Es cierto que en las campañas electorales -este año aquí tenemos tres-, se llevan al límite enunciados, promesas y poses. No creo que se den las cosas casualmente, las campañas son diseñadas concienzudamente por equipos expertos, que además cobran un potosí por su trabajo. Así, no es que Teofila Martínez se equivoque y crea que el “Pont Neuf”, sí, el que unirá al mundo con Cádiz, es una obra, que aparte de innecesaria, esta pagada además de por los gaditanos, por los sevillanos, cacereños, sorianos y hasta por los turolenses, que también existen; no es eso, es que se ha pasado de frenada de forma consciente y metidos a eso de publicitar todo, pisan el acelerador a tope con la publicidad del “Pont Neuf”, y se gasta lo que no tiene para fijar una idea, los tirantes del puente son rubios casi blancos y los traen de Santander. Por otra parte, si no dan propaganda al susodicho puente, de que van lo van a hacer, porque tienen a la ciudad que funfona en vez de funcionar.
Por otra parte alguien se cree que es casual esa foto “casual” del candidato, ese no es casual, de PSOE de Cádiz, así a lo Brat Pitt, pero en triste y moreno, de medio lado, como queriendo decir “yo no he sido”. También se les olvidó poner en la orla de candidatos la profesión y curriculum del mencionado; mientras sabemos que hay abogados, profesores de universidad, arquitectos, del ínclito no sabemos nada, o quizás sea que de donde no hay, no se puede sacar.
Es cierto, cuando me enteré que traían a Susana Díaz, Presidenta y Secretaria Generala, a Cádiz, me asaltó la duda si la iban a pasear por las calles a la gaditana, con sus horquillas y to, o a la sevillana, cuestión lógica si pensamos que de allí nos llega la Señora; pero no, no la pasearon. Llego en un autobús, así protegida de las protestas en la puerta, habló, lo de apoyar a los candidatos del PSOE en la provincia, ná, al contrario fueron ellos lo que la arroparon, porque, oye, ni los presentó. Lo que si dejó claro que, la misma que hace una semana tachaba de machista a gobierno griego, no dudó en meter en campaña su género para arañar votos, y hasta su embarazo para ‘entender a las madres’. Sinceramente me costó trabajo creerme que fuera ella misma, sin ningún pudor, quien utilizará su embarazo en la campaña electoral, pero como decía nada es casual.
Siguiendo con las elecciones y las casualidades, no es casualidad que la llamada “izquierda”, en Cádiz, haya decidido que la próxima alcaldesa sea de Santander, de la calle no, de la región de Cantabria, no quiero culpabilizar a nadie, sobretodo porque ¿quién soy yo para eso?, sin embargo si me atrevo a decir aquello de “… y entre todos la mataron” y me refiero a la esperanza en Cádiz. Seguro que lo que pasa que de estas cosas no entiendo, que lo mío es más visceral que otra cosa, y que habrá más oportunidades en las que dar la talla, pero esta vez no se ha dado. Claro, es mi opinión, por eso lo escribo en mi columna. DIARIO Bahía de Cádiz Fermín Aparicio