En la cuarta jornada de paro de trabajadores de la industria auxiliar de los astilleros gaditanos, la Federación de Empresarios del Metal de la provincia de Cádiz (Femca) ha confirmado su amenaza de cierre patronal: ha decidido que si el resultado de la votación que se produzca el viernes en Navantia Puerto Real y San Fernando mantiene la paralización de la producción, se respetará el plazo de 24 horas que marca la ley, “pero se procederá al cierre (el sábado) para evitar una catástrofe que ya se encuentra muy avanzada”.
Se salva el caso de la factoría de la capital, donde este jueves se ha celebrado una votación promovida por su comité de empresa en la que ha ganado “de manera unánime” el voto a favor de seguir trabajando, lo que para los empresarios de contratas “manifiesta claramente el sentir de los verdaderos trabajadores del sector en la Bahía”.
El cierre patronal es un medio de presión laboral utilizado por los empresarios, consistente en la clausura temporal de sus centros de trabajo, imposibilitando a los trabajadores la realización de su actividad laboral.
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, la Femca informa de una asamblea extraordinaria de la industria auxiliar naval celebrada en un “clima de indignación” hacia lo que las empresas consideran “abandono al verdadero tejido productivo del sector en la situación del paro ilegal en el que estamos”.
Desde el lunes, la Coordinadora de Profesionales del Metal de la Bahía de Cádiz promueve la paralización de la actividad en el astillero puertorrealeño y el de La Isla (en el primero se trabaja en varias plataformas de eólica offshore y en La Isla en las corbetas para Arabia Saudí) hasta que “se readmita a los trabajadores despedidos como represalia” tras las protestas de la pasada semana (se cortó durante un rato el paso al puente Carranza); varios de ellos han acampado en la entrada a Matagorda. De este modo, a la demanda de carga de trabajo “digna” y al cumplimiento del convenio, se suma ahora esta exigencia, y además, que se haga una auditoria externa a Navantia “y que se aclare por qué no se logra traer faena”.
Esta movilización está respaldada por la Confluencia Sindical de la Bahía de Cádiz (que agrupa a CGT, SAT, Ustea, CNT El Puerto, CTA, CPM y Autonomía Obrera) o el alcalde de la capital, José María González ‘Kichi’ (que quiere reunirse con sus homólogos de la comarca), pero la rechazan rotundamente los comités de empresa de las tres factorías.
NO SE PAGARÁN LOS DÍAS NO TRABAJADOS
En esa asamblea extraordinaria de la industria auxiliar naval, “con una alta participación”, se ha debatido en profundidad sobre cómo se ha llegado a la situación actual y qué soluciones existen “para que el tejido empresarial no se pierda en una provincia y en una zona donde el desempleo tiene unas tasas tan altas y donde el trabajo industrial es el que más estabilidad y remuneración supone”.
Al respecto, las empresas del sector animan a los trabajadores a que se presente denuncia ante la Policía “las amenazas, insultos, secuestros y lesiones” y que trasladen a sus sindicatos “la manera de la que se les está impidiendo trabajar”.
Unánimemente, además, se ha decidido no renumerar ninguna de los días no trabajados “ya que no se podrán facturar los trabajos a Navantia y no han sido jornadas efectivas de trabajo”. Esta decisión, “dolorosa” para las empresas, se sentencia desde la Femca, “es la única solución para mantener el empleo, las empresas abiertas y permitir mantener los escasos márgenes de los trabajos actuales”.