La Mancomunidad de Municipios de la Bahía de Cádiz ha vuelto a adjudicar el servicio de protección animal (o lo que es lo mismo, la perrera mancomunada) a Athisa, la misma empresa que ya asumía este contrato que incluye la recogida, transporte, albergue y adopción de animales, y pese a las críticas y denuncias recibidas desde hace meses; de hecho, CCOO celebraba protestas la pasada primavera para exponer “las deplorables condiciones laborales e higiénicas en las que se encuentran tanto los animales como los trabajadores”, y meses después el Consistorio isleño incluso amenazaba con ‘salirse’ ante la “aberrante” situación.
No obstante, ahora se destaca que este nuevo contrato (adjudicado por más de 2,3 millones de euros) incluye un conjunto de mejoras respecto del anterior pliego, que fueron consensuadas entre los ayuntamientos que comparten el servicio (Cádiz, San Fernando, Chiclana y Puerto Real), con la participación del voluntariado, protectoras y asociaciones, Pacma y delegados sindicales de los trabajadores del centro, ubicado de momento todavía en Chiclana.
Entre estas mejoras se encuentran, según repasan desde el Consistorio puertorrealeño en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, la incorporación de profesionales especializados, en concreto un nuevo trabajador en la plantilla, un etólogo/adiestrador acreditado para tratar problemas de comportamiento animal; y también que se atienda los sábados tanto al público general como a las protectoras, “facilitando los procesos de adopción y entrega de animales”.
Aparece igualmente como novedad en el pliego: las adopciones gratuitas (que los animales albergados por más de un año tengan adopciones gratuitas), la esterilización (todos los animales adoptados serán entregados esterilizados), programas de voluntariado y sensibilización contra el maltrato animal y adopción responsable, y la apuesta por redes sociales y una aplicación web para informar a la ciudadanía, protectoras y asociaciones acerca de los animales albergados.
LA EMPRESA ADJUDICATARIA DEBE MEJORAR LAS OBSOLETAS INSTALACIONES Y DESARROLLAR CAMPAÑAS DE CONCIENCIACIÓN
Por otro lado, se obliga a la empresa adjudicataria a adquirir e instalar construcciones/estructuras modulares prefabricadas portátiles para mejorar las obsoletas instalaciones, contemplando la clínica veterinaria, quirófano, guardería y una zona para la atención a la ciudadanía, “que mejorará la atención y prestación del servicio, y la calidad de vida de los 174 perros y 50 gatos abandonados que hoy se encuentran albergados en el centro esperando una adopción”.
Precisamente esta alta tasa de ocupación persistente ha requerido una ampliación y la instalación de 70 nuevos espacios que evite el hacinamiento, y para que los perros abandonados albergados cuenten con más espacio para su bienestar.
Finalmente, Athisa se ha comprometido a la realización de campañas de concienciación para combatir el abandono y el maltrato animal, e iniciativas para promover las adopciones; de hecho, se quiere lanzar la primera para diciembre ante el elevado número de abandonos de los últimos años, y buscando recordar a los ciudadanos que “no compre un animal”, lo adopte.
Con ocasión de la reciente adjudicación del servicio, representantes de los cuatro ayuntamientos que financian esta perrera mancomunada han supervisado las vigentes instalaciones. Entre ellos, la concejala de Salud y Bienestar Animal del Consistorio puertorrealeño, Virginia Mena, quien ha confirmado el ofrecimiento de la parcela de Malasnoches para la reubicación de este Centro de Protección Animal de la Mancomunidad; es más, asegura que ya se ha iniciado el procedimiento.