La novela policíaca es un género literario reciente, cuyos primeros cultivadores se remontan al siglo XIX, aunque sus antecedentes —por ejemplo, la novela picaresca— pueden buscarse tan remotamente como se quiera. También conocida como detectivesca, el interés de cada historia se basaba en la resolución de un crimen. Naturalmente, hubieron excepciones notables a este esquema narrativo, como la que constituyó la novela Crimen y castigo (Преступление и наказание, 1866), de Fiodor Dostoievskij, en la que se conocía la identidad del asesino desde las primeras páginas y en la que el interés estribaba en seguir los procesos mentales del protagonista, mientras trataba de huir de la policía. Pero, en líneas generales, los detectives siguieron los pasos del modelo establecido por el Sherlock Holmes de Conan Doyle y se enfrentaron, una y otra vez, a crímenes en apariencia insolubles que invariablemente quedaban resueltos hacia la última página de la historia. Como la repetición, tarde o temprano, provoca el aburrimiento, el género policíaco debía renovarse y, en las primeras décadas del siglo XX, surgió lo que se conoce como novela negra, con sus personajes angustiados moviéndose por los ambientes más sórdidos de las grandes ciudades, a la sombra del Crack de 1929 y la ley seca: políticos corruptos, pistoleros, fulanas y gangsters. El crimen organizado daría, a su vez, lugar a la siguiente especialización literaria, con las novelas de mafiosos, a partir de El Padrino (The Godfather, 1969) del escritor italoamericano Mario Puzo; una especialización a la que yo mismo he contribuido con mi novela Fenia, recientemente presentada en la Universidad de Cádiz.
El interés de los escritores hard boiled por reflejar las tensiones sociales de su época y la influencia de la literatura naturalista y costumbrista provocaría un alejamiento de aquel prototipo de detective tan popular unas décadas antes, que se dedicaba a resolver los crímenes gracias a unos poderes de deducción casi sobrenaturales, mientras fumaba una pipa en su gabinete; y en un esfuerzo por reflejar las duras condiciones de la calle y el lenguaje que se empleaba en ellas, los autores salpicaron sus historias de slang barriobajero. Igualmente, el género detectivesco dio lugar a la novela de agentes secretos; de hecho, algunas historias de Sherlock Holmes se habían apoyado en asuntos de espionaje. Entre sus epígonos, citemos brevemente a John Buchan con su personaje Richard Hannay, un aventurero que protagonizó varias de las historias del autor escocés a partir de Los 39 escalones (The Thirty-nine Steps, 1915); y, ya con el mundo dividido entre los bloques capitalista y soviético, recordemos a Ian Fleming, creador de James Bond, protagonista de sus historias a partir de Casino Royale (1954). Fleming, en sazón, fue corresponsal algún tiempo en Moscú y, durante la Segunda Guerra Mundial, trabajó para el Departamento de Inteligencia Naval de su país, experiencias que aprovecharía luego para sus novelas sobre el agente 007 con licencia para matar.
En general, los autores de novelas de espías pueden clasificarse en dos grandes grupos: los que no tenían ninguna relación previa con el mundo del espionaje antes de sentarse a escribir, y los que aprovecharon sus vivencias profesionales particulares para pergeñar la ficción posterior. A este segundo grupo pertenece el escritor de quien quería hablarles hoy: Viktor Suvorov. Su novela Aquarium (Аквариум), que es parciamente autobiográfica, apareció inmediatamente traducida al inglés (en Estados Unidos con el título Inside the Aquarium) y a otros idiomas, y aprovecho el presente artículo de Teléfono Rojo para animarles a la lectura de esta obra si son capaces de manejarse con la lengua de Shakespeare (y, ni que decir tiene, con la de Dostoievskij).
Viktor Suvorov es el seudónimo, o pen name, con el que publica sus libros Vladimir Bodganovitch Rizun, nacido el 20 de abril de 1947 en Barabash, un pueblecito de la región de Primorie (Unión Soviética), de padre ucraniano y madre rusa. Rizun fue agente del GRU, el servicio de inteligencia militar soviético[1].Tras hacerse miembro del partido comunista, comenzó a efectuar labores de inteligencia. En 1968 participó en la invasión de Checoslovaquia. Luego, continuó su carrera de espía en Génova y otras capitales. El 10 de junio de 1978, cometió defección y se pasó a los ingleses junto a su familia, aparentemente porque el GRU quería hacerle cargar con las culpas de un fiasco cometido en Suiza. Según otras versiones, esto no sería más que una excusa del propio Rizun, que habría sido reclutado por el espionaje británico, convirtiéndose así en uno de los desertores soviéticos más conocidos. En cualquier caso, este fue el momento en el que comenzó su exitosa carrera literaria, para la cual eligió el seudónimo de Viktor Sudorov, aconsejado por su editor, quien le recomendó que se buscara un apellido de tres sílabas que evocara resonancias bélicas entre los lectores[2]. Además, compaginó la escritura con la enseñanza de táctica e historia en una academia militar. En marzo de 2010, firmó el manifiesto Putin debe marcharse[3].
En 1985, Rizun/Sudorov publicó Aquarium, su novela más popular. Viktor Suvorov es también el nombre del protagonista de la historia, por lo que sus peripecias, a medio camino entre la verdad y la fantasía, devienen en una confesión biográfica. Qué hay de cierto y de falso en ella, sólo el autor lo sabe. En el prólogo, Rizun cita un dicho ruso con el que resume la filosofía de cualquier servicio secreto, idéntica también a la de cualquier organización mafiosa. “Nuestra regla es sencilla: entrar cuesta un rublo; salir, dos”[4]. La acción de la novela comienza en 1969, cuando Viktor Suvorov, un oficial que se distingue dirigiendo una compañía de tanques, es reclutado por su superior, el teniente coronel Kravtsov, para realizar labores de inteligencia. Suvorov ingresa en la tercera sección de Spetsnaz, las fuerzas militares de élite[5], y más tarde en el GRU. El Acuario del título es el apodo con el que Kravtsov se refiere, durante el siguiente diálogo, a los cuarteles generales del GRU, situados en Moscú:
“-…Hay investigadores buenos y hay malos. En el Acuario los investigadores son buenos… Si caes en sus redes, confesarás todo, incluso hasta lo que no hayas hecho. Pero… yo confío, Víctor, en que a nosotros nunca nos sucederá tal cosa, y por eso te hablaré un poco del Acuario…
-¿Cómo son los peces que nadan allí?
-Allí sólo los hay de una especie: pirañas.
-¿Usted ha trabajado en el Acuario?
-No, no he tenido ese honor. Puede que lo haga en el futuro… Allí, probablemente, consideran que aún no tengo los dientes lo suficientemente afilados. Bueno, atiende. El Acuario es el edificio central del segundo directorio del Estado Mayor General, es decir, del Directorio Principal de Inteligencia, el GRU. La inteligencia militar existe bajo nombres distintos desde el 21 de octubre de 1918. En ese momento, el Ejército Rojo ya era un organismo enorme y poderoso. Al ejército lo dirigía el Estado Mayor, su cerebro. Pero las reacciones del Estado resultaban lentas e imprecisas, por lo que el organismo era ciego y sordo. La información acerca del enemigo se obtenía de la Cheka.”[6]
Suvorov trabaja durante varios años como espía del GRU en la embajada soviética de Viena, donde participa con éxito en diversas operaciones de espionaje y de reclutamiento de agentes; así, consigue hacerse con un agente en la base aeronaval española de Rota. Estas peripecias las extrajo Rizun de su propia biografía, aunque en la vida real habrían ocurrido en Suiza y no en Austria. Rizun/Suvorov cambió las localizaciones y los nombres para proteger de posibles represalias por parte del GRU a los demás actores que habían participado en los hechos auténticos. Finalmente, Suvorov advierte —igual que le había sucedido a Rizun— que estaba siendo seguido por otros agentes y que había caído en desgracia, por lo que decide fugarse a Gran Bretaña.
Más allá de Aquarium, mencionemos también que Rizun es autor de varios libros históricos sobre la Segunda Guerra Mundial y el papel que la Unión Soviética jugó en aquellos acontecimientos. En sus libros, Rizun defiende la tesis de que Stalin usó a Hitler como abanderado de su lucha contra Occidente. Por eso, prestó apoyo a la Alemania nazi, a la vez que preparaba al Ejército Rojo para la guerra. Enterado de que Stalin estaba rearmándose a sus espaldas, no le habría quedado al Führer más remedio que emprender la Operación Barbarroja. La Unión Soviética sería, por tanto, la verdadera culpable de la guerra en Europa. Con tal hipótesis, Rizun ha logrado encender la chispa de la controversia entre los historiadores de varios países[7].
En cualquier caso, el mundo del espionaje siempre atrae la curiosidad de los lectores, por lo que no sería de extrañar que, en cualquier momento del futuro cercano, alguno de los libros de Rizun/Sudorov —que han vendido millones de copias en el mundo— se tradujese al español, tan pronto como algún editor avispado repare en la existencia de este polémico autor. Mientras tanto, quien quiera bucear en las páginas del Acuario de Viktor Sudorov tendrá que hacerlo en cualquiera de los idiomas a los que ha sido vertida esta novela, que son más de veinte[8].
BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA
CHECHKIN, Dmitry A. (2009): Pío Moa y Víctor Sudorov: sobre la historia de dos debates. Pío Moa and Víctor Sudorov: about history of two debates. Historia Contemporánea, núm. 38, págs. 219-237. Servicio editorial de la Universidad del País Vasco, Bilbao.
GRAMOV, Aliksandr; ySAMOZHNEV, Aliksandr (2003): Отца Путина записали в предатели, а он взрывал фашистские эшелоны. Некоторые польские газеты причислили его к власовцам (Tachan al padre de Putin de traidor, y sin embargo él hizo explotar convoyes fascistas. Algunos periódicos polacos lo adscriben a los hombres de Vlasov). Комсомольская Правда (08/08/2003). En: http://www.kp.ru/daily/23089/5494/ (página web consultada el 13 de enero de 2012).
LAQUEUR, Walter (1995): The uses and limits of Intelligence. With a New Introduction by the author.Transaction Publishers, New Brunswick, Nueva Jersey.
LURIE, V. M.; y KOTCHIK, V. YA. (2002): ГРУ. Дела и люди (GRU. Asuntos y personal). Colección Россиявлицах, Olma Media Group, Moscú.
POLMAR, Norman (1991): The naval institute guide to the soviet navy. Quinta edición. United States Naval Institute, Annapolis, Maryland.
READ, Christopher (2001): From Tsar to Soviets. The Russian people and their revolution, 1917-21. UCLPress, Londres.
SONIUK, Vladimir (2011): Виктор Суворов: ‘Россия может рухнуть завтра утром. Илидажесегоднявечером‘ (Viktor Suvorov: ‘Rusia puede hundirse mañana por la mañana. O incluso hoy por la tarde’). BBC (28/04/2011). En: http://www.b-b-c.com.ua/exp.php?ni=4006&type=1 (página web consultada el 13 de enero de 2011).
SUVOROV, Viktor (1988): Spetsnaz. The inside story of the soviet special forces. W. W. Norton & Company, Nueva York.
SUVOROV, Viktor (2007): Аквариум (El acuario). ACT, Moscú.
[1] ГРУ (Главное Разведывательное Управление, es decir, Directorio Principal de Inteligencia). Este organismo fue creado el 21 de octubre de 1918 bajo la supervisión de León Trotsky. El GRU actuaba independientemente del KGB y sigue activo en la actualidad, dependiendo funcionalmente del Ministerio de Defensa de la Federación de Rusia. Para más detalles sobre el GRU, véase LAQUEUR (1995): The antagonists: KGB and GRU, capítulo 8, pág. 233 y ss.; POLMAR (1991), pág. 33 y ss.; y LURIE y KOTCHIK (2002).
[2]Aliksandr Vasílievitch Suvorov (1729-1800), militar ruso, resulta conocido por el hecho de que fue uno de los pocos grandes generales de la historia que nunca perdió una batalla.
[3]De paso, digamos que Rizun sostiene que el padre de Putin colaboró con los nazis —véase GRAMOV y CAMOZHNEV (2003)—. Más recientemente, Rizun ha culpado a Putin, en una entrevista exclusiva a la BBC, del accidente aéreo de Smolensk, en el que encontraron la muerte el presidente polaco Kaczynski y otras 96 personas. Para más detalles sobre el particular, véase SONIUK (2011).
[4]“Законунаспростой: вход —рубль, выход— два”.En SUDOROV (2007), pág. 3.
[5]En ruso, Спецназ, acrónimo de Специальное назначение: Designación especial. Se usa en este idioma para referirse a las fuerzas especiales del ejército y de la policía en Rusia y otras ex repúblicas de la URSS. Paramásdetalles, véaseSUVOROV (1988).
[6]“-…Есть хорошие следователи и есть плохие. В Аквариуме следователи хорошие… Если попадешь на конвейер, то сознаешься во всем, включая и то, чего никогда не было. Но… я верю, Виктор, что мы с тобой на конвейер не попадем, и потому тебе об Аквариуме немного расскажу…
– Что за рыбы там водятся?
– Там только одна порода – пираньи.
– Вы работали в Аквариуме?
– Нет, этой чести меня не удостоили. Может, в будущем… Там, наверное, считают, что зубы у меня еще недостаточно остры. Итак, слушай. Аквариум – это центральное здание 2-го Главного управления Генерального штаба, то есть Главного разведывательного управления – ГРУ. Военная разведка под различными названиями существует с 21 октября 1918 года. В это время Красная Армия уже была огромным и мощным организмом. Управлял армией Главный штаб – мозг армии. Но реакция Штаба была замедленной и неточной, оттого что организм был слепым и глухим. ИнформацияопротивникепоступалаизЧК.” En SUDOROV (2007), págs. 68 y 69.La Cheka (ЧК, iniciales de Чрезвычайная Комиссия, es decir, Comisión Extraordinaria) era como se conocía a la policía secreta soviética entre los años 1917 y 1922. Para más detalles sobre la Cheka, véase READ (2001), pág. 107 y ss., en el capítulo 9, The Bolshevik dictatorship, apartado The Cheka. También recomiendo la novela sobre la guerra civil española Madrid de Corte a checa (1938), de Agustín de Foxá.
[7]Para un análisis crítico acerca de los libros históricos de Rizun/Sudorov y una interesante comparación de su biografía con la del escritor Pío Moa, véase CHECHKIN (2009).
[8] Véase SUDOROV (2007), Аннотация.