Navantia ha perdido el concurso abierto por la Armada de Estados Unidos para la construcción de fragatas. El astillero italiano Fincantieri se ha adjudicado este contrato de unos 5.000 millones de euros que, como viene repitiéndose últimamente en la construcción de buques a nivel internacional, no iba a suponer carga de trabajo para los astilleros públicos españoles, ya que sí o sí se iban a desarrollar en suelo norteamericano. Navantia aportaba en su alianza con General Dynamics el diseño de las F-100.
Sin embargo, el PP gaditano no ha dudado en hacerse eco de este varapalo, de mostrar su “decepción y preocupación” y por supuesto de culpar de todo al Gobierno central de PSOE y Unidas Podemos.
“PSOE y Podemos están avocando a nuestra provincia a la ruina y con su incapacidad cierra la puerta del futuro tanto a nuestros astilleros como a la industria auxiliar naval”, alerta la presidenta del PP provincial, Ana Mestre, que ha tildado esta noticia de “jarro de agua fría para Cádiz”, al tiempo que ha repetido que “el pacto Sánchez-Iglesias no es alentador para la provincia”.
Esta política de derechas interpreta que el devenir que está teniendo Navantia desde que gobierna el PSOE “nos lleva de nuevo a las peores épocas de los astilleros de la Bahía con diques vacíos y pérdidas de empleo”. Así, ha incidido que la pérdida del contrato con EEUU “es otra más de las grandes oportunidades de empleo fallida desde que gobierna Pedro Sánchez”, en referencia a los contratos de otro petrolero o el de las fragatas australianas; además afirmar “cómo se puso también en serio peligro el contrato con Arabia Saudí”.
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, quien está colocada también como delegada del Gobierno de la Junta de Andalucía en Cádiz, lamenta que Pedro Sánchez “está echando por tierra todo el trabajo que desarrolló el Gobierno de Rajoy en favor de la industria naval en nuestra provincia que tenían ante sí unas grandes expectativas de empleo y futuro”. Sin embargo, “el actual Gobierno no ha sido capaz de cerrar ni un solo nuevo contrato de construcción naval; lo que es debido tanto a su falta de interés como a las pésimas relaciones internacionales que mantienen con países como Estados Unidos”.
Reitera que hace un año ya se alertó de que se podía haber puesto en riesgo este contrato con EEUU tras la decisión del Gobierno de España de retirar la fragata Méndez Núñez del Golfo Pérsico “y no acompañar a un grupo de combate estadounidense en unas maniobras; una circunstancia a la que el gobierno socialista quitó importancia entonces”.
Al respecto, los populares van a presentar en el Congreso una pregunta para que el Gobierno de coalición dé cuenta de los motivos de la pérdida de estos contratos y las gestiones que está llevando a cabo para garantizar la carga de trabajo en los astilleros de la Bahía.
Además, Mestre exige a Pedro Sánchez y a Pablo Iglesias que expliquen su posicionamiento ante la pérdida de este contrato; dice además que espera que “no se estén anteponiendo los intereses partidistas de un gobierno de izquierda radical a los puestos de trabajo de una industria como la naval en la Bahía de Cádiz que tantos empleos directos e indirectos genera”. “Ya la crisis del Covid-19 nos dejará muy debilitados y la puntilla no nos la puede dar el Gobierno de España”, agrega.
En el mismo sentido, y con un discurso digno de manual de partidos y medios reaccionarios, el portavoz municipal del PP en San Fernando, José Loaiza, afirma que “la presencia en el Ejecutivo de España de un partido comunista, con vínculos ideológicos y económicos con dictaduras radicales de izquierdas como Venezuela e Irán, ha sido decisivo a la hora de que EEU se decantase por Italia, pese a que el modelo ofertado por los italianos partía en inferioridad de condiciones respecto a un potente diseño español, basado en la fragata F-100 que es la que mejor ha integrado el sistema de combate Aegis, de Lockheed Martin, el cual se instalará en la futura fragata estadounidense”.
Además, Loaiza exige a la alcaldesa de La Isla, Patricia Cavada, del PSOE, que muestre “oficialmente” al Gobierno central “el malestar ciudadano por este duro varapalo a los intereses económicos de nuestra ciudad”.
Con todo, y pese a lo que diga el PP, Navantia continúa manteniendo relaciones comerciales con la US Navy, y sigue ocupándose en la misma Base Naval de Rota del mantenimiento de destructores de EEUU que integran el llamado escudo antimisiles de la OTAN, y negocia la incorporación de dos barcos de guerra más al contrato.
LOS CONTRATOS “COMPROMETIDOS” PARA LA BAHÍA
Esta misma semana, los dos diputados nacionales del PP de Cádiz han pedido al Ministerio de Defensa que “no vaya a dar de lado” a los contratos comprometidos con Navantia para la construcción en el astillero de Puerto Real de un Buque de Acción Marítima (BAM) y el Transporte Logístico Ecológico y Trivalente (TLET).
La derecha cuestiona que en la última respuesta que ha tenido del Gobierno sobre estos temas “sólo ha aportado más incertidumbre y dudas al respecto ya que sólo se hace una nueva y tibia declaración de intenciones sin concretar ni aportar ni un solo dato sobre la garantía de carga de trabajo en los astilleros gaditanos”.
Actualmente, Matagorda tiene en cartera varias plataformas eólicas y comparte con el astillero de San Fernando faena de las controvertidas corbetas para Arabia Saudi, y con el astillero de Cádiz trabajos de reparación de cruceros.