El demandado y demorado colegio de Educación Infantil y Primaria en la zona de Casines, de Puerto Real, se estrenará este mes de septiembre. Tras un largo proceso de licitación gafado, la Junta de Andalucía iniciaba al fin las obras en julio de 2019, invirtiendo unos 1,4 millones de euros (principalmente fondos europeos) entre proyecto, obra y equipamiento. Este último día de agosto, representantes del Ayuntamiento y de la administración autonómica, y técnicos, han supervisado el flamante centro, pendiente de dotarse de equipamiento.
El nuevo edificio cuenta con más de 1.100 metros cuadrados construidos, sobre una parcela de 8.910 m2. Dispone de momento de seis unidades de Infantil con capacidad para 150 alumnos, habiéndose previsto la posibilidad de ampliarlo en una segunda fase con los espacios correspondientes a Primaria.
En el diseño de este nuevo colegio público, de una planta de altura, se ha tenido en cuenta tanto su distribución interior como su disposición en la parcela de forma que permita una futura ampliación. De este modo, “cuando las necesidades de escolarización así lo precisen”, se podrán construir los espacios correspondientes a Primaria, de manera que finalmente el centro se configure como un C2, con dos líneas por cada nivel educativo de Infantil y Primaria. En 2018, la Junta llegó a asegurar que esta “ampliación” valorada en más de 2 millones de euros ya estaba consignada en sus presupuestos de ese ejercicio.
Esta obra, contemplada desde el anterior Gobierno de la Junta del PSOE, está incluida dentro del Plan de Infraestructuras Educativas 2017-2018 de la consejería, que se ejecuta a través de la Agencia Pública Andaluza de Educación.
Aunque el nuevo colegio (que asume personal y niños de la clausurada escuela infantil El Marquesado) cuenta con dos líneas por el momento solo funcionará una de Infantil de 3 años, otra de 4 años y una de 5 años. La segunda línea se prevé incorporar para el curso 2021/2022.
LA ALCALDESA TRASLADA SUS DUDAS SOBRE EL INICIO DEL CURSO A ANDREU
A esta visita técnica se han unido la alcaldesa, Elena Amaya, su concejala de Educación, Victoria Pérez, y hasta el delegado territorial de Educación de la Junta, Miguel Andreu.
La presencia no anunciada de Andreu en la localidad ha permitido que la primera edil socialista haya aprovechado para preguntar al representante de la consejería de Educación sobre el inminente e incierto inicio del curso, marcado por la pandemia del coronavirus.
Según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz, Elena Amaya y Victoria Pérez se han centrado fundamentalmente en la necesidad de disminuir la ratio de alumnos por aula. Para las representantes del bipartito de PSOE y AxSí, “esto resulta indispensable para cumplir las medidas de prevención, higiene y promoción de la salud sin las que no podrá garantizarse la vuelta al colegio de manera segura”.
Del mismo modo, han interpelado a este político colocado por Ciudadanos sobre el refuerzo de las plantillas de limpieza y desinfección permanente que deben tener los centros puertorrealeños, “una competencia que recae íntegramente en la administración autonómica y que parece no tener una solución con vistas al inicio del curso, previsto para dentro de 10 días”.