Es verdad que cada vez tengo menos CERTEZAS y esto no tiene porque ser malo, simplemente es así, además en la DUDA está eso que te hace seguir viviendo y no dar por perdido nada. Hoy, domingo día siete de julio, tengo la primera CERTEZA, es falso que se cumplan doscientos setenta y cinco días desde que el siete de octubre de dos mil veintitrés, el ejército de Israel empezará su “guerra contra Hamas”. En Palestina hace setenta y seis años que todo empezó con la Nakba, tras la “descolonización” vergonzosa por parte de Inglaterra de sus colonias en Palestina con la bendición del resto de los países.
Otra CERTEZA, al hilo de la primera. Lo que sí ha pasado en Palestina desde el pasado siete de octubre hasta hoy, es que han sido asesinados más de dos niños cada hora, día a día, mes a mes, es decir un total de 15.000 pequeños y pequeñas muertos por el único delito de ser palestinos.
La primera DUDA que tengo va dirigida hacia los ciudadanos de Israel. Dudo de que las acciones dirigidas por el actual primer ministro y genocida sean respaldadas, de forma más o menos unánime, por sus habitantes, sean o no sean judíos, al menos me gustaría dudarlo.
Durante estos trescientos noventa y seis mil minutos que han pasado desde el siete de octubre, quizás desde mucho antes, tengo LA DUDA si de verdad el resto de países son conscientes de la apuesta que están haciendo por la destrucción de un mínimo Derecho Internacional.
Dos grandes guerras tuvieron que pasar para que hubiera, al menos eso parecía, un deseo compartido de ordenar el mundo, sus procedimientos, sus normas y leyes aceptadas, todo se está esfumando ante el genocidio, retransmitido en directo con la mirada hacia otro lado, cuando no con las bendiciones y las armas de esas grandes potencias. Me da la impresión que no son conscientes del verdadero peligro, o quizás sí.
no se dan cuenta de que por cada uno de los quince mil niños y niñas asesinados crece un tsunami de simpatía hacia el pueblo palestino
El último debate entre los dos candidatos a las presidenciales de los EEUU, aparte de las consideraciones que a todos nos sorprendió en lo referido a la idoneidad de salud mental de ambos, lo que nos vino a confirmar es otra CERTEZA, el “amigo americano” ni puede ni sabe desarrollar un papel de relevancia en un contexto internacional multilateralista. El momento en el que lo importante en el mundo se decidía y fraguaba en las embajadas de EEUU pasó a la historia. La fórmula añeja, con falta de ideas nuevas, se puso de manifiesto en ese debate, son historia, no futuro, y lo saben.
Tengo la CERTEZA de que la resistencia, en múltiples de sus formas, del pueblo palestino está más que legitimada, no solo es una opción, creo que es una obligación moral y material, se trata de sobrevivir.
La DUDA de la posibilidad que los USA, los sionistas, toda esa gente de mal vivir, puedan acabar con el pueblo palestino se convierte, muerto a muerto, en una CERTEZA, no lo conseguirán. No se dan cuenta de que por cada uno de los quince mil niños y niñas asesinados crece un tsunami de simpatía hacia el pueblo palestino. No se dan cuenta que por cada casa, escuela o carretera palestina destruida se abrirán miles de corazones que den cobijo a este pueblo. No se han parado a pensar que, hace ya bastantes años, fueron los culpables de la frase coreada por millones de voces de “Yanquis go home” con la Guerra de Vietnam, que después fueron los responsables del movimiento por la paz más importante que se ha dado contra la guerra del Golfo, y que hoy han conseguido que miles, millones de jóvenes y no tan jóvenes, universitarios y no, en todo el mundo les observen con vergüenza de compartir especie, pero con el máximo de simpatía y cariño hacia Palestina.
Tengo la DUDA de cuántos muertos más hacen falta, cuántos palestinos deben ser expulsados de sus casas, de sus campos, de cuánta vergüenza nos harán pasar al sentirnos personas, pero tengo la CERTEZA de que Palestina vencerá. DIARIO Bahía de Cádiz