“Sueño de una noche de verano”: (para los que no queráis utilizar el traductor de Google).
Hace apenas unos días, doña Teófila Martínez, la Teo en Cádiz, hablaba de cruceros, turistas y Cádiz. Y con estos calores estivales recordé una de las últimas escenas del ‘Decamerón’, de Pasolini, sí, cuando un diablo muy diablo empieza a defecar frailes en plan diarrea. Pues yo me imaginaba, mientras la presidenta de la Autoridad Portuaria hablaba, que era como King Kong pero en rubio, asomando su gran culo por la valla del muelle, igual que el diablo de la peli defecando, en vez de frailes, miles de turistas sobre mi ciudad. ¡Ains que mala es la calor!
Después de leer el artículo sobre la amenaza de las empresas inglesas de cruceros de cambiar el destino de Cádiz por otras ciudades, por cierto el autor decía que es culpa de los vecinos que no se muestran amables y acogedores con los turistas, esa misma noche de verano soñé, en medio de los primeros sudores y la contaminación sonora de mi calle.
… Rápidamente era convocada una reunión de urgencia del comité de crisis de cosas varias del Ayuntamiento presidido por don Humo García. Al mismo, junto a los concejales más ilustres del equipo de gobierno, era invitada por su notoriedad “la Teo” en calidad de “mater et mandonisima” de todo y de todos. Un único punto de orden del día: propuestas de actuación e iniciativas para contrarrestar la vil campaña contra el turismo en la ciudad.
Solo había una orden del jefe, para que no hubiera filtraciones y despistar a la prensa ansiosa de noticias, todo el mundo debía acudir disfrazado como si de celebrar una fiesta de disfraces se tratara. Justo a las doce de la noche, empiezan a llegar los convocados, debidamente disfrazados.
Don Humo García se esconde tras una columna del ayuntamiento disfrazado de “hombre invisible”, mientras observa cómo llega el concejal de Memoria Histórica con el tipo de requeté, acompañado por la concejala de Cultura que le ha quitado la toga, birrete y puñetas a un doctor en filosofía que tiene como vecino, y se ha puesto unas gafas de pasta negra para parecer una intelectual.
a los sin techo de la ciudad se les disfrazará con trajes típicos de los diferentes países visitantes, con sus correspondientes enseñas y banderines. Serán dispuestos en esquinas y casapuertas señaladas por su importancia
La Teo, tras sobrepasar la verja del muelle, toma el camino más corto por la plaza, llega disfrazada de pirata, con su parche, garfio, loro en hombro y tos sus avíos, hasta cojeando andaba.
Por las calles del Pópulo llega, como el conejo de Alicia, diciendo “no llego, no llego”, el concejal de Cofradías, que se autopisa la capa de penitente, y trae puesto el capirote para que nadie le reconozca; la concejala de Medio Ambiente, Parques y Jardines ¿de qué llega?, pues de árbol con patas…; el tipo escogido por el concejal de Comunicación es el de un micrófono de esos antiguos, en el que la cabeza es el micrófono en sí, grande, redonda, y el cuerpo de pequeño atril.
Después de largas disertaciones a cargo de la pirata, acuerdan ya de madrugada y antes del amanecer varias acciones, coordinadas por don Humo:
A) Tres días a la semana se formarán equipos de Ciudadanos (aunque ahora estén en el PP o FOX), que recibirán a pie de crucero a los turistas, vestidos de faralaes ellas, ellos con sombrero, contando chistes en inglés, francés, alemán y ruso (todos se reirán con amplias carcajadas, se van a enterar lo graciosos que somos, ha dicho por lo bajini la concejala de Cultura).
B) A propuesta del concejal de Cofradías se ha acordado que los día uno, diez veinte y treinta de julio, agosto y septiembre, el celebrar una Magna de visitas de grupos de turistas con sus correspondiente guías con sus paraguas, idea apoyada por el concejal vestido de requeté con una propuesta aplaudida por el resto: a los sin techo de la ciudad se les disfrazará con trajes típicos de los diferentes países visitantes, con sus correspondientes enseñas y banderines. Serán dispuestos en esquinas y casapuertas señaladas por su importancia. Don Humo y la pirata se apuntan como voluntarios para encabezar la Magna, junto a un escuadrón de gala de la policía municipal con antorchas de humo amarillo y azul.
Todos aprovechan para mostrar alegría por la recuperación del estadio de fútbol para el fascista Ramon de Carranza, si bien el concejal vestido de requeté, después de encajarse la boina, aclara, “el nombre Ramon de Carranza del estadio de fútbol municipal, no es por el primer alcalde fascista de Cádiz, es por un sobrino nieto de este, que se llamaba igual, nacido muchos años después del glorioso alzamiento…”. Una carcajada general despertó a la concejala de Parques y Jardines que se había quedado dormida.
Pasa el camión de la basura, me despierta de este sueño… DIARIO Bahía de Cádiz
Si a las sombras hemos ofendido,
no penséis sino esto, y todo está arreglado:
que vosotros no habéis sino dormido aquí
mientras estas visiones aparecían.
Y este débil y tonto tema,
producto sólo de un sueño,
gentiles señores, no lo toméis a mal.
(Shakespeare)