Al hilo de la redacción del nuevo Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) del Parque Natural Bahía de Cádiz, Ecologistas en Acción (que ya ha trasladado un “ambicioso proyecto” para ampliar este espacio, extendiéndolo un 141% respecto a su superficie protegida actual), ha presentado también alegaciones con el objetivo de fomentar la acuicultura extensiva tradicional de estero “como sistemas de preservación de la biodiversidad y como motor de creación de empleo”.
“En los tiempos en los que estamos inmersos en la Bahía de Cádiz, debido a las nefastas perspectivas industriales que se vislumbran, y, por ende, al desastroso panorama de empleo, hay que volver la vista a nuestros propios recursos naturales”, entiende este colectivo verde.
Para Ecologistas, los beneficios de la acuicultura tradicional en esta comarca son extensos: crea una nueva economía empresarial local y, por ende, nuevos puestos de trabajo; permite comprobar la calidad y trazabilidad del pescado producido y de dónde proviene con exactitud; mantiene los sistemas naturales; reduce la presión sobre la pesca de determinadas especies y mejora la alimentación de la población.
Es, por ello, que según asegura en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, ha solicitado a las administraciones “un análisis de las causas del retroceso de la acuicultura extensiva tradicional de esteros en el Parque Natural”, a la vez que demanda medidas “para conservar y potenciar la acuicultura tradicional de estero, que es una de las esencias de la provincia de Cádiz”.
“LA ACUICULTURA ES UN SECTOR QUE ESTÁ CRECIENDO ACELERADAMENTE”
Las actividades primarias tradicionales, vinculadas al aprovechamiento de los recursos naturales –salinas y acuicultura tradicional extensiva de esteros- se consideran elementos esenciales para garantizar la conservación de dichos recursos, siendo en muchos casos, el factor que ha modelado el paisaje y potenciado los valores naturales. En este sentido, desde Ecologistas en Acción se apuesta por consolidar modelos sostenibles de aprovechamiento que consideren la multifuncionalidad de los servicios que los ecosistemas del espacio prestan al bienestar humano y que compaginen la puesta en valor de las prácticas culturales tradicionales con la incorporación de nuevos sistemas favorables a la conservación de los recursos naturales en el actual contexto de cambio global.
En este sentido, se asegura que la acuicultura es el sector de producción alimentaria que está creciendo más aceleradamente en el último decenio. Existen varios tipos de acuicultura dependiendo de las especies que se cultivan (peces, algas, almejas, ostras, camarones y un largo etc.); o de las infraestructuras donde se cultiva y del tipo de alimentación (extensiva, semi-intensiva e intensiva).
Sin embargo, en el Parque Natural Bahía de Cádiz “tan solo el 10% de la superficie de las salinas existentes están destinadas a acuicultura”. Para los ecologistas “es primordial el aprovechamiento de los recursos que nos aporta este sistema natural, al darse las condiciones ecológicas para la actividad productiva”; al tiempo que se pone de relieve el hecho de que el aprovechamiento de estas zonas “debe darse potenciando la producción y comercialización de especies autóctonas, con un alto consumo en el mercado”.
Precisamente España es un gran consumidor de pescado y marisco, y más de la mitad del consumo nacional proviene de importaciones, “teniendo, por tanto, un sistema muy dependiente”. Pero es que también la acuicultura intensiva y semi-intensiva depende de los piensos importados, “lo que aumenta el valor ecológico y económico de la acuicultura de estero extensivo, ya que se basa en la producción natural”. “La producción autóctona de alimentos debe convertirse en una necesidad estratégica, como lo ha puesto en evidencia la reciente pandemia”, apostilla esta asociación conservadurista.
Además, Ecologistas defiende que el fomento de la acuicultura sostenible exige crear y mantener “ambientes favorables”, en particular los dirigidos a asegurar el desarrollo y fortalecimiento constante de las capacidades de los recursos humanos; es, por ello, que se pide a las administraciones “el desarrollo de estrategias específicas que favorezcan la adaptación de los cultivos marinos a las características ambientales del espacio protegido y, en particular, el fomento de técnicas de producción acuícola que preserven la morfología y paisaje de las salinas y esteros tradicionales, así como su rica biodiversidad”.
De la misma manera, se ha propuesto entre las alegaciones al PORN que no se autoricen en el Parque Natural nuevas instalaciones de cultivos marinos en régimen intensivo y semi-intensivo, cuyas instalaciones -balsas profundas, redes protectoras, oxigenadores…- y aportes de pienso “afectan a la calidad de las aguas y perjudican a las especies autóctonas, sobre todo, a la avifauna”.