La Policía Nacional ha detenido en Puerto Real a una mujer como presunta autora de un delito de simulación de delito. Denunció que había sufrido un robo por el método del tirón por parte de dos personas que circulaban en un ciclomotor, los cuales se apoderaron de un monedero que contenía 325 euros.
Sin embargo, tras la pertinente investigación los agentes descubrieron la falsedad de lo manifestado, por lo que la víctima ha pasado a ser autora de una infracción penal contra la administración de la justicia.
Los investigadores del grupo de Delincuencia Urbana desarrollaron las pesquisas sobre los hechos denunciados por esta mujer, y tras recabar datos, se citó nuevamente a la denunciante para tomarle declaración. Y se determinó que los hechos denunciados no eran ciertos.
La Policía comprobó que nadie le robó el bolso, siendo denunciados hechos inexistentes con el único objetivo de lograr que sus respectivos seguros se hicieran cargo de las indemnizaciones contratadas en el supuesto de determinados hechos delictivos, incurriendo además en un delito de estafa.
El procedimiento a seguir una vez que los agentes reciben una denuncia es la comprobación de los hechos, así como la posterior investigación. En caso de ser veraz se encaminan las gestiones hacia la detención de los presuntos autores. Si los hechos denunciados son falsos se imputa, y en ocasiones se detiene, a los denunciantes, poniéndolos a disposición de la justicia, remarcan desde la Policía Nacional en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz.
Y es que presentar una denuncia falsa “tiene consecuencias tanto para el individuo como para el sistema policial”. De hecho, se considera un delito penal contra la administración de la justicia y da lugar a “multas sustanciales” (de seis a doce meses de pena). Además, las simulaciones de delito suelen acompañar otras infracciones, como las estafas.
“Para la sociedad, una denuncia falsa provoca que se inviertan recursos humanos y materiales, restando esa dedicación a la investigación de los ilícitos efectivamente cometidos sobre las víctimas reales, lo que conlleva la pérdida de recursos policiales y la contaminación de sus bases de datos”. Este tipo de delito, se añade, “es bastante común y generalmente perpetrado por ciudadanos que no tienen antecedentes penales”.
Principalmente se denuncian falsos robos con fuerza o con violencia e intimidación con el objetivo de cobrar indemnizaciones de seguros o justificar ante terceros la “desaparición” de importantes cantidades de dinero.
VERIPOL: PARA DETECTAR DENUNCIAS FALSAS
La Policía Nacional puso en marcha en 2018 la aplicación informática VeriPol que detecta las denuncias falsas interpuestas en casos de robos con violencia e intimidación o tirones.
La herramienta, cuyo acceso se habilitó en todas las comisarías de España, identifica el delito basándose en el texto de la denuncia, por lo que no necesita ninguna información por parte del usuario, y es completamente automática. Se trata de la primera herramienta de este tipo en el mundo y diversos experimentos empíricos demuestran que tiene una precisión superior al 90%, mientras que policías expertos alcanzan una precisión del 75%.