Como primer paso de ese ambicioso proyecto promovido por el Cádiz CF en los suelos de la antigua factoría de Delphi, el de levantar una “ciudad tecnológica del deporte y la salud”, se ha presentado ante el Ayuntamiento de Puerto Real la solicitud de licencia para ejecutar el desmantelamiento de las instalaciones de esta planta cerrada en 2007 que aún quedan en pie.
Un trámite que se registra obviando la amenaza de expropiación por parte de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC) de esta parcela adquirida por el club de fútbol (por medio de una sociedad llamada inicialmente Indanspo SL) semanas antes de que el Ministerio de Transportes aprobara la adscripción de los terrenos del polígono industrial El Trocadero al dominio público portuario.
Al respecto, la alcaldesa de Puerto Real, Elena Amaya, que defiende el proyecto del Cádiz CF y rechaza que se amplíe el almacenaje de graneles del Bajo de La Cabezuela a estos suelos de Delphi (como parece pretender la Autoridad Portuaria al reclamar esta parcela), ya ha pedido reunirse con el ministerio competente para abordar el contenido del requerimiento interpuesto por su Ayuntamiento, previo al proceso contencioso-administrativo, en el que se solicita al Gobierno central (liderado por su mismo partido) la revocación de dicha orden ministerial.
Mientras, los actuales propietarios de los suelos (comprados en un proceso público de subasta judicial por unos 2,7 millones de euros, una oferta muy similar a la presentada tiempo atrás por parte de la APBC y rechazada por el administrador concursal) han presentado un recurso de reposición ante el antiguo Ministerio de Fomento contra esa orden ministerial; aunque ante la falta de respuesta, días atrás avanzaban que pedirán amparo a la Audiencia Nacional. Sus abogados sostienen que la orden “no atiende a fines de utilidad pública”, frente a la idea del equipo amarillo que es “un proyecto estratégico para la Bahía”.
TRABAJOS DE DESMANTELAMIENTO
Y entre tanto, según se detalla en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, Sport City Cádiz SL (anteriormente con la denominación de Indanspo), espera ya la licencia municipal de obras para el desmantelamiento de las instalaciones de la que fue multinacional de la automoción.
Una vez concedida dicha licencia, se calcula que los trabajos tendrán una duración de cinco meses, en los que la superficie de instalaciones a desmantelar es de 98.680 metros cuadrados, con un volumen de 519.075 metros cúbicos.
Los edificios e instalaciones de la antigua Delphi, que llevan unos 15 años abandonados, se encuentran casi en su totalidad vacíos, si bien en el interior de algunas naves y oficinas se acumulan residuos como restos de mobiliario, basura y maderas, que serán retirados antes de estos trabajos de desmantelamiento.
El residuo más peligroso existente son placas de fibrocemento con amianto. Según se recoge en el proyecto presentado ante el Consistorio (que “cuenta con todos los preceptivos planes de seguridad y con el visado del Colegio Oficial de Arquitectos de Cádiz”), los residuos de diferentes tipos que generará el desmantelamiento serán clasificados y posteriormente llevados a gestores autorizados.
“La regeneración medioambiental de estos terrenos es uno de los pilares fundamentales del proyecto de la ciudad deportiva del Cádiz CF”, se añade, recordando que ya desde el pasado mes de abril, al poco de firmarse la compra de los terrenos, se llevaron a cabo trabajos de desbroce, la limpieza de caminos, vías, acerados y las zonas ajardinadas y de aparcamientos de la parcela.
Sport City Cádiz SL tiene como propietario al fondo de inversión Gades Sports Technology Industry FCRE, creado por la gestora Mar Océana para dirigir los “proyectos de crecimiento en infraestructuras” del club de fútbol de la capital.
El proyecto presentado a finales de marzo y presupuestado en un “montante global” de más de 100 millones de euros, enmarcado en lo que se ha llamado “industria blanca”, contempla una “ciudad digital energéticamente sostenible”, en la que se dibuja un hub tecnológico incorporando un vivero de empresas que retenga y atraiga talento, un centro de eventos “donde desarrollar espacios multitudinarios, un eje de generación de ingresos” y una nueva ciudad deportiva con la particularidad de que habrá también campos para la cantera en las cubiertas de las instalaciones.