Podemos Cádiz es el mal

Dentro de poco tendrán lugar las elecciones municipales, y ahora es cuando más fría debemos tener la cabeza y no dejarnos engatusar por quimeras de justicia, por paraísos de amores a su tierra. Es nuestro deber como gaditanos reflexionar y comprender que el poder debe estar en manos de profesionales, de la gente de bien que va a misa y que son claros ejemplos de la clase política de toda la vida, gente trajeada al más puro estilo Rato, Barcenas, Chaves y Griñan. Dejémonos de greñas y camisetas baratas comprados en el piojito o en Manolito que de toda la vida para hacerse respetar no hay nada como ir vestido del Corte Inglés.

Por muy bien que nos caiga José María González ‘Kichi’, vamos por favor, si viene hasta con el mote puesto, en su tremenda represión, no nos dejará ni imponerle un gracioso soniquete como la Teñía o el Carajote de Carlos Díaz. No podemos dejar que nos ciegue lo que sin duda no llegará a buen puerto.

¿Qué puede aportarnos? Poco o nada. Solo es una persona que ha nacido en Cádiz, de los que se ha bautizado en la Caleta, por favor. ¡Nacido aquí! Qué disparate ¿Cuándo han nacido aquí gente con valía? Falla, Pemán, Juan José de Lerena y Barry, Beato Diego José de Cádiz, Moderato de Gades, Francisca Larrea, Adolfo de Castro y Rossi, Eduardo de Ory, Pedro Payán, Celestino Mutis, Rafael Manzano Bazán… son casos muy aislados, un buen alcalde de Cádiz ha de ser de Sevilla o de Santander o de cualquier otra ciudad que empiece por S, lo de fuera siempre es mejor.

Para más inri, el chaval, que no se satisface con el desprestigio de ser autóctono, le da por estudiar. ¡Ha estudiado! Eso ya es de poquísima vergüenza, y no conforme, sabe lo que es trabajar. Como va a gobernar alguien con cultura y que se ha ganado el pan.

Donde se ponga un buen político con su bachiller como José Blanco, o que siempre han pertenecido a la casta como Bibiana Aido que se quite todo. España siempre ha sido tierra de Hidalgos, lo de doblar el riñón para los pobres, y como dijo el añorado, para la derecha, caudillo, “usted haga como yo, no se meta en política”.

No contento, cada vez me cae peor, le da por salir en Carnaval, por favor: CARNAVAL, eso ya es para gente bajuna total, como este que les escribe. Una fiesta de crítica, se imaginan si lo hace mal su autor le da por reprocharlo, un alcalde en las tablas del Falla, ¡qué pavor por Momo! Con lo bien que queda un líder en su yate dándoselas de socialista mientras fuma habanos y las bandejas de langosta se recalientan al sol. Este será capaz de aparecer con dos coloretes, y le da por salir en la única comparsa de renombre que no hay quien la mueva de Cádiz durante la fiesta. A pie de calle escuchando al pueblo, las sugerencias de compañeros, los cuplecitos de guasa. Habrase visto. ¿Quién conoce a un carnavalero con estudios y cultura? Por favor Antonio Rivas, Tino Tovar, Luis Rivero, Juan Carlos Aragón, José Marchena… gente que sabe leer a duras penas.

No quiero pensar en cómo impondrá sus más oscuros deseos. Lo mismo le da por prohibir que los gaditanos podamos disfrutar de una barbacoa en la playa a la luz de las estrellas… ¡A no que eso ya no se puede!

O que desafíe a batir, de forma ridícula, el record Güines en la noche del Carranza, y al ver que ha metido la pata, los gaditanos perdamos otra de nuestras fiestas… ¡a que eso ya ha pasado!

También podría darle por vender colegios históricos como Valcárcel a cadenas hoteleras que no harán obras y un símbolo del barrio se caiga a pedazos… pues tampoco ¡que se te han adelantado!

No es problema, perfidia da mucho juego: gastarse un fortunón en un ridículo mirador en el Parque Genovés, en una estatua a un gorrión, en un candado, en dos mamotretos con mensajes cerca del puerto. Puede darle por cargarse la madrugá de la semana santa para que podamos ir a Sevilla. Tirar un instituto de FP en el barrio de la Viña para poner tres banquitos, dejar que se muera un drago milenario…

Si es que lo veo, claramente, ¡LO VEO TAN CLARO COMO SI YA HUBIESE OCURRIDO!

Así, que dejándome de tanta ironía, solo decir una cosa, sobre alguien a quien solo conozco por el reflejo de querer a nuestra tierra. Seguro que si lo hace mal, le va a doler que le pongan la cara colorada.

Mucho ánimo y espero ver cambios, que ya es hora de que esta tierra aprenda que los cargos electos no son vitalicios. DIARIO Bahía de Cádiz