El delegado territorial de Educación de la Junta se ha reunido con el consejo escolar del CEIP Reggio de Puerto Real, cuya comunidad está movilizada exigiendo la retirada de todos los techos de uralita de las instalaciones. De hecho, alumnos, padres y docentes han protagonizado hace unos días una protesta ante la misma delegación en la capital. Belizón se compromete a la retirada de los techos indicados por los informes y análisis, a instar al Ayuntamiento a cumplir sus competencias “en el mantenimiento” y la realización de nuevas mediciones. El cambio del resto de cubiertas “se llevará a cabo en función de esas mediciones”.
El delegado territorial de Educación de la Junta de Andalucía en Cádiz, Juan Luis Belizón, se reunía a finales de la pasada semana con el consejo escolar del CEIP Reggio de Puerto Real, cuya comunidad está desde hace días movilizada exigiendo la retirada de todos los techos de uralita de las instalaciones. De hecho, el jueves alumnos, padres y docentes protagonizaban una protesta ante la misma delegación, en la plaza de Mina de la capital.
Belizón, a petición propia, les ha trasladado que, como ya anunció el portavoz del Gobierno andaluz, la Junta está trabajando en una propuesta de programación para la retirada progresiva del amianto de los centros educativos de la región. Esa eliminación, se afirma, “será escalonada, ya que debe ser compatible con el calendario escolar”.
Esta medida, aclaran desde Educación, “no se lleva a cabo porque el amianto sea nocivo para la salud por su simple existencia, pues hay una basta literatura científica al respecto que así lo demuestra, sino para eliminar cualquier duda o inquietud entre los padres y las madres de los niños que estén en colegios donde se encuentre este material”.
De esta manera, “ante el mínimo dato de incertidumbre por parte de las familias, este Gobierno toma la iniciativa y quiere dar una respuesta inmediata, fundamentalmente porque es un aspecto fundamental y prioritario”, afirmaba recientemente el portavoz Miguel Ángel Vázquez; aunque curiosamente hace unas semanas PSOE y Ciudadanos tumbaban una propuesta de Podemos en el Parlamento andaluz al respecto. Desde CGT se critica en este punto la “tardanza” en la decisión de esta medida así como las fechas elegidas para su anuncio, en medio de la campaña electoral.
Por otro lado, técnicos de la Agencia Pública Andaluza de Educación están visitando los centros educativos en los que pueda existir preocupación por la presencia de este material cancerígeno.
En cuanto al colegio Reggio, según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz, Juan Luis Belizón ha insistido en primer lugar, “y como aspecto clave que vertebra la actuación futura”, que “todos los informes sectoriales recibidos (Salud Pública y Medio Ambiente) y los generados por la Unidad de Prevención de Riesgos Laborales de esta delegación, confirman que no existe un riesgo evidente e inmediato para las personas, y por ende, para los niños y niñas”.
No obstante, la delegación territorial va a poner en marcha una serie de acciones a corto plazo: se van a retirar los techos indicados por los informes técnicos y por los análisis efectuados por una empresa externa. Esto es, el techo del almacén y del porche. Además, se realizarán nuevas mediciones ambientales en diversos puntos del colegio y conforme a la normativa vigente con el fin de seguir testando la situación de las cubiertas “con criterios técnicos y objetivos”.
En tercer lugar, se le enviará un requerimiento al Ayuntamiento “para que proceda al mantenimiento y a la conservación de los techos de manera adecuada”. Se apostilla que el CEIP Reggio es de titularidad municipal “y, por tanto, las competencias en seguridad, conservación y mantenimiento del citado centro son exclusivas del Ayuntamiento de Puerto Real”.
Por todo lo expuesto, la Junta manifiesta que incluirá este colegio público de Puerto Real en la programación de retirada de amianto de los centros educativos de Andalucía, enmarcado en una reforma integral.
PROTESTA ANTE LA DELEGACIÓN TERRITORIAL
Un día antes, la Ampa del colegio se concentraba ante la delegación territorial de Educación de la Junta en la capital para reivindicar la sustitución “inmediata” de todas las techumbres de amianto, por tener el complejo más de 50 años, y siendo la vida útil de dicho material de entre 30 y 40 años.
Estos pares ya se han manifestado en la recta final del curso a las puertas del centro después de que las muestras realizadas en el terreno cercano a un cuarto de aperos diera positivo en presencia de partículas contaminantes relacionadas con la composición del tejado de uralita.
La comunidad educativa –respaldada por Ustea- también tiene entre sus reclamaciones la solicitud de análisis de las partes más significativas del centro: arena de los patios, huerto, clases, cortinas, cuartos de baño…; un chequeo médico voluntario al personal del centro; un certificado de salubridad que especifique que las instalaciones están libres de contaminación; y la intervención inmediata de los organismos pertinentes para garantizar las condiciones laborales de todo el personal del mismo.
(puedes comentar esta información más abajo)