Por “un convenio digno” y “la recuperación de derechos perdidos”, la industria del metal de la provincia de Cádiz ha parado mayoritariamente este martes, y lo volverá a hacer el miércoles, secundando la huelga que UGT y CCOO han convocado para presionar a la patronal, la Federación de Empresarios del Metal de Cádiz (Femca), ante el “bloqueo” de la negociación del nuevo convenio colectivo (del que dependen alrededor de 30.000 trabajadores).
De este modo, en la primera jornada las grandes empresas tractoras de la Bahía de Cádiz y del Campo de Gibraltar (Navantia, Airbus, Dragados Offshore, Acerinox…, los sectores industrial, siderúrgico, naval, metalúrgico, aeroespacial, portuario y químico) “han tenido que paralizar su actividad por el alto seguimiento en la industria auxiliar de la huelga”, que en paralelo, han ocasionado durante la mañana notables problemas de tráfico en diferentes puntos por las protestas a las puertas de varios centros como en los astilleros de Cádiz (cortando la en la carretera industrial) y San Fernando.
Y para este miércoles día 10 se prevén nuevos cortes de tráfico en la capital ante la manifestación convocada desde Navantia y hasta la sede de Femca. Una huelga que podría convertirse en indefinida a partir del 16 de noviembre si patronal y sindicatos siguen distanciados.
En un breve comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, Antonio Montoro, secretario de FICA-UGT en Cádiz, sindicato mayoritario en la mesa de negociación, asegura que la incidencia de los paros convocados “está siendo del cien por cien desde la medianoche en todas empresas con turno de noche y ha continuado así en el arranque del turno de la mañana”. “El apoyo está siendo masivo, la jornada se desarrolla sin ningún incidente y hay que agradecer a los trabajadores que estén secundado esta huelga en defensa de su convenio colectivo”, ha apostillado Montoro.
Por su parte, el sindicato provincial de Industria de CCOO rechaza la actitud de Femca en el proceso negociador, y que “tuvo su última expresión” en la sesión de mediación celebrada en el seno del Sercla el pasado viernes, en la que no se logró ningún acuerdo que desconvocara estas movilizaciones. En esa reunión “se planteó una propuesta razonable, donde los sindicatos pretendíamos la no pérdida del poder adquisitivo y el inicio de una negociación para el año 2022 con más concreción”, se asegura.
“Desde el inicio de las negociaciones, la actitud de la patronal ha sido un continuo despropósito, en un burdo intento de recortar los derechos y las condiciones de trabajo de las plantillas de un sector clave para el tejido productivo de nuestra provincia”, consideran desde Comisiones, y entiende que la huelga “se ha convertido en la única respuesta” y que a los paros de esta semana “serán un toque de atención del que deben tomar nota los empresarios, para evitar las consecuencias de la huelga indefinida”.
“Una vez más los trabajadores estamos demostrando que la unión hace que la respuesta, ante la cerrazón de los empresarios, sea fuerte y contundente paralizando por completo la actividad de los polígonos industriales de San Fernando, Campo de Gibraltar, Cádiz, Puerto Real y El Puerto de Santa María, al igual que otros polígonos del resto de la provincia”, añaden desde CCOO.
Los sindicatos mayoritarios aseveran que su intención es la de “seguir apostando por la negociación, pero dentro de unos parámetros razonables”, que “nos permita a la clase trabajadora el mantenimiento del poder adquisitivo”; “no somos los trabajadores los que regulamos los índices de los precios (luz, carburantes etc.) pero si los que sufrimos el aumento de los precios. Por lo tanto, entendemos que nos asiste el derecho de reivindicar un convenio justo”, se sentencia.
CGT LLAMA A NO FIRMAR EL CONVENIO “A ESPALDAS DE LOS TRABAJADORES”
Y entre tanto, CGT denuncia que los trabajadores “no conocen el contenido ni la situación en que se encuentran las negociaciones ni saben los motivos de por qué no se hacen las asambleas necesarias de los obreros”.
En concreto, desde CGT Campo de Gibraltar se dice que se apoya “con todas nuestras fuerzas” la convocatoria de huelga de UGT y CCOO “porque sólo la movilización y organización decidida de todo el conjunto de trabajadores del metal en sus diferentes centros de trabajo será capaz de poner freno a esta nueva ofensiva de la patronal”. Pero “para conseguir esta movilización masiva y asegurar el éxito de la huelga, el primer paso tiene que ser la convocatoria y organización de asambleas unitarias de trabajadores; es necesario que los sindicatos que negocian el convenio se comprometan seriamente a respetar las decisiones de las asambleas y a no firmar el convenio a espaldas de los afectados”, se repite.
El “objetivo, premisa y consigna” de este sindicato para este nuevo convenio “ha de ser la lucha por llevar a casa un salario digno en la jornada ordinaria y por el control, vigilancia y cumplimiento de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales”.
Según la versión sindical, la patronal de la pymes del metal quiere eliminar derechos conseguidos Y entre esos objetivos de los empresarios se resaltan: un incremento salarial cero para este 2021; eliminar una paga extra en 2021 y 2022; aumentar la jornada anual ocho horas; o la creación de un contrato nuevo “con un salario inferior”. “No estamos dispuestos a perder lo que tenemos, todo lo contrario, tenemos que recuperar mejoras salariales y sociales”, se incide.
LA FEMCA EXPRESA SU “VOLUNTAD DE NEGOCIAR DE MANERA LEAL”
“A pesar de lo que se traslada desde otras fuentes, nosotros –apuntan por su lado desde la Femca- hemos puesto todo lo que teníamos capacidad de poner encima de la mesa, trasladando la voluntad de negociar de manera leal, incluso en momentos en los que esa negociación, además, significaría reactivar un convenio que no existe, porque no está vigente desde el 22 de septiembre de este año; lo reactivaríamos para que tuviéramos unas reglas del juego claras”.
Así, desde la patronal del sector, en el comunicado remitido tras el fracaso de la mediación en el Sercla, se lamenta que en el discurso de los sindicatos “se mantengan afirmaciones como que pretendemos eliminar pagas extras, que fue una posición que se mantuvo al principio de la negociación, pero que ya estaba totalmente superada y que no se había vuelto a abordar, lo mismo que se mantiene con respecto a las horas extraordinaria; creemos que como es algo muy gráfico de explicar, lo mantienen en su discurso que llega rápido y se entiende, aun cuando ya nosotros habíamos desestimado esa posición. Eso estaba superado por más que aparezca en las octavillas y se use de argumento”.
En este punto, Femca asevera que su voluntad es la de negociar “en un marco en el que partamos de una base de negociación en la que ninguna parte le imponga a la otra temas que tratar de manera obligatoria”.
“En resumen, mantenemos nuestro más firme rechazo a la huelga que llega en un momento en el que hay que remar para que venga carga de trabajo, podamos volver a índice de ocupación que teníamos en otros momentos, hacer el sector competitivo y ser un ejemplo de la modernización de las relaciones laborales, pero este no es el camino”, se quejan los empresarios.
NAVANTIA CENSURA LA ACCIÓN DE LOS PIQUETES INFORMATIVOS
Con ocasión de la primera jornada de huelga, ante los hechos ocurridos en los accesos de los astilleros de Cádiz, San Fernando y Puerto Real, Navantia ha salido públicamente lamentando “la acción de los llamados piquetes informativos, que han vulnerado el derecho de los trabajadores a acceder a su puesto de trabajo”.
En la entrada a las plantas, asegura, “se han producido momentos de tensión impidiendo la entrada libre a los empleados, tanto de industria auxiliar como de Navantia. El derecho de huelga, que respetamos absolutamente, debe ser compatible con el ejercicio de los derechos individuales”.
Además, se afirma que las acciones emprendidas “han puesto en riesgo no sólo la integridad física de las personas, con hogueras a las puertas de los astilleros, sino de los propios centros de trabajo, ya que se ha impedido la entrada de servicios esenciales”.
Y se recuerda que en los astilleros gaditanos “el mantenimiento de servicios esenciales persigue garantizar el cumplimiento de los compromisos contractuales y, de este modo, evitar poner en riesgo futuros contratos que generan carga de trabajo”.
Finalmente, Navantia cuestiona que la falta de acuerdo en la negociación del convenio colectivo sectorial entre Femca y los representantes de los trabajadores “derive en perjuicio de una actividad económica esencial para la Bahía”. Por lo tanto, anima a ambas partes “a continuar la negociación con vistas a acordar un nuevo convenio”.