pero también supone una dificultad. El trabajo realizado en el presente mandato asegura un servicio de calidad en el mantenimiento de estas zonas. Primero fue una labor organizativa que potenció la débil coordinación existente entre Ayuntamiento y empresa pública. Luego asumimos las consecuencias de una decisión valiente, como fue dejar de usar el glifosato en nuestras calles y zonas verdes. Decidimos pagar el precio de las críticas porque antepusimos la salud de la ciudadanía a cuestiones de imagen. Simplemente porque no hay nada más importante. Ahora desde este pasado verano una brigada permanente realiza desbroces por toda la ciudad y una vez se apruebe este expediente el servicio se verá fuertemente reforzado”, relata Merello.
“Ha costado mucho trabajo pero hemos conseguido demostrar que se puede mantener las hierbas y zonas verdes de la ciudad sin necesidad de usar venenos como el glifosato y además lo estamos haciendo generando empleo de calidad”, sentencia.