Parece que fue ayer de aquel “Luis se fuerte” y sin embargo la pertinaz, no sé si desfachatez o corrupción, nos trae un nuevo término “real” a incorporar a nuestro acervo cultural: el compi yogui; y no me sean mal pensados que aunque muchas veces coinciden con los compi yonqui no va por ahí el término.
Atrás queda aquella frase, también real, de “lo siento mucho, no volverá a ocurrir”; frases, wassaps, mensajes que sacados de contexto son solo son eso, frases; pero ¿qué hay detrás de estas? Ahí es donde está el cogollo, ¿o es meollo?, bueno da lo mismo.
El problema no es que sean unos mensajes de ánimo, ¿de arrepentimiento?, lo importante es que, en el caso de los compi yogui, quien lo dice es un miembro de la Royal Family, que se dirige a un amigo de la “familia” imputado, entre otras cosas,-por ahora- en la causa por las tarjetas de Caja Madrid, yerno de ministro franquista, empresario mencionado como mecenas del Partido Popular, y su realeza lo deja claro, “ánimo que lo demás es una merdé”.
Si Felipe González, Barrionievo, Solchaga… pusieron de moda la cal viva, los pelotazos, la OTAN, la enseñanza religiosa subvencionada… sus reales, queriendo o sin querer, han puesto de moda, las cuchipandas, los compi yogui, todolodemasunamerdé, todo un logro de acierto lingüístico.
Cuchipandas son los que llamaban en Cádiz al Consejero Antonio Fernández, mucho antes de ser detenido e imputado por los EREs, “el gitano”, por sus artes para el trapicheo y no por su color aceitunado -deplorable mote racista, si, pero como le aplaudían, casi por bulerias-; pero oiga ahora nadie le conoce, ¡vaya cuchipanda!
La otra cuchipanda anda por ahí buscando al compi yogui fugado de la Zona Franca por un lado, y por otro viendo como siguen sin aparecer los treinta mil euros que Barcenas dio al alguien de por aquí… y no miro a nadie, que luego todo se sabe. Por cierto, ¿qué será del otro compi yogui, aquel que era el todo poderoso en el reinado de Teofila, Jorge Moreno? De él se decía que era como el hermano tornero del Ayuntamiento de Cádiz, era capaz de abrir y cerrar todos los despachos.
Lo que está claro es que no les molestan los aplausos, que se conozcan los wassaps, ni que salgan a la luz las amistades y entramados, lo que les molesta de verdad es que como osan, esos plebeyos todos, a cuestionar algo tan de derecho divino como es enterrar con cal viva, que se pague con dinero de todos fiestas, comidas, viagras…, que con el dinero también público, se creen redes clientelares, votos cautivos… incluso que no se vea moral el que empresas de forma ilegal paguen campañas…
Esas son las cosas por lo que está cuchipanda de compis yogui, está escandalizada, que no entendamos, que no compartamos, que nos indigne y nos dé asco, si es su propia esencia, su forma de ser de toda la vida, su vida. DIARIO Bahía de Cádiz