Mucha tontería mediática, mucho experimento social y poco contenido político. Podría decir que me he decidido a escribir al ver la noticia, al estallar, como una especie de redención política que aligerase mi impresión de asco hacia la política isleña. Pero sería mentir. Lo cierto es que llevo bastante tiempo observando los quehaceres electorales de los partidos en jaque, el PSOE y el PA, y la sensación de descontrol y poca seriedad generalizada en los plenos municipales responden a la perfección con la bufonada que van a ser las elecciones municipales.
En primer lugar, me gustaría hablar muy brevemente del Partido Andalucista. No me voy a detener en la hipocresía, confirmada por momentos, de enarbolar el andalucismo en el Ayuntamiento de una tierra plagada de santos y señas franquistas. Nada más cercano a la ignorancia que Fran Romero, vestido de chaqueta y atril impecables, frente al gran filósofo y político Blas Infante, un busto cagado por palomas y castigado por el vandalismo de un personaje asesinado a traición por el Muera la Inteligencia de los que adornan nuestra plaza mayor.
Pero obviando tal detalle, creo que la labor del PA se retrata muy bien en La Isla: en concreto, en el álbum de fotos de Fran Romero de Facebook, una auténtica antología por cortesía de IslaTV de los momentos más melodramáticos de un PA que necesita recurrir a la financiación oportunista de eventos culturales, al discurso fácil en las cofradías isleñas, a las fotos con bebés o el reciente éxito de su colección de reuniones, que bien podría titularse “Diarios de una sonrisa perpetua”. Ni que decir tiene que este Ayuntamiento no tiene autoridad para hablar de educación pública —¡miren las salas de estudio y las aguas fecales de los institutos!—, ni patrimonio isleño —y con ello incluyo la Semana Santa, a la cual unos presupuestos engrosados no le hacen suficiente honor—, ni mucho menos de trabajo o medioambiente —un Parque Natural que el PA pretendía asfaltar, por cierto—. Ni siquiera pueden colgarse la medalla del Hospital de San Carlos, ya que al Ayuntamiento apenas se le ha visto hablar si no era de la Junta de Andalucía tras los micrófonos de la prensa. Como resultado de ese conglomerado catastrofista, tenemos una pre-campaña electoral —de total legalidad pero de dudosa ética política— titulada Fran2015 —¡¡Ni siquiera PA2015!!— que inunda nuestras calles de una buena pose y mala praxis. Al PA sólo le queda la simpatía de Fran Romero para sobrevivir, digámoslo crudamente, seduciendo las conciencias inocentes de la ciudadanía isleña con promesas electorales que nunca han cumplido. Es un hecho.
Pero es que el PSOE tampoco tiene mejores perspectivas. Independientemente de los resultados electorales, convendrán conmigo en que el mal llamado Partido (Socialista[1] Obrero[2]) Español tiene, cada vez, menos profundidad política. La última jugada, que entre sus filas habrán considerado de animal político, ha sido su Wiki-Ciudad, una especie de intento optimista de incorporación etimológica de las nuevas tecnologías a un partido que, por norma general, está cada vez más desbordado en política municipal. Incluso el Partido Popular, con su rancio conservadurismo y su chulería discursiva, intimida en los plenos municipales a una portavocía del PSOE que va a remolque de lo que escucha de la calle, no de lo que ve. Renovarse o morir, habrán pensado, mientras mandaban cual delegada a Patricia Cavada a todo tipo de evento con su nueva propuesta política (?): el wiki-café, un nuevo tipo de campechana reunión informal en los domicilios de los y las conciudadanas. ¿Para qué vamos a pensar en la participación pública y abierta? ¿Qué es eso de convocar asambleas donde pueda venir todo el mundo? ¡No digamos ya eso de invitar a asociaciones y plataformas enteras! ¿Y qué utilidad tiene, por cierto, eso de la pedagogía política? ¡Inutilidades varias! ¡Llama a la política a domicilio del PSOE, con proyectos electorales a plazos y con la confianza de una gran amistad!
El PSOE, desde luego, tiene mejores contradicciones de las que ocuparse que las caricaturas de su candidata alcadable, por ejemplo. El Partido Socialista, como el Partido Andalucista, son parte de un sistema que se repite a sí mismo, con graves deficiencias que pretenden resolver desde el parapeto de la oficialidad y la mirada ensayada. Sarcasmos aparte, no deja de ser cierto que en La Isla, vivimos tiempos de decadencia política desde hace ya bastantes años, donde los programas electorales de los tres partidos mayoritarios, por norma general, no aportan nada nuevo, sólo parches de un proyecto de ciudad que hasta el presente, ninguno de los tres se ha atrevido a mostrar al completo. ¿Por qué? Porque les falta el buen quehacer político, es decir: analizar, estudiar y actuar en consecuencia. Y sin faltar al respeto, considero muy necesario que la ciudadanía de la Isla expulse ese tipo de actitudes del Consistorio. Sin compasión alguna. Ya está bien de discursos parciales ante la prensa, acusaciones improvisadas en los plenos y vuelva usted mañana en los presupuestos municipales. Necesitamos una política de calidad, consensuada con la ciudadanía y realista frente a las posibilidades que nos ofrece nuestra ciudad y el entorno natural de la Bahía de Cádiz. De manera seria, sin tratarnos al pueblo de manera infantil, creyendo que con wiki-cosas y caras bonitas vamos a quedarnos satisfechos.
Sinceramente, espero que ustedes, los tres partidos mayoritarios causantes directos de la pérdida y mal uso de nuestra riqueza, desalojen sus puestos en las siguientes municipales; y sin puede ser antes, mejor. Pero, en cualquier caso, aceptando de antemano que ustedes consigan unos espléndidos resultados electorales, deberían tener en cuenta qué pensamos desde aquí abajo cuando están en el atril, allí donde el eco de su propia voz les impide saber qué gritamos. Puede que en un futuro les salve de ser una mancha en la Historia.
[1] *véase socialdemócrata. DIARIO Bahía de Cádiz
[2] *véase de clases medias.
