El Río San Pedro, en Puerto Real, “sigue esperando que se instale un mínimo alumbrado navideño”. Así lo aseguran desde AxSí, que dicen hacerse eco de la queja de muchos vecinos de esta populosa barriada.
En este sentido, el portavoz municipal andalucista, Alfredo Fernández, cuestiona “con dureza” al nuevo equipo de Gobierno bipartido ya que “hay dos concejales del Río gobernando, y tras esta situación se demuestra claramente que, al igual que la alcaldesa Aurora Salvador, han utilizado a los vecinos de la barriada que les han votado para ahora darles la espalda con un silencio que sonroja”; en concreto, se señala a Antonio Gil, de Adelante Andalucía y a José Antonio Montilla, de la Confluencia de Izquierdas.
Además, Fernández, que fue en el pasado mandato concejal de Fiestas mientras duró el pacto PSOE-AxSí, se refiere a “las numerosas lecciones que daban cuando además manejaban colectivos vecinales con un claro objetivo político y personal, con mayor sorpresa si cabe al recordar la reivindicación que utilizaban de abandono histórico de la barriada del Río San Pedro y ahora, tanto Gil como Montilla, gobiernan y comparten despachos con los herederos de Barroso, protagonistas de la ruina en la que dejaron el Ayuntamiento y de la que aún resulta difícil no sufrir las consecuencias”.
Los andalucistas denuncian en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz la falta de explicaciones públicas sobre el asunto “más allá de contarle a sus propios compañeros de candidatura que el problema viene de la garantía de las nuevas farolas instaladas con el proyecto Lumen, cuando hay zonas, como la avenida Argentina, en las que no se han sustituido los báculos y podrían haberse trabajado alternativas para no dejar a la barriada sin luces ni un simple decorado navideño que sí han colocado en tres rotondas y palmeras del centro urbano, a costa por supuesto de eliminarlo en el Río”.
En contraste, Alfredo Fernández se muestra orgulloso de su etapa al frente de Fiestas: “se cumplieron demandas vecinales importantes en lo que se refiere al alumbrado de Navidad, puesto que se añadieron más de una veintena de farolas con exornos, así como la decoración de espacios públicos con recursos del Ayuntamiento, además de la colaboración con todos los colectivos de la barriada que así lo requerían”; siendo además una petición importante “el encendido del alumbrado en el Río al mismo tiempo que en el centro de la localidad, algo sencillo pero que demostraba igualdad en el trato a la barriada con respecto a otras, incluso cambiando el día del Cartero y sumando actividades a esta celebración con talleres para los más pequeños en el exterior”.