La Mancomunidad de la Bahía de Cádiz, presidida por David de la Encina, ha realizado un comunicado poniendo en evidencia las “prioridades” de nuestro Ayuntamiento de El Puerto para el destino de las subvenciones que la misma Mancomunidad se encarga de aprobar. La subvención asciende a 260.000 euros y tiene la finalidad de combatir los efectos económicos negativos de la crisis del Covid-19, incentivando actuaciones de orden sanitario, social o de seguridad; y para afrontar aspectos como el empleo, los sectores productivos o la brecha socio educativa.
Otros ayuntamientos han presentado actuaciones de carácter social y económico como refuerzo de los servicios sociales o ayudas directas para pymes. En El Puerto se ha decidido optar por invertir en comunicación, publicidad y eventos ya anunciados.
Como miembro de Unión Portuense, pero sobre todo como consultor financiero de ayudas públicas, he de hacer hincapié en que es la Mancomunidad el organismo que pone el dinero y quien se ha encargado de todo el proceso de tramitación y aprobación de cada uno de los proyectos. En lo que respecta a los costes subvencionados por esta ayuda, estos se limitan a gastos corrientes del ayuntamiento y son elegibles cualquiera de las actividades que estén recogidas en el objeto social de la Mancomunidad, por tanto, es ésta quien decide en qué se puede invertir y en qué no.
Teniendo en cuenta lo anterior, vemos que la arbitrariedad en la finalidad de los fondos no es responsabilidad absoluta de quien solicita y recibe la ayuda, sino que dicha responsabilidad es compartida con quien las gestiona y elabora las bases. Por ello, no es el alcalde quien libremente decide dónde invertir los fondos, como la Mancomunidad ha intentado hacer creer en su comunicado, ya que es la Mancomunidad quien aprueba los proyectos y quien tiene la última palabra en el pago de las subvenciones.
En resumen, no parece coherente que le pasen la pelota al Ayuntamiento cuando es la Mancomunidad quien se encarga de dar el visto bueno y de pagar, y menos cuando De la Encina ya se hecho la foto con Beardo en la presentación del Cabaret Fest, que es uno de los proyectos subvencionados.
En la otra cara de la misma moneda, tenemos al gobierno de Beardo, que teniendo aún las ayudas a los autónomos y pymes pendientes de pago y con la mayoría de las asociaciones manifestándose por el cobro de subvenciones pendientes desde 2017, decide presentar una serie de proyectos muy alejados de lo que la sociedad portuense le reclama.
Se puede poner en duda si estas actuaciones son realmente prioridades. Podemos suponer que el gobierno de Beardo ha aprovechado la oportunidad de seguir costeando el marketing y autobombo que tantos votos cree que le da. Podemos también pensar que nuestro Ayuntamiento ha podido caer en la trampa y no esperaba que la Mancomunidad liderada por el PSOE le dejara al descubierto, o podemos pensar en la torpeza de esta mancomunidad a la hora de no concretar correctamente los tipos de proyectos elegibles.
Sea como fuere, lo que no podemos negar es que tanto unos como otros entienden la política como negocio y propaganda, y harán con los fondos públicos lo que les mejor le parezca, o mejor dicho, lo que nosotros le dejemos hacer. DIARIO Bahía de Cádiz