El Hospital Universitario de Puerto Real ha puesto en marcha un nuevo régimen para regular las visitas, según ha trasladado el propio centro del Servicio Andaluz de Salud (SAS) a Facua, que se ha hecho eco de estas instrucciones.
De este modo, se limitan a dos el número de personas que, simultáneamente, podrán visitar al paciente en el Clínico, durante el horario que a tal efecto se ha establecido, de 16.30 a 19 horas.
“En la comunicación, el centro sanitario no detalla cómo se articula la puesta en marcha del nuevo sistema, ni informa del coste económico que el mismo va a suponer”, añaden desde Facua Cádiz.
Esta asociación de consumidores, en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, recuerda que ha prestado su colaboración tanto con el hospital puertorrealeño como con otros gaditanos en relación con este asunto, defendiendo “la necesidad de que las visitas a pacientes se realicen de forma ordenada y sin que, en ningún caso, incidan en la atención de los usuarios que se encuentra ingresados”. Sin embargo, Facua discrepa con que, para ello, “sea imprescindible adoptar medidas que, exclusivamente, se limiten a impedir el acceso a los centros o que restrinjan de forma significativa este derecho”.
“HABLAR DE ‘VISITAS HUMANIZADAS’ SUPONE TRASLADAR LA IDEA DE QUE QUIENES ACUDEN A VISITAR A FAMILIARES O CONOCIDOS SE COMPORTAN DE FORMA INCIVILIZADA”
Por ello, manifiesta su desacuerdo con el nuevo régimen de visitas “impuesto” por la dirección del Clínico, ya que entiende que esta medida “no va a suponer ninguna mejora en las posibles incidencias que hasta ahora pueden estar generando las visitas” y que, por el contrario, “va a resultar perjudicial para todos los usuarios, especialmente, para los residentes en otros municipios del área de cobertura” (Alcalá de los Gazules, Barbate, Benalup-Casas Viejas, Chiclana, Conil, Medina, Paterna, El Puerto, Rota, Vejer y Zahara de los Atunes) que, “atendiendo al limitado horario establecido para estas visitas, y a las enormes dificultades existentes para llegar al hospital utilizando el transporte público, van a sufrir serias complicaciones para poder visitar a los pacientes ingresados”.
A su vez, la asociación critica la denominación adoptada por el SAS para presentar la medida (“visitas humanizadas”), ya que “supone una falta de respeto a los usuarios, al trasladar la idea de que las personas que acuden al centro a visitar a sus familiares o conocidos se comportan de forma incivilizada”.
Facua recomienda además a los usuarios que padezcan cualquier tipo de incidencia en relación con el acceso al centro que presenten una reclamación contra el mismo: “aunque no se nos permita acceder, el personal debe, con independencia de la hora del día en que la solicitemos, facilitarnos el Libro de Sugerencias y Reclamaciones, y en caso de que se nieguen a ello, debemos requerir a la Policía Local que se persone con la finalidad de que acrediten la negativa a poder ejercer este derecho y, de esta manera, poder presentar una denuncia contra los responsables del hospital”.
“LOS USUARIOS PERCIBEN QUE, SI SON ATENDIDOS EN CENTROS PRIVADOS CONCERTADOS, DISFRUTAN DE MÁS COMODIDADES QUE EN LOS HOSPITALES PÚBLICOS”
Insisten desde Facua Cádiz en que esta decisión del Hospital de Puerto Real, similar a la adoptada anteriormente por el Hospital Puerta del Mar de la capital, “forma parte de una estrategia para desprestigiar al sistema sanitario y favorecer los intereses del sector privado”, dado que las limitaciones a las visitas “coincide con el aumento de conciertos con hospitales privados en los que no se aplican tales restricciones”, lo que “contribuye a deteriorar la imagen de los centros sanitarios públicos, dado que los usuarios perciben que, si son atendidos en centros privados concertados, disfrutan de una serie de comodidades de las que carecen cuando son atendidos por hospitales públicos”.
Además, se critica que esta medida haya sido adoptada “de forma unilateral por la dirección del centro”, sin, previamente, consultar la opinión de las asociaciones que representan los intereses de otros colectivos (pacientes, vecinos, etc.).
En este punto, esta organización de consumidores denuncia que, desde la llegada de la derecha al Gobierno de la Junta de Andalucía, el Hospital de Puerto Real ha dejado de convocar la Comisión de Participación Ciudadana, “en la que los representantes de las organizaciones sociales que formaban parte de la misma podían conocer la actividad desarrollada por el hospital y realizar propuesta de actuación”.
EL SAS DEFIENDE QUE “EL ACOMPAÑAMIENTO ES UN ELEMENTO TERAPÉUTICO PARA EL PACIENTE”
Los planes de visitas con los que cuentan los hospitales de Cádiz, al igual que del resto del sistema sanitario público de Andalucía, replican desde la Junta de Andalucía, “tienen como objetivo garantizar el acompañamiento de los pacientes y la comunicación con los familiares y personas allegadas, así como facilitar a los profesionales su labor asistencial, con el objetivo fundamental de garantizar una atención humanizada especialmente a los pacientes más vulnerables”.
Y en el caso del Hospital de Puerto Real, el SAS lamenta las críticas de Facua y defiende que el plan de visitas ha sido elaborado “en el seno de la Comisión de Humanización, contando para ello con la participación de profesionales de todas las categorías y unidades”. Y “ha sido aprobado por la comisión de dirección”.
Dicho plan, se añade, “contempla que el acompañamiento es un elemento terapéutico para el paciente y que éste, como norma general, podrá estar acompañado en todo momento por una persona (dos en el caso de pacientes pediátricos) y con posibilidad de intercambio”.
Además, se entregarán al paciente dos tarjetas para las visitas, que podrán ser intercambiables durante un horario de tarde establecido. No obstante, “se prevé que en situaciones de vulnerabilidad o circunstancias especiales, se pueda facilitar la entrada a más familiares”. Es el caso de pacientes en el proceso final de la vida. “Las medidas se establecerán de forma personalizada y consensuada con la familia”, se incide.
Las medidas adoptadas en relación a las visitas y acompañamiento de pacientes “persiguen mantener un equilibrio entre la calidad en la atención sanitaria, la confortabilidad del paciente, promover el descanso y tranquilidad del usuario así como el control de la situación epidemiológica”, se repite.