El delegado territorial de Educación de la Junta se ha reunido con el alcalde de Puerto Real para trasladarle las actuaciones que se están llevando a cabo en el CEIP Reggio y que han comenzado con la retirada de los techos del porche y del cobertizo, zonas donde se había detectado contaminación por amianto. Una actuación que CGT ha denunciado por “chapucera” y que el sindicato y la comunidad educativa consideran insuficiente. En este sentido, Belizón asegura que se trabaja en la reforma integral del colegio “para el próximo año”, incluyendo la eliminación de toda la uralita.
El delegado territorial de Educación de la Junta de Andalucía en Cádiz, Juan Luis Belizón, se ha reunido con el alcalde de Puerto Real, Antonio Romero, para trasladarle las actuaciones que se están llevando a cabo en el CEIP Reggio y que han comenzado con la retirada de las placas de fibrocemento del porche y del cobertizo, zonas donde se había detectado contaminación por amianto.
Aunque la comunidad educativa insiste en exigir el cambio urgente de todos los techos de uralita del colegio, y mantiene sus movilizaciones para septiembre. Además, CGT ha denunciado ante la Inspección de Trabajo esta primera “chapucera” intervención: “no sólo no se ha retirado toda la cubierta que presenta un malísimo estado de conservación y graves riesgos para la salud al haberse además superado la vida útil de este material cancerígeno, si no que la pequeña parte que se ha retirado se ha hecho sin mantener las medidas de seguridad necesarias aumentando aún más los riesgos para la salud”.
En la reunión entre Belizón y Romero, en un ambiente de “máxima cordialidad y lealtad entre instituciones”, según subrayan desde la Junta en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, el representante del Gobierno regional ha anticipado al primer edil de Sí se puede Puerto Real el “compromiso” de la consejería de Educación, consistente en la reforma integral de estas instalaciones “para el próximo año”. Esta actuación estará subordinada a las normas técnicas de los edificios que ocupan los centros educativos “y no solo incluirá la retirada de las placas de uralita”. En relación a esta reforma integral, el delegado territorial ha repetido que ya se está trabajando en la licitación de la redacción del proyecto de construcción.
Además de este anuncio, y siguiendo con la hoja de ruta acordada con el Consejo Escolar a finales del pasado curso, se ha transmitido a Antonio Romero que, una vez concluidos los trabajos actuales –la retirada de una pequeña parte de los techos de uralita-, se va proceder a realizar mediciones por una empresa autorizada en el resto de las instalaciones, por si se detectara más contaminación por amianto.
Los datos de estas analíticas se expondrán en el seno del Consejo Escolar, órgano representando por los distintos sectores de la comunidad educativa. Además, se explicará el resto de compromisos asumidos por la consejería de Educación.
Todas estas actuaciones, se apostilla, “están encaminadas a mejorar las instalaciones educativas del centro educativo y para que redunden en el bienestar de todos los niños y las niñas y su profesorado, finalidad prioritaria de esta administración”.
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