Esta carga de trabajo de la Unidad de Negocio de Reparaciones de Navantia desviada desde el astillero de Cádiz contempla la renovación de alrededor del 80% de las zonas comunes del buque; y entre los hitos, el cambio de dos equipos enfriadores de HVAC de grandes dimensiones y el repintado total del casco del barco.
Una media diaria de 300 operarios de contratas estarán trabajando estas semanas en el astillero de Navantia Puerto Real, junto al personal que trae el propio armador, en la ambiciosa obra de reforma del crucero Mein Shift Herz, que abandonará el dique como nuevo y con un nombre distinto. Faena de la Unidad de Navantia Reparaciones que se ha derivado de la factoría de la capital a Matagorda.
Se prevé que la actuación estará completada el 25 de mayo, cuando el buque se despedirá de aguas gaditanas rebautizado como Marella Voyager, según detallan desde Navantia en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz.
Entre las principales actuaciones a las que será sometido este nuevo crucero que elige los astilleros de la Bahía para su renovación se encuentran el cambio de dos equipos enfriadores de HVAC de grandes dimensiones (20 toneladas cada uno), para lo que será necesario abrir una cesárea en el costado del barco de siete metros de largo por cinco de altura. Ello permitirá extraer los dos equipos que se van a sustituir, lo que conllevará, además, la renovación de tuberías y cableado de alta tensión conectadas a las antiguas unidades para adaptarlas a las nuevas.
La otra gran actuación en este buque será la renovación de la pintura del barco en su totalidad (obra viva, obra muerta del casco y superestructura). Además, se va a aplicar por primera vez en Navantia Reparaciones un producto nuevo, desarrollado por su distribuidor de pintura: el ‘seam flow’. Es un producto aplicado en los cordones de soldadura verticales de la obra viva, antes de colocar las dos últimas capas de silicona, que reducen la resistencia al avance y por lo tanto el consumo de combustible del barco.
Igualmente, para el trazado de la ‘filigrana’ del casco (la ola simulada a lo largo de todo el costado del barco que caracteriza a los cruceros de Marella) se va a aplicar también una nueva técnica: el escaneo 3D del casco. Posteriormente, en ese modelo 3D obtenido se dibuja la referida filigrana ya adaptada a las formas del casco para, finalmente, proyectarla con láser sobre el costado del barco. Los pintores realizarán esta maniobra desde plataformas elevadoras, de modo que puedan trazar la línea de la filigrana con mucha exactitud.
SE VA A RENOVAR EL 80% DE LAS ZONAS COMUNES
Asimismo, se llevarán a cabo otras obras habituales en este tipo de reparaciones pero de menos entidad, como el recorrido de válvulas de fondo, motores eléctricos, renovación de tuberías en varias ubicaciones, obras de acero en jacuzzis, renovación de acero en maniobras de proa y popa, extracción y recorrido de dos estaciones de pescantes o el desmontaje de una de las cinco hélices de maniobra y su revisión en el taller.
Por parte del armador se va a renovar prácticamente el 80% de las zonas comunes, esto es, restaurantes, teatro, salones, etc. Esta faena va a implicar un gran volumen de asistencia en logística de grúas y marinería, así como una gran cantidad de cubas de residuos generados en la demolición de todas estas zonas. Se estima que serán necesarias unas 700 cubas de 17 metros cúbicos para residuos varios y unas 200 para metal.
En definitiva, según los cálculos de Navantia, esta actuación sobre el Mein Shift Herz supondrá una generación, de media, de 300 empleados de industria naval auxiliar gaditana, a los que hay que unir los 900 que el armador trae a bordo más los 700 miembros de la nueva tripulación. En total, “una punta de alrededor de 1.900 trabajadores”.